«Las élites -políticas- no están preparadas para gestionar algunos procesos políticos», como el brexit, apuntó hoy la investigadora de la Universidad de Zurich, Yanina Welp, que participó en el ciclo La democracia hoy: repensar la política en tiempos turbulentos, en la Universitat Jaume I (UJI). Welp puso de relieve que esa falta de capacidad de gestión de determinados procesos es un déficit de las clases dirigentes no de los ciudadanos que expresan su opinión en los referéndums.

Welp considera que es erróneo trasladar el problema a los ciudadanos, cuestionando si están preparados e informados para tomar decisiones complejas, como la planteada. Lo que es preciso es que se habiliten «los mecanismos necesarios para regular y garantizar que se den las mejores condiciones para la formación de la opinión pública». Y, para ello, insistió,  los ciudadanos han de contar con una información completa, no sesgada e interesada. Porque tener todos los datos a su alcance ayuda a tomar decisiones.

Ahondó en el importante rol que juega la participación ciudadana en la democracia, un sistema que se sostiene sobre las bases de transparencia que generan sociedades bien informadas e implicadas en los procesos que le afectan.  Para ello es preciso que los medios de comunicación cumplan con su función de formar e informar a la sociedad.

La conferenciante  explicó cómo se ha generado discusión en los medios de comunicación sobre la toma de decisiones por parte de la ciudadanía, apuntando casos como el citado brexit o el plebiscito por la paz en Colombia. «No es que la ciudadanía no esté preparada, lo que demuestran estos ejercicios es que las élites no están preparadas para gestionar determinados procesos».

Welp insistió en que en experiencias como la de Colombia» hay un rol instrumental de la participación, no están muy evaluados ni los marcos ni los mecanismos y no se ha apelado a la participación como valor».

La investigadora de la Universidad de Zurich reflexionó acerca de si es posible una democracia sin partidos, una institución necesaria por su papel de conector de la sociedad con las administraciones. Al igual que los medios de comunicación, los partidos o intermediarios «cumplen una función muy importante y no hay que subestimarla».

Welp explicó las dificultades de funcionamiento en los casos de partidos con estructuras horizontales y añadió que «lo que hace falta es reforzar el control y capacidad de injerencia de la ciudadanía para encontrar un equilibrio».

Yanina Welp analizó los aspectos positivos y los riesgos de algunos de los mecanismos de participación ciudadana, caso de la confección de los presupuestos participativos, la iniciativa de agenda o el sorteo como proceso de selección de los representantes. «Creo que determinados mecanismos como el referéndum obligatorio para ratificar reformas constitucionales, la posibilidad de derogar leyes y presentar reformas constitucionales empoderan a la ciudadanía y refuerzan la comunicación previa por parte del sistema, dado que saben que se pueden activar estos mecanismos».

Apuntó que en el caso de la democracia directa la incidencia sobre el sistema de mecanismos de participación de este tipo es bastante positiva, a pesar de que hace falta generar más refuerzo en la generación de opinión pública.