Calcular el IVA de una factura dependerá de la actividad económica que se ofrezca. La cantidad de este impuesto suele ser un grave problema tanto para quienes tienen la función de facturarlo como para quienes deben cancelarlo. En todo caso, es preciso no tener inconvenientes con el Ministerio de Hacienda y cumplir con todos los requisitos fiscales que rigen la materia.

Es fundamental indicar que esta rutina fiscal no es complicada, pero requiere que el contribuyente tenga claros los conceptos que debe manejar para este impuesto. Desde la propia definición del IVA hasta temas tan delicados como algunas exenciones deben ser conocidos por las personas naturales y jurídicas. La razón es sencilla: si se obvian criterios estrictamente legales aparecerán las indeseables sanciones.

Tipos de IVA de una factura

El tributo indirecto que tiene por finalidad establecer un gravamen para el consumo de productos recibe el nombre de IVA. En otras palabras, es aquel pago adicional que efectúa el contribuyente por las compras que a diario realiza. Para calcular el IVA de una factura hay que saber que este pago suele dividirse en tres grandes grupos. Estos son:

IVA General

Este pago se computará por igual en todos los supuestos jurídicos que por ley estén sujetos a la cancelación del impuesto. Su porcentaje se ha establecido en un 21 %. Dicha cantidad debe aplicarse a las secciones señaladas, a menos que los mismos sean causados por otro literal. La mayoría de transacciones son reflejadas con este indicativo.

IVA Reducido

Está dirigido a la regulación de los productos para la alimentación y aquellos destinados al transporte y a las viviendas familiares. Su porcentaje es del 10 %. Están plenamente definidos en el ordenamiento legal y se estipulan de manera explícita por completo.

• Alimentos destinados para los seres humanos y para los animales. Se excluyen las bebidas con alcohol y las azucaradas, ya que tienen un gravamen distinto.
• Materiales para desarrollar las actividades agropecuarias y de forestación.
• El agua para consumo humano.
• Las gafas, lentes o lentillas.
• Los materiales que se destinen a asistencia sanitaria.
• Prestación de transporte para las personas que viajan constantemente.
• Hoteles y restaurantes.
• Mantenimiento de vías públicas.
• Obras destinadas a la reparación de viviendas familiares.
• Alquileres sometidos a la figura jurídica de opción a compra.

Estas secciones son los señalados por ley para la aplicación de dicho porcentaje.

IVA Superreducido

Tiene por finalidad regular los artículos que compra una persona de manera constante todos los días para su sustento. Tienen un porcentaje de tan solo un 4 %. Este grupo está formado por:

• Pan, huevos, leche, frutas, verduras, legumbres, cereales y tubérculos.
• Periódicos, revistas y libros que no exhiban anuncios publicitarios.
• Los medicamentos o medicinas para el ser humano.
• Los coches que se dedican a efectuar una movilidad reducida.
• Prótesis e implantes para casos médicos.
• Las viviendas en alquiler con opción a venta.
• La atención residencial.
• Las mascarillas para trabajos médicos.

Estos describen productos o servicios indispensables.

¿Cómo calcular el IVA incluido de una factura?

Para desarrollar este trabajo es necesario que se cumplan una serie de pasos. De esta manera, se colocará gravamen al valor que se va sumando a un artículo en su producción. Ahora bien, cabría preguntarse ¿qué cálculo debe hacerse? Ante esta inquietud es necesario tener presente esta regla: si el producto tiene pautado un IVA de 12 % dividimos entre 1,12. Por el contrario, si lo tiene en 21 % dividimos entre 1,21.

En una factura con una cantidad de 1200 euros el IVA del 12 % será de 128,58 euros. La base impositiva arrojará un total de 1071,42 euros. Si se trata del IVA de un 21 % este indicará la cantidad de 208,27 euros con una base impositiva de 991,73 euros. Esta explicación es fundamental para entender cómo calcular el IVA de una factura y conocer la cantidad a cancelar.

¿Cómo calcular el precio sin IVA incluido?

La solución de esta ecuación es muy sencilla. Se trata de determinar la cantidad total incluyendo el IVA para una determinada factura. Si se requiere realizar la facturación deberá dejarse por sentado la cantidad de la base, el cálculo del IVA y la enumeración completa de los productos. La cantidad correspondiente al impuesto total se hallará al dividir entre 1,21.

Del mismo modo, en una facturación de cualquier artículo cuyo total es de 1000 euros, la base imponible con un IVA del 21 % será de 826,44 euros. La cantidad a cancelar (total-base imponible) es de 173,56 euros.

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Cumplir las obligaciones tributarias

La legislación en materia tributaria ha creado normas cuyo incumplimiento trae como consecuencia la imposición de severas sanciones. El precepto legal que ordena cumplir con la tributación debe ser oportunamente acatado. Es preciso que tanto las personas naturales como las jurídicas sigan esta normativa para evitar correctivos que serán contraproducentes.

A medida que la recaudación de impuestos sea llevada a cabo con puntualidad, en esa misma forma el dinero será reinvertido en beneficio del pueblo. La automatización de los sistemas contables, facturaciones en línea y la adecuación y actualización de programas y software son una ventaja absoluta. Tanto los contribuyentes como la administración tributaria pueden beneficiarse con las nuevas tecnologías al momento de calcular el IVA de una factura.