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Redacción E3
La concesión administrativa es el acto por el cual la administración pública otorga al concesionario el uso de recursos y/o el ejercicio de actividades no disponibles a los particulares y reservadas a los poderes públicos. A través de la concesión, el concesionario tiene derecho al empleo del bien, a la gestión del servicio o a la ejecución de la obra.
La concesión administrativa es la autorización que otorga una entidad del sector público a una iniciativa privada, con el objeto de explotar un bien o servicio.
En otras palabras, es el proceso jurídico-administrativo mediante el cual, la administración pública cede los derechos de uso privativo de un bien de dominio público o de la gestión de un servicio público durante un período determinado, bajo determinadas condiciones.
Las características principales que destacan en todo contrato de concesión administrativa son, entre otras:
La concesión administrativa ofrece diversas ventajas a sus diferentes actores. Y aunque se piense que la mayor ventaja es económica, también aporta ventajas del tipo social.
Se pueden distinguir dos tipos principales de concesiones administrativas: Concesión de bienes públicos o colectivos y concesión de la prestación de servicio público.
Concesión de bienes públicos o colectivos: La concesión de bienes públicos confiere derechos de uso sobre los bienes públicos de uso colectivo. Por ejemplo:
Concesión de la prestación de un servicio público: La concesión de servicio público permite la realización de actividades económicas destinadas para el servicio público general. Como por ejemplo la explotación comercial de autobuses públicos o la distribución de energía eléctrica o gas.
En algunos casos existe una concesión mixta, como es el caso de la concesión aeroportuaria, que permite el uso de un inmueble estatal, la construcción del aeropuerto y la gestión de servicios y otras actividades aeroportuarias.
Vale decir, que en algunos países existe una distinción entre la concesión de obras públicas (por ejemplo, la construcción de una autopista de peaje) y la concesión de bienes públicos o colectivos.
Exploración petrolera: Los terrenos públicos y el subsuelo se otorgan a empresas privadas (por un precio anual o por resultados) para la extracción de petróleo.
Carreteras: En este caso se otorgan terrenos públicos para la construcción de carreteras y autopistas. Algunas empresas optan (al final de la construcción y durante un tiempo determinado) por cobrar un porcentaje de las ganancias que obtendrán las casas de peaje.
Energía: Bienes hidrológicos públicos (presas hidroeléctricas, por ejemplo) otorgados para la producción de energía eléctrica.
Todos son ejemplos de bienes o derechos de dominio público otorgados en concesión a una empresa privada.
Jesús SantaellaCopywriter y redactor SEO con más de 7 años de experiencia. Colabora con Economía 3 desde el 2019 en temas de marketing, turismo, criptomonedas y economía. Es un apasionado por el marketing digital y las ventas a través de las palabras.
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