El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, estuvo ayer València para, en primer lugar, visitar la planta de Ford de Almussafes, donde se reunió con la dirección, posteriormente con la sección sindical de Ford y con delegados del polígono. A su regreso a València, en la sede de UGT-PV, trasladó mensajes de tranquilidad a los trabajadores de la firma del óvalo.

Ante los posibles planes de reestructuración de la plantilla de la multinacional, Álvarez declaró que la dirección «no nos ha trasladado ningún elemento que no conozcamos, pero en todo caso sabe cuál ha sido el papel de la UGT para que Ford esté hoy en las condiciones en las que está. En ese sentido, tenemos el compromiso de que vamos a trabajar de manera conjunta por el futuro de la factoría».  En esta línea de entendimiento, señaló que «la relación con la dirección nos facilita formar un bloque para demostrar que Almussafes es la fábrica más eficiente y más productiva». En su opinión, «si la reestructuración en Europa representa cambios que puedan afectar a los puestos de trabajo, desde luego Almussafes es la que reúne las mejores condiciones para ser la fábrica más importante de Ford».

Pepe Álvarez, en su comparecencia de ayer. | Foto: Efe/Kai Försterling

El secretario general de UGT reconoció que «es un momento difícil para el sector y especialmente complejo para la Ford, por la nueva situación que se plantea en Europa. Pero ha habido otros momentos y otros procesos, y siempre hemos conseguido que la planta de Almussafes no sólo mantenga sino que, en algunos casos, mejore su situación».

«Somos el sindicato con mayor fuerza laboral dentro de la automoción», aseveró Álvarez. «Nuestro compromiso es que en estos procesos de cambio podamos conseguir que nuestro país continúe siendo una potencia mundial, un motor de exportación de vehículos, pero en todo caso informando de forma muy clara a los Gobiernos las necesidades que tenemos de que los cambios que puedan venir se hagan con cabeza y que la transición sea justa».

En la reunión entre el sindicato y la dirección no se podía dejar de pasar un tema que se sitúa fuera del ámbito de acción de la compañía, pero cuyas consecuencias a nivel global siguen siendo imprevisibles a día de hoy: el brexit. «Es otro elemento que está encima de la mesa y ni siquiera sabemos cómo se va a aplicar. Hemos hablado de todo esto, y garantizamos ser una fuerza tranquila, con capacidad de negociación, y de sumar junto a los directivos. Es el gran activo que podemos aportar en este momento para asegurar el futuro de la Ford en Valencia», concluyó Álvarez.