China prohíbe la importación de productos avícolas de España por la gripe aviar
La medida coincide con un momento delicado en el comercio internacional, marcado por tensiones arancelarias entre Pekín y Washington.
China ha suspendido desde el 7 de agosto todas las importaciones, directas e indirectas, de productos avícolas y derivados procedentes de España, incluidos los procesados, debido a los recientes brotes de gripe aviar detectados en varias regiones del país europeo.
La Administración General de Aduanas justificó la medida como un paso necesario para prevenir la propagación de la enfermedad y proteger la bioseguridad de su ganado. El veto llega apenas cuatro meses después de que España y China firmaran un protocolo para abrir este mercado a los productores avícolas ibéricos, considerado un destino estratégico por su elevada demanda.
El acuerdo de abril se sumaba a una serie de once protocolos suscritos desde 2018 para ampliar la presencia de productos agroalimentarios españoles en el gigante asiático, cuyas compras en 2024 alcanzaron los 1.864 millones de euros.
Un golpe comercial en medio de una tregua arancelaria global
La decisión de Pekín se produce en un contexto comercial internacional convulso. Apenas unos días antes, China y Estados Unidos acordaron extender 90 días la tregua arancelaria vigente, tras meses de negociaciones en Ginebra, Londres y Estocolmo.
El pacto evita, por ahora, un nuevo escalón en la guerra comercial, aunque no resuelve los desequilibrios de fondo: Washington mantiene aranceles del 100 % a los vehículos eléctricos y del 50 % a paneles solares chinos, mientras Pekín conserva gravámenes del 10 % a productos estadounidenses y acusa a EE. UU. de proteccionismo.
La disputa incluye temas tan diversos como el comercio de tierras raras, las acusaciones de sobrecapacidad industrial y los recelos en materia de propiedad intelectual, a lo que se suman tensiones geopolíticas como el papel de China en la guerra de Ucrania o su relación con el petróleo ruso.
Impacto y proyección de la medida sobre España y la UE
Para España, el cierre del mercado avícola chino supone la pérdida temporal de un destino que el sector esperaba aprovechar para diversificar sus ventas y colocar productos con limitada salida en otros mercados. Aunque la prohibición responde oficialmente a razones sanitarias, expertos señalan que las restricciones alimentarias de Pekín suelen producirse en paralelo a otros movimientos estratégicos de política comercial, lo que añade incertidumbre a futuros acuerdos.
La medida también plantea interrogantes para la Unión Europea, que busca reforzar su presencia en Asia en un momento en que las grandes potencias parecen utilizar la apertura o el cierre de mercados como herramientas de presión diplomática.
El desenlace de las negociaciones entre China y EE. UU., y la posición de Pekín en el tablero geopolítico, podrían influir en la duración de este veto y en el marco comercial global al que se enfrenta el sector agroalimentario español.
Tensiones en sectores estratégicos y energéticos
Las disputas no se limitan a bienes de consumo. Estados Unidos acusa a China de inundar el mercado con productos de bajo coste gracias a subsidios estatales, en especial en sectores como el de los vehículos eléctricos y las energías renovables.
Además, la cuestión del petróleo ruso añade un nuevo frente: Washington baraja sanciones contra Pekín por mantener compras a Moscú, lo que podría tensar aún más el comercio internacional y afectar a las cadenas de suministro globales.
Seguridad, narcotráfico y repercusiones globales
A las tensiones económicas se suman problemas de seguridad y de cooperación internacional. Donald Trump ha impuesto aranceles adicionales a China alegando una falta de control sobre el tráfico de fentanilo y sus precursores, mientras que Pekín rechaza estas acusaciones y responsabiliza a EE. UU. de su crisis interna de opioides.
En este escenario, cualquier medida restrictiva, como el veto al pollo español, no solo impacta a los sectores directamente implicados, sino que se enmarca en un juego de poder global en el que la salud pública, la seguridad y la geopolítica se entrelazan con las estrategias comerciales.
Borja RamírezGraduado en Periodismo por la Universidad de Valencia, está especializado en actualidad internacional y análisis geopolítico por la Universidad Complutense de Madrid. Ha desarrollado su carrera profesional en las ediciones web de cabeceras como Eldiario.es o El País. Desde junio de 2022 es redactor en la edición digital de Economía 3, donde compagina el análisis económico e internacional.







