Octopus Energy, compañía energética británica fundada en 2016, se ha convertido en el primer proveedor de electricidad en Reino Unido en solo ocho años. Desembarcó en España en 2021 y fijó su sede en la ciudad de Valencia tras haber adquirido la empresa Umeme Energía. En aquel momento, había 11 empleados y, actualmente, ya son unos 470. Además, la compañía ha pasado de tener 10.000 clientes en su primer año de vida a contar con cerca de 180.000 en 2024.
El CEO de Octopus Energy en España, Roberto Giner, asegura que buscan nuevas oficinas porque dada la cantidad de incorporaciones que tienen cada mes, no les da tiempo a reformar su actual sede. A su juicio, lo que les convierte en una comercializadora de energía diferente es los precios que ofrecen, su tecnología y, especialmente, la atención al cliente.
Dos años de la compañía energética en España
– Recientemente habéis cumplido dos años de vida en España. ¿Qué balance hacéis y cómo habéis crecido como empresa?
Hay una diferencia muy grande entre el primer y el segundo año, básicamente porque en 2022 tuvimos una escalada de precios por la guerra en Ucrania. Ahí estuvimos muy parados porque, evidentemente, no podíamos ofrecer a nuestros clientes un precio que fuera razonable y justo. Entonces, arrancamos en abril de 2022 y acabamos el año con unos 10.000 clientes.
En 2023, los precios se fueron normalizando y pudimos lanzar mejor las campañas, en las cuales llevábamos mucha más información a los clientes para que pudieran elegir una tarifa de electricidad correcta para sus hábitos de consumo. Además, el año pasado lanzamos nuestra parte de servicios como empresa instaladora y de mantenimiento, lo que implica tener mucha gente distribuida en muchos sitios de España para cubrir con esos instaladores y esos equipos todos los sitios de España en los que vendemos.
Ahora mismo estamos súper contentos. El primer año fue un poco suave, pero el segundo ha sido de muchísimo trabajo y de implantaciones en la parte de servicios, ya que ahora mismo tenemos equipos de instaladores en Madrid, Barcelona, Bilbao, Murcia, Sevilla y, por supuesto, Valencia. Es una división que es muy intensiva en personas.
El balance es súper bueno porque esperábamos llegar a abril con unos 130.000 clientes, una cifra que hemos superado porque ya estamos cerca de los 180.000. Estamos muy contentos no tanto del crecimiento, sino de cómo estamos atrayendo a los clientes hacia nuestra marca y nuestra forma de hacer las cosas.
Precio, atención al cliente y tecnología
– Como compañía comercializadora de energía, ¿qué enfoque os diferencia de otras empresas del sector?
Yo creo que es la combinación de tres cosas. La primera es que ofrecemos a los clientes un precio justo. Cuando hablamos de precio justo, no hablamos del precio más caro ni el más barato, sino del mejor precio que podemos ofrecer dependiendo del momento en que está el mercado eléctrico.
El segundo pilar, que quizá es el más relevante, es la atención al cliente. La forma en la que atendemos a los clientes es una muy directa, a través de una llamada de teléfono con una única persona para cualquier tipo de consulta. Para eso tenemos lo que llamamos los energy specialists (especialistas de energía), de forma que el cliente resuelva siempre cualquier incidencia o duda.
El tercer pilar es la tecnología. Estamos en 2024 y está claro que hay muchísima tecnología disponible, pero nosotros la utilizamos razonablemente bien. Básicamente con la plataforma que hemos desarrollado nosotros mismos, que se llama Kraken. Esta plataforma permite, por ejemplo, que cuando un cliente llame para cualquier gestión, se pueda resolver en segundo o en minutos. Se trata de una herramienta muy ágil, tanto para facturar, hacer cambios de potencia y de titular o para reenviar facturas.
Objetivo: 450.000 clientes en abril de 2025
– ¿Cuál fue vuestro resultado de 2023? ¿Qué perspectivas de crecimiento manejáis para 2024?
De resultados hablamos muy poco porque al ser una empresa en crecimiento, estamos constantemente invirtiendo dinero. Además, no funcionamos con años naturales, como somos una empresa británica, vamos de mayo a abril. Hace mes y poco que hemos empezado el año. Para 2025, buscamos tener alrededor de 450.000 clientes a finales de abril.
Por otro lado, buscamos hacer unas 6.000 instalaciones solares e instalar unos 5.000 cargadores domésticos de vehículos eléctricos. Además, estamos terminando de lanzar la división de instalación de bombas de calor de aerotermia, con la que esperamos instalar unas 400.
Unas 20 personas entran cada mes en la compañía energética
– ¿Por qué se decide instalar la sede española de Octopus Energy en la ciudad de Valencia? ¿Cómo está creciendo la sede y cómo atraéis talento?
Cuando Octopus decide a aterrizar en España lo que hace es comprar una comercializadora que estaba en Valencia, Umeme Energía, en la que yo trabajaba. El equipo británico vino, conoció la ciudad, le pareció muy interesante Valencia y decidió que nos quedábamos aquí.
