¿Cómo ahorrar en la factura de la luz en verano?

Llega el verano y con él, el sol, las vacaciones, el calor y… el aire acondicionado a toda pastilla. El calor en verano es lo normal, y con el cambio climático, las temperaturas, se vuelven aun más extremas, haciendo que el calor apriete y nuestro consumo eléctrico se dispare, ya que ventiladores y aires acondicionados se enchufan a todo trapo. Eso acaba convirtiendo la factura de la luz en una de las peores pesadillas estivales.

Si eres de las personas que mira el recibo con miedo cada vez que suben las temperaturas, ¡tranquilo! No estás solo. La buena noticia es que hay muchas formas de meterle un buen tijeretazo a ese gasto sin tener que sudar la gota gorda. La clave está en conocer, comparar y actuar.

Entender el laberinto de las tarifas eléctricas, donde el precio de la luz cambia cada hora y las ofertas de las compañías puede ser un auténtico dolor de cabeza. Por suerte, en la actualidad existen proyectos y herramientas online fiables y fáciles de usar que nos facilitan enormemente este trabajo.

Uno de los mejores ejemplos es tarifaluzelectrica, una plataforma que se ha convertido en una referencia para quienes necesitan tener a mano información clara y actualizada. Si tienes dudas sobre cuál es la mejor tarifa de la luz para ti, cómo puedes ahorrar o simplemente quieres consultar el precio de la luz hoy y mañana de la tarifa regulada, este tipo de herramientas son tan necesarias como una buena sombrilla en la playa.

Disponer del precio de la luz diario te da el poder de decidir cuándo usar tus electrodomésticos de mayor consumo, un pequeño gesto con un gran impacto en el ahorro.

Conoce a tu enemigo: ¿qué tarifa de luz tienes?

El primer paso para ahorrar es saber a qué te enfrentas. ¿Sabes qué tipo de contrato de luz tienes? Muchos pagamos las facturas sin entender realmente qué estamos pagando. Grosso modo, en España existen dos mercados principales:

Mercado Regulado (PVPC): La famosa tarifa PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor). Aquí, el precio del kilovatio/hora (kWh) cambia cada hora de cada día, en función de la oferta y la demanda en el mercado mayorista. Es una opción que puede ser muy económica si eres capaz de adaptar tu consumo a las horas más baratas (generalmente de madrugada y a mediodía), pero también es más volátil. Para saber el precio de la luz mañana, solo tienes que consultarlo a partir de las 20:15 horas del día anterior en webs especializadas.

Mercado Libre: Aquí es donde las grandes compañías como Iberdrola, Naturgy, Repsol, Endesa, TotalEnergies o las más nuevas como Octopus despliegan todo su batería de ofertas. En la tarifa de mercado libre pactas un precio con la compañía. Las modalidades más comunes son:

• Tarifas con precio fijo: Pagas siempre lo mismo por cada kWh, sin importar la hora. Te da tranquilidad y previsibilidad, aunque su precio suele ser un poco más elevado que la media del PVPC.
• Tarifas con discriminación horaria: Ofrecen diferentes precios según el tramo horario (punta, llano y valle). Son perfectas si puedes concentrar gran parte de tu consumo, como poner la lavadora o el lavavajillas, en las horas valle (las más baratas).
• Tarifas planas: Pagas una cuota fija al mes independientemente de tu consumo. ¡Ojo! Suelen tener límites de consumo y, si los superas, el precio se dispara.

Consejos para ahorrar en tu vivienda principal y en la segunda residencia

El verano no solo dispara el consumo en nuestra casa habitual, sino también en esa segunda residencia, en la playa o el pueblo que tanto nos gusta. Las estrategias de ahorro, aunque similares, tienen sus particularidades.

En tu vivienda principal, el gran gasto es el aire acondicionado. Úsalo de forma inteligente: ajústalo a una temperatura de entre 24 y 26 grados, cierra puertas y ventanas para que no se escape el fresco y aprovecha las primeras horas de la mañana y la noche para ventilar de forma natural. Los ventiladores de techo son una alternativa genial que consume hasta un 90% menos. Además, evita usar el horno en las horas de más calor y aprovecha al máximo la luz natural.

Para las segundas viviendas, el enfoque cambia. Estas casas suelen tener un consumo muy concentrado en fines de semana o durante un mes concreto. Por ello, es crucial buscar una tarifa luz eléctrica específica. Algunas compañías ofrecen «tarifas para segundas viviendas» con precios muy reducidos durante los fines de semana o los meses de verano. Incluso existen opciones de luz + gas que pueden resultar ventajosas si tienes ambos suministros. La clave es no mantener la misma tarifa que en tu vivienda habitual si el patrón de uso es radicalmente diferente.

¿Y si cambio de tarifa en verano?

Cambiar de compañía o de tarifa es un proceso gratuito y más sencillo de lo que parece. Si sabes que tu consumo se va a disparar en verano por el aire acondicionado, quizás sea un buen momento para pasarte temporalmente a una tarifa con un precio fijo que te proteja de las fluctuaciones del PVPC. O al revés, si vas a estar fuera todo el mes, asegúrate de tener una tarifa con un término de potencia bajo para que la parte fija de tu factura sea mínima.

No tengas miedo de comparar. Analiza tus facturas del verano pasado, entiende dónde se fue el grueso de tu consumo y busca la oferta que mejor se adapte a ese patrón. Compañías como Iberdrola o Naturgy suelen lanzar ofertas especiales para la temporada veraniega.

No te cases con nadie; tu lealtad debe estar con tu bolsillo. Analizar, comparar y cambiar es el mantra del ahorrador inteligente. Al final, con un poco de información y sentido común, podrás disfrutar del verano sin que tu factura de la luz  ni el calor te quiten el sueño.