El funcionamiento del sector audiovisual es uno de los más complejos que existen. Y, misterios de la vida, en la Comunitat tenemos la habilidad de complicarlo más. Hay incluso quien niega la propia existencia de un sector audiovisual valenciano.

Con la idea de intentar entenderlo todo mejor, hablamos con José Luis Moreno, el máximo responsable público de todo lo que concierne a una industria con un gran potencial de creación de empleo.

En 2018 se vivía un momento de optimismo por la llegada de À Punt. Sin embargo, parece que el sector está en crisis otra vez, bueno, la crisis de siempre. ¿Estás de acuerdo con este punto de vista?
– A medias. Ese sentimiento de crisis está en el ambiente, pero no sé hasta qué punto es real. El sector audiovisual valenciano tiene varias “patas” en las que apoyarse dentro de la Administración de la Comunitat.

No deben ser las únicas, porque no puede vivir solo del entorno local, tiene que buscar también producir fuera y las empresas sacar rentabilidad en otros campos. Pero la “pata” más importante es la televisión autonómica, porque es la que tiene mucho más presupuesto y puede dar continuidad empresarial a la producción.

– Empar Marco dijo que À Punt sería la locomotora del audiovisual valenciano.
– Debe serlo. Pero no hay que caer en el error en que ya se cayó: muchas productoras dependían única y exclusivamente de Canal 9. Tiene que ser una parte del negocio, pero no todo el negocio.

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