El Gastrónomo, un clásico que evoluciona con el tiempo
A lo largo de su vida, Antonio Martínez Balaguer siempre tuvo un sueño: gestionar su propio establecimiento. Y ese sueño lo pudo cumplir en 1985, cuando abrió El Gastrónomo en la Avenida Primado Reig. En esta aventura contó desde el primer momento con José Antonio Balastegui, que ejerció como cocinero, mientras que Antonio lo hacía en sala. Se habían conocido en 1979, cuando ambos coincidieron en el Hotel Azafata, trabaron una buena amistad y cuando Antonio decidió independizarse, contó con José Antonio para su nueva aventura.
El Gastrónomo se convirtió en poco tiempo en toda una referencia en la ciudad, sobre todo porque ofreció un plato mítico, el steak tartare, y que en la ciudad no se solía encontrar. Para mayor autenticidad, Antonio lo preparaba ante la mirada del cliente.
En el año 2004, el maître desapareció después de una larga enfermedad. A partir de ese momento, fue su hijo José Javier, que ya colaboraba junto a su padre, quién se hizo cargo del restaurante y de la sala, manteniendo a José Antonio al frente de las cocinas del local.
El Gastrónomo de hoy día mantiene platos clásicos y ha añadido otros con tintes creativos y contemporáneos, con un gran nivel en todas sus líneas de trabajo. Hace un par de años (septiembre de 2015), realizaron una importante reforma, adecuando su decoración a los tiempos actuales.
Platos de referencia
El foie de José Antonio sigue siendo una exquisitez, acompañándo con unas ciruelas pasas que le dan un toque de frescor. Las anchoas 00 relucen en la mesa gracias a sus impresionantes lomos, y seguimos encontrando varios platos de salmón muy sugestivos y apetecibles: salmón ahumado con gambas; salmón marinado a la vinagreta; o la tosta de salmón ahumado y huevas de mújol.
Junto a estas entradas, José Antonio también nos prepara un buen surtido de ensaladas, entre las que destacan la ensalada de la huerta y la de aguacate, palmitos y gambas.
Además de las notables elaboraciones que realiza el cocinero, merece destacarse la riqueza y la calidad de los ingredientes y productos que utiliza en sus construcciones, como las cigalas, el calamar, los sepionets o las gambas que emplea para prepararlas al ajillo.
Entre las entradas calientes, el establecimiento nos ofrece un sugerente foie de pato a la parrilla, con manzanas y ciruelas. Tanto en las entradas frías como en las calientes podemos pedir medias raciones y así poder degustar más platos.
Arroz, pescados, postre y bodega
Como todo buen restaurante valenciano, El Gastrónomo tiene su espacio para los arroces, de los que José Antonio es un consumado maestro. Arroz a banda con all i oli, arroz negro, arroz caldoso de conejo y boletus, arroz de cigalas y alcachofas, arroz de bogavante, arroz de senyoret y por encargo, elaboran la paella valenciana.
También nos ofrecen un delicioso conejo salteado con ajos o el carpaccio de solomillo con parmesano. Entre los platos de pescado, les recomiendo su lubina a la sal, otro gran clásico de nuestra gastronomía, que nunca debería desaparecer de las cartas de los restaurantes.
El postre por excelencia son sus crepes delicias El Gastrónomo, que también las preparan a la vista del comensal. La bodega posee buenas referencias para acompañar a los platos con la precisión que merecen. Servidos a temperatura adecuada en una magnífica cristalería y copas específicas.
El Gastrónomo es un gran clásico que evoluciona con las mismas pautas que Antonio marcó desde sus inicios y que, hoy en día, mantiene José Javier. Felicidades.
El Gastrónomo (Telf. 963 697 036 )
Avda. Primado Reig. 149. Valencia
Ofrecen parking gratuito a escasos
metros del establecimiento.
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