El autoescalado es una función que permite a las organizaciones aumentar o reducir automáticamente los servicios en la nube, como las capacidades del servidor o las máquinas virtuales, en función de situaciones definidas, como los niveles de utilización del tráfico.
Existen muchos proveedores de computación en la nube, que ofrecen herramientas de autoescalado. Conoce los principales beneficios de esta estrategia a continuación.
¿Qué es el autoescalado?
El autoescalado es una forma de aumentar o disminuir automáticamente la cantidad de recursos informáticos que se asignan a su aplicación en función de sus necesidades en un momento dado.
Surgió de la tecnología de computación en la nube, que revolucionó por completo la forma en que se asignan los recursos informáticos, haciendo posible crear un servidor en la nube totalmente escalable.
Cuando una aplicación necesita más poder de cómputo, puede lanzar recursos adicionales a pedido y usarlos todo el tiempo que desee.
Características del autoescalado
Las características del autoescalado están definidas por sus componentes. Los componentes principales del escalado automático son grupos, configuraciones de ejecución y planes de escalado.
En lo que respecta a los grupos, las instancias de la nube se organizan en un grupo para ser tratadas como una unidad lógica, lo que permite la escalabilidad y la gestión.
El grupo usa la configuración de lanzamiento como norte para sus instancias. Al crear una configuración, puede especificar información como el ID, el par de claves, el tipo de instancia, los grupos de seguridad y la asignación de dispositivos de bloques.
Los planes de escala son la guía para el escalado automático (cuándo y dónde escalar). Puede, por ejemplo, basar el plan en la ocurrencia de condiciones específicas o en el cronograma.
¿Cómo funciona el autoescalado?
Con el autoescalado, los recursos aumentan o disminuyen automáticamente. Siempre de acuerdo con el consumo requerido por la infraestructura para soportar una carga de trabajo en un momento dado.
Como tal, este enfoque se puede dividir en dos ejes:
Escalado vertical: cuando se trata de aumentar la capacidad de una máquina (en términos de CPU y RAM).
Escalado horizontal: al aumentar el número de máquinas utilizadas (para una aplicación web, por ejemplo).
Si tu sitio web tiene que absorber un aumento repentino de tráfico, digamos pasar de 1.000 a 10.000 visitantes en unos pocos minutos, se activa el escalado automático para aumentar la cantidad de servidores en funcionamiento.
¿La meta? Garantizar la robustez de la aplicación, evitar problemas de latencia, distribuir el tráfico de forma más eficiente en la infraestructura (a través de un balanceador de carga) y seguir ofreciendo una experiencia de usuario de calidad a pesar del pico de actividad.
Por el contrario, cuando se reduce la actividad, el autoescalado permite reducir el volumen de recursos destinados al funcionamiento de la aplicación. De modo que se proporcionen los recursos justos para soportar una carga nominal y aceptable manteniendo un cierto margen de maniobra.
¿Qué beneficios aporta el autoescalado?
Entre los beneficios que proporciona el autoescalado podemos mencionar:
Reducción de costos
Cuando las cargas son bajas, el escalado automático permite a las empresas administrar su propia infraestructura y las empresas que dependen de la infraestructura de la nube para poner algunos servidores en modo de suspensión.
Esto reduce los costos de electricidad y agua cuando el agua se usa para enfriar. El escalado automático en la nube también significa pagar por el uso completo en lugar de la capacidad máxima.
Mayor seguridad
El ajuste del autoescalado también protege contra fallas de aplicaciones, hardware y red. Esto mediante la detección y el reemplazo de instancias en mal estado, al tiempo que brinda resistencia y disponibilidad de las aplicaciones.
Mayor disponibilidad
El autoescalado mejora la disponibilidad y el tiempo de actividad, especialmente cuando las cargas de trabajo de producción son menos predecibles.
Si bien muchas empresas tienen un ciclo diario, semanal o anual establecido para realizar un seguimiento del uso del servidor, el ajuste en el autoescalado es diferente en el sentido de que reduce la posibilidad de tener demasiados o muy pocos servidores para la carga de tráfico real.
Esto se debe a que el escalado automático responde a patrones de uso reales, en contraste con una solución de escalado estático.