Los empresarios valencianos hacen frente común para reivindicar más inversión estatal
Los empresarios valencianos han hecho, una vez más, frente común para denunciar la «falta de peso político» de la Comunitat Valenciana y el «ninguneo» y la «discriminación» que recibe del Gobierno central en inversiones para infraestructuras.
Así lo han expresado representantes de las organizaciones empresariales CEV, Coepa, CEC, Cierval, AVE, Cámara de Contratistas y Fundación Pro-AVE y de las Cámaras de Comercio de Alicante, Castellón y Valencia durante la presentación de un documento base sobre infraestructuras estratégicas y reactivación económica sostenible.
El presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda, que ha recordado que hace un año hicieron las mismas reivindicaciones y «no ha servido para nada»,y ha insistido en que los problemas «los tienen que resolver los políticos que nos representan».
«La baja calidad de las infraestructuras ferroviarias y logísticas y la agobiante lentitud en mejorarlas no solo supone una desventaja competitiva, que afecta a nuestra capacidad exportadora, sino la pérdida de oportunidades para cambiar nuestro modelo económico y elevar la renta, el empleo de calidad y el bienestar de nuestros ciudadanos», ha recalcado el presidente de AVE, Vicente Boluda.
Según los empresarios, la inversión media por habitante del gobierno central en los últimos quince años representa apenas el 75% de la media nacional, y que la licitación de obra pública per cápita en los últimos cuatro no llega al 45% de la media de España. De acuerdo con este criterio, el déficit de inversión en infraestructuras de la Administración central en la Comunidad Valenciana en los últimos quince años, ascendería a unos 7.000 millones de euros.
«La operación más importante es la conexión con el centro, norte y este de Europa en ancho europeo para el tráfico de mercancías»
Los empresarios consideran que la infraestructura más relevante es el Corredor ferroviario Mediterráneo, tanto para el tráfico de mercancías como de pasajeros, y califican de «inaudito» que en pleno siglo XXI el Arco Mediterráneo no dispone de ella. Reivindican asimismo, la modernización de la línea Zaragoza-Teruel-Sagunto y aseguran que la implantación del AVE regional desde Alicante a Castellón, con prolongación a Tarragona constituye una inversión no solo rentable financieramente, sino fundamental para la integración de la Comunidad Valenciana y estratégica para la mejora de la calidad turística.
Los empresarios han recordado que el Gobierno,tal y como se comprometió la ministra de Fomento Ana Pastor, ha incumplido su promesa de acabar «no ya el Corredor, sino el tercer hilo –algo que era una medida de urgencia– en 2015». Por ello no escatimarán esfuerzos en exigir una financiación «justa para la Comunidad», han manifestado.
Federico Félix, de Pro-AVE ha asegurado que para una tierra exportadora como la nuestra estas son infraestructuras «clave», y ha avanzado que solo el sector agroalimentario aumentó las exportaciones un 10% en el último año, «cifra que podría crecer de manera importante con el Corredor Mediterráneo», ha asegurado. «No queremos ser más que los demás, pero tampoco menos», ha afirmado Salvador Navarro, presidente de la CEV. Javier López Mora, vicepresidente de Cierval ha afirmado que el tono de los empresarios valencianos debe ser «leal, pero firme y cada vez más exigente». José Vicente Morata, presidente de Cámara Valencia ha recordado que la provincia de Valencia es la tercera en número de empresas de España y Alicante, la cuarta.
Por su parte, Coepa ha demando la mejora al acceso del aeropuerto de Alicante (que concentra casi 11 millones de pasajeros), «ya que hay 4 km de carretera no desdoblada y una vía ferroviaria a 700 metros con la que no se tiene conexión», así como solucionar los déficits de agua y de suministro eléctrico que sufre la provincia en algunos puntos .
También desde Castellón, el presidente de la CEC ha hecho hincapié en los accesos al puerto de Castellón, la mejora de la A-68 (Zaragoza-Vinaroz) y participar del agua de la cuenca del Ebro, de la que forman parte.