El antes y el después del emprendimiento en la Marina de Empresas de Juan Roig
Esta semana uno de los mayores ecosistemas emprendedores de Europa, Marina de Empresas, ha celebrado su quinto aniversario. El empresario Juan Roig, creador y mecenas de este polo innovador en la ciudad de València, ha destinado en estos cinco años 100 millones de euros de su patrimonio personal en las tres iniciativas que la integran: la universidad y escuela de negocios EDEM, la incubadora y aceleradora de startups Lanzadera y la sociedad de inversión Angels.
Durante ese periodo ha contribuido a la creación de un gran hub innovador en la Marina de València. Tras la llegada de Marina de Empresas en 2015, varias empresas e iniciativas emprendedoras se han ido estableciendo también en este espacio. Nos preguntamos cómo ha cambiado este ecosistema emprendedor en los últimos años y su repercusión en la capital del Turia.

Uno de los pilares de este polo de atracción de empresas es Lanzadera. Desde sus inicios en 2013 la aceleradora ha prestado apoyo a más de 500 empresas, aportando 15 millones de euros de financiación en préstamos. Entre todas las startups han conseguido generar más de 2.250 puestos de trabajo directos, así como inversión externa de más de 130 millones de euros.
Primer año de Lanzadera
En su primera edición, cuando su sede aún estaba ubicada en la calle Serpis nº66-68 de Valencia, acogió a 15 proyectos emprendedores a los que ayudó con una inversión que podía llegar a los 200.000 euros. Una de estas primeras empresas fue Vivood, el primer hotel-paisaje de España ubicado en el valle de Guadalest en Alicante. «El primer año fue especial y aprendimos juntos. Lanzadera acaba de abrir puertas por lo que fue un año intenso en el que ellos también eran emprendedores», relata Daniel Mayo, CEO y fundador de Vivood.
Recuerda que en esa primera edición «todo el mundo, hasta los trabajadores de Lanzadera, estaban llenos de ilusión» y que primaba el «ambiente familiar» ya que eran pocos los proyectos que formaban parte del programa de aceleración y donde el propio Juan Roig interactuaba con las startups. Explica Mayo que durante ese primer año tuvieron «un buffet libre» de formación y actividades para «aprovechar y aprender lo que quisieras». «Tú eras quien tenía que decidir el grado de aprovechamiento de esa experiencia», apunta el CEO de Vivood.
Apunta que desde entonces, ha visto «como Lanzadera crecía al igual que lo hacía mi empresa». Señala que la aceleradora «ha sabido escuchar a los emprendedores» y adaptarse a las necesidades de estos. «Ha pasado de un sueño en el que estaba todo por hacer y por decidir, a ser una auténtica realidad. Una perfecta máquina adecuadamente engrasada donde todos los protocolos y todos los servicios están dispuestos para ayudar a los emprendedores», resalta Mayo, quien apunta que en cuanto a Vivood, «siguiendo el modelo de calidad total y centrándose en el cliente, hemos pasado de ser solo yo y no facturar nada, a ser en seis años más de 70 trabajadores y facturar más de 3,5 millones de euros».

Daniel Mayo, CEO de Vivood, en su primer año en Lanzadera en la anterior sede de la calle Serpis de València.
Lanzadera ahora
En su más reciente edición que ha empezado este mes de septiembre, Lanzadera ha acogido a 130 startups, multiplicando por 5 el número habitual de seleccionadas en sus ediciones previas. Con esta nueva entrada, 200 empresas se ubican actualmente en sus instalaciones, consolidando a Marina de Empresas como uno de los principales ecosistemas emprendedores de Europa.
A su vez, la aceleradora de empresas de Juan Roig, ha cambiado su estrategia para captar a más empresas y emprendedores y ayudarles a superar la crisis del coronavirus. Un cambio que empieza por la aportación que el propio presidente de Mercadona realiza a la plataforma de emprendimiento. Esta pasará de los casi dos millones invertidos durante 2019 a los 10 millones de euros anuales que aportará a partir de este año. Una cuantía que equivale casi a toda la inversión realizada por Roig desde el nacimiento de Lanzadera en 2013, unos 15 millones de euros.
Una de las nuevas startups que comienzan con Lanzadera es Solver, empresa que ofrece una solución basada en inteligencia artificial y aprendizaje automático para que las empresas, por ejemplo, supermercados, puedan realizar una correcta previsión del suministro de mercancías o de la demanda de sus productos y así ajustar mejor sus stocks. También ayuda a la automatización de numerosos procesos y utiliza técnicas de visión por computador con tecnología puntera de deep learning.
Solver ha empezado en el programa en la fase Growth del programa de Lanzadera, la cual tiene el objetivo de hacer crecer a empresas que han consolidado su modelo de negocio. «El inicio en Lanzadera ha sido intenso. Hay muchas actividades lo que hace que entres en un entorno de dinamismo semanal en el que siempre hay algo que hacer», expone Pablo Negre, CEO de Solver, quien apunta que lo primero que hace la aceleradora es asignar un tutor a cada startup para guiarla «en aquello que tu consideras que necesitas reforzar. En nuestro caso ha sido la parte de marketing y desarrollo de negocio».
Apunta Negre que decidieron entrar en Lanzadera porque «es un ecosistema innovador muy grande en Valencia y queríamos aprovechar todo el tráfico de empresas que pasan para generar contactos y negocio». En esta línea, indica que entrar en la aceleradora de Juan Roig es como lograr «un sello de calidad» que permite «a potenciales clientes tener garantías de que somos una compañía que tiene futuro«. El objetivo que se marca Solver en Lanzadera es «crecer y multiplicar nuestras oportunidades de negocio».
Al igual que Solver, los 130 proyectos que han entrado en esta edición tienen la oportunidad de crecer y mejorar en las distintas fases de aceleración. A su vez, las startups seleccionadas podrán recibir desde ayudas de 1.000 euros hasta financiación por valor de 500.000 euros, cifra que se ajustará a las necesidades concretas de cada una.
Polo de atracción de talento
Ambos emprendedores comparten la opinión de que Lanzadera y Marina de Empresas suponen un gran beneficio para la ciudad de València. «Logras atraer talento a la ciudad lo que genera un gran impacto», indica Daniel Mayo, quien defiende que ese conocimiento generado en el ecosistema emprendedor de La Marina acaba vertiéndose en la capital del Turia. «Es un camino a medio y largo plazo cuyos resultados ya estamos viendo. Están situando a València en el mapa», indica el CEO de Vivood.
Del mismo modo, apunta Pablo Negre que «Marina de Empresas es un elemento tractor para la economía y el empleo de la ciudad». Señala el CEO de Solver que se está atrayendo talento lo que «afianza a València como un hub y polo de innovación y emprendimiento, lo que generará riqueza y empleo».
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