Actualmente, en España, seremos unos 470 empleados. Cuando la empresa desembarcó a finales de 2021, éramos 11, así que hemos crecido muy rápido. Ahora mismo todos los meses entran unas 15 o 20 personas en diferentes departamentos. Ahora estamos en Pintor Sorolla, con unas instalaciones de cerca de 2.000 metros cuadrados y seguimos buscando oficinas porque a la velocidad que entra la gente no nos da tiempo ni a reformar.
La sostenibilidad, en el ADN de la compañía energética
– Como compañía energética, desde Octopus Energy decís que construís «un sistema de energía sostenible para el futuro». ¿Cómo lo hacéis?
En temas de sostenibilidad, por el ADN de la compañía, vamos hasta el final. Trabajamos en una herramienta de tecnología que lo que está haciendo es asignar energía de parques eólicos y solares que tenemos en gestión para el consumo de nuestros clientes.
Estamos instalando energía solar a nuestros clientes y el excedente de esas instalaciones se lo ofrecemos a otros clientes con un descuento del 50% para que se aproveche la energía renovable.
En Octopus todo lo que hacemos siempre va guiado por la sostenibilidad, incluso en nuestras oficinas. Considero que la compañía ha conseguido que la sostenibilidad o la energía renovable forme parte de las vidas de todos los que trabajamos aquí. No es una cosa que tengamos que recordar, sino que la gente ya lo hace de forma natural.
El interés de los clientes en la transición energética
– ¿Cómo ve los avances en materia de transición energética en España? ¿Los consumidores están cada vez más concienciados?
Nosotros creemos que sí. Lo que pasa es que, como todo sector, atraviesa momentos diferentes cada año. Además, estamos en un país dentro del marco europeo con problemas macro que acaban afectando. Aunque el mercado mayorista se ha estabilizado mucho, hay ciertos momentos de incertidumbre por diferentes motivos, como los geopolíticos
Hay muchísimo interés en la transición energética y muchísimos clientes están adquiriendo ese grado de concienciación, algo que es muy interesante para nosotros. De hecho, siempre trabajamos en una labor más docente que vendedora.
No obstante, atravesamos un momento en el que los tipos de interés están muy altos, la gente está pagando más por sus casas y cuesta más comprar algo financiado. En transición energética, el objetivo es claro: electrificar la demanda doméstica. Eso lo tenemos todos escrito a fuego, pero la realidad es que se está complicando porque al final a las familias cada vez les cuesta más llegar a final de mes y todo es mucho más caro. Una instalación solar o una aerotermia es un añadido, pero quizá ahora mismo en las familias no es la prioridad número uno por la situación en la que estamos.
La necesidad de almacenar la energía renovable
– ¿Cómo prevé que se muevan los precios del mercado de la energía en los próximos meses?
Yo creo que la tendencia de precios cero e incluso precios negativos todavía se va a alargar un poco en el tiempo, por lo menos los próximos dos años. Esto viene derivado de una cosa muy sencilla, que es que cada vez hay más generación de renovables, tanto generación mayorista como generación doméstica.
En el último mes se ha recuperado un poco la demanda eléctrica, pero veníamos de unos números prepandemia que no habíamos recuperado. Es cierto que estamos yendo más rápido con el incremento de la generación, mayorista o doméstica, y no tanto con la parte que genera más consumo, como los vehículos eléctricos o la aerotermia y las bombas de calor. Entonces no se ha acompasado el crecimiento de esas dos ramas dentro del mercado. Por lo tanto, a ciertas horas del día esto va a repetirse, veremos horas muy baratas porque tenemos muchísima energía renovable que no somos capaces de consumir.
Tampoco vemos que esto sea un problema y, además, es una cosa que llevamos viendo desde hace dos años que iba a ocurrir. Lo que sí que subyace es que en España, y esto se lo decimos muchas veces al Ministerio, sí o sí deberíamos tener un plan que incentive la instalación de baterías tanto a nivel doméstico como a nivel industrial. De esta forma, toda esa energía que tenemos en ciertas horas y que nadie consume, se puede almacenar.
Acompañamiento a las empresas en temas de sostenibilidad
– Recientemente habéis alcanzado acuerdos para realizar proyectos con empresas como Cooltra o el Valencia CF. ¿Cómo colaboráis con otras compañías en materia de transición energética?
Creo que es muy importante. Trabajamos con personas, pero a veces en nuestro camino se cruza alguna empresa que está interesada en que nosotros le ayudemos. Estamos 100% abiertos a eso, por supuesto. En el caso de Cooltra, les estamos proveyendo de energía renovable para cargar todas las baterías del negocio de motoserie. También estamos haciendo campañas de concienciación de uso responsable de la energía en sus redes sociales.
En el caso del Valencia CF, el proyecto es una instalación de autoconsumo solar en la ciudad deportiva. El Valencia CF es un altavoz en la ciudad y en la Comunidad Valenciana, por lo que es muy interesante para trasladar un mensaje a todas las personas de esta transición energética y del uso de la energía renovable. Estamos muy ilusionados de que una entidad como el Valencia CF haya pensado apoyarse en nosotros para este gran reto que tenemos todos por delante.
Nosotros en el fondo también somos una especie de palanca para que otras empresas se acerquen al mundo de la sostenibilidad de nuestra mano. No porque seamos ni mejores ni peores, sino porque sabemos hacerlo.