Una de las líneas de trabajo más activas de Ainia centro tecnológico es la relativa a las últimas tecnologías de microencapsulación dirigidas a aumentar el valor añadido de los productos alimenticios, así como su calidad y seguridad. Esta técnica es cada día más demandada por la industria alimentaria para dar respuesta al interés de los consumidores por productos que les permiten cuidar y mejorar su salud. Productos novedosos y muy valorados como leche con hierro o batidos con aceite de pescado microencapsulado. La microencapsulación mejora las características sensoriales y nutricionales, así como la conservación del producto. Evita por ejemplo, la rápida oxidación de la vitamina C, pudiendo utilizarla como antioxidante y complemento vitamínico. Permite además incorporar la vitamina A en procesos de almacenamiento de leche en polvo desnatada para fortalecer su estabilidad o sirve para conservar mejor los alimentos, incrementando por ejemplo la duración y el empleo de Omega 3 en alimentos infantiles y productos de panadería.

Ainia trabaja desde hace más de diez años en líneas de investigación en microencapsulación centradas no solo en fines alimentarios, sino también en industrias afines como la cosmética y productos de limpieza. Sectores en los que se están logrando importantes avances, entre ellos mayores concentraciones de retinol en cremas faciales o suavizantes que conservan su aroma durante más tiempo.