La incapacidad laboral es la imposibilidad de efectuar la labor o trabajo para el que se fue contratado, dentro del entorno laboral por causas de salud física o mental. Esta incapacidad puede ser temporal, parcial o permanente. En este artículo, veremos los distintos tipos de incapacidad que reconoce la Seguridad Social y cuáles son los derechos de los trabajadores incapacitados laboralmente. Además, explicaremos cómo solicitar la incapacidad laboral.
Tipologías de incapacidad reconocidas por la Seguridad Social
De acuerdo a sus causas y características, la Seguridad Social española reconoce cuatro tipos de incapacidad laboral por las que se pueden recibir prestaciones. La incapacidad temporal, la incapacidad parcial, la incapacidad permanente, que puede ser total o absoluta y la incapacidad por gran invalidez.
Incapacidad temporal
La incapacidad temporal también conocida como baja médica es cualquier incapacidad laboral que dure menos de 12 meses. Generalmente, es el primero de los tipos de incapacidad que puede tener una persona y es aplicable tanto a los trabajadores públicos como a los privados.
Incapacidad parcial
La incapacidad parcial es una pérdida parcial de la capacidad laboral, es decir, limitando, pero sin impedir por completo al trabajador efectuar su labor. De tal manera que, su rendimiento se verá reducido en al menos un 33% por debajo de lo normal. Este tipo de incapacidad puede ser temporal o permanente, según sea el tipo de afectación o incapacidad.
Incapacidad permanente total
A diferencia de la incapacidad parcial, la incapacidad permanente total, si incapacita al trabajador de forma permanente para efectuar las labores propias de su profesión. No así, otro tipo de labores. Lo que significa que sí podría laborar, pero en otro tipo de actividades.
Incapacidad permanente absoluta
Por su parte la incapacidad permanente absoluta se caracteriza por ser el tipo de incapacidad, que limita de forma permanente y absoluta al trabajador para desempeñar cualquier tipo de actividad laboral.
Gran invalidez
De los tipos de incapacidad, esta es la más grave. Una persona con este tipo de discapacidad no puede trabajar ni ser independiente. Necesita la ayuda de otros para realizar las tareas diarias. En otras palabras, la persona es incapaz de realizar o llevar a cabo cualquier actividad física (comer, vestir, etc.) sin ayuda.
¿Cuáles son los derechos ante una incapacidad laboral?
Todo trabajador que se enfrente a una incapacidad laboral tiene ciertos derechos garantizados por la ley. Por ejemplo: tiene derecho a asistencia médica sanitaria que le permita recuperarse de forma rápida y total de la lesión o situación que le incapacita para efectuar su labor. También a percibir un subsidio económico que le permita continuar llevando una vida digna durante el tiempo necesario para su recuperación.
En el caso de que la incapacidad sea derivada de un accidente o como consecuencia de su actividad laboral, tiene derecho a: una indemnización por daños y perjuicios, asistencia médica, medicamentos y la rehabilitación que fuere necesaria.
¿Cuáles son los requisitos para obtener una incapacidad laboral?
Dependiendo del tipo de incapacidad laboral que se solicita será necesario cumplir con algunos requisitos o no. Para los casos de incapacidad temporal, solo es necesario presentar el diagnóstico y la recomendación del médico tratante de efectuar un reposo o baja médica por tiempo determinado.
En los casos de incapacidad permanente, son necesarios algunos requisitos adicionales:
- Estar inscrito en la Seguridad Social o en alguna aseguradora privada.
- Haber cotizado el mínimo requerido, a menos que se trate de un accidente laboral o enfermedad profesional.
- No alcanzar la edad mínima de jubilación.