Desde Níjar, María Dolores Morales ha puesto toda la carne en el asador para situar a la agricultura ecológica que se lleva a cabo en Almería en el mundo, pero no a cualquier precio.
Ha trabajado duro, junto a sus socios, para mejorar la vida de los trabajadores y en especial para visibilizar la labor de la mujer en el campo. Valores como la sostenibilidad, la eficiencia, la eficacia, la excelencia o la solidaridad rigen la vida de los cerca de 1.000 trabajadores que dan vida a Biosabor.
Hablamos por María Dolores Morales, CEO de Biosabor.
Sostenibilidad y liderazgo, una máxima
– ¿Cuál es tu relación con la agricultura?
Nací en Níjar (Almería). Soy hija de agricultores, por lo que lo conozco el sector desde dentro. Mi referente femenino por antonomasia ha sido mi abuela Dolores, una mujer con una gran capacidad de esfuerzo y de superación, generosa, amable… y con una ética, valores e inteligencia emocional como yo no he conocido a otra persona. Y ese es el legado que nos ha dejado a nuestra familia y que yo he intentado poner en práctica a lo largo de mi vida hasta llegar a Biosabor.
Mi abuela tenía una máxima que pronunciaba siempre y era «Haz el bien y no mires a quién». Para mí eso es la sostenibilidad y el liderazgo. Es decir, personas que cuando miran al que tienen en frente lo ven, son capaces de ponerse en su piel, de sentir lo que el otro está sintiendo… y eso es lo que intento practicar todos los días.
Amor y desamor
– ¿Cómo ha evolucionado el papel de la mujer en un sector como la agricultura?
Reconozco que he tenido una historia de amor y de desamor con la agricultura porque, conforme fui creciendo, veía que mi madre y todas las mujeres que tenía a mi alrededor tenían peor calidad de vida que los hombres, trabajaban al par de ellos en las fincas y al llegar a casa empezaba otra jornada para ellas, que les impedía relacionarse, crecer…, ¡Cuánto talento femenino invisibilizado!
Por ello, me esforcé mucho en estudiar porque mi primera idea era formarme para salir de aquí.
Cambiar la situación
– ¿Por qué decidiste volver y poner en marcha Biosabor?
Yo tenía mi grupo de amigos del pueblo, todos ellos eran hijos de agricultores. Desde pequeños, fuimos creciendo, viendo como nuestros padres llevaban las hortalizas a una subasta donde había una gran especulación y había veces que tenían que tirarlas porque no se vendían. Siempre que nos juntábamos comentábamos que teníamos que hacer algo para cambiar esta situación.
Comencé Empresariales en la Universidad de Almería y lo compaginé con mi primer trabajo en una multinacional francesa, donde estuve tres años en el departamento de Contabilidad que fue como cursar un máster en finanzas.
Pasaron tres años y mi grupo de amigos y yo decidimos que lo que habíamos pensado de niños teníamos que ponerlo en marcha a través de una cooperativa. Así que renuncié a mi trabajo en la multinacional y a un contrato fijo y fue, en ese momento, cuando volví a reconciliarme con la agricultura, me di cuenta de que, para poder cambiar un sistema, era más fácil si estabas dentro.
Conseguimos reunir a un grupo de agricultores, entre los que estaban nuestras familias… y creamos la cooperativa en 1997. En aquella época empezamos 40 socios, alquilamos una nave y maquinaria y buscamos financiación para empezar. El objetivo principal era quitar intermediarios, comercializar directamente con clientes finales, mejorar la vida de los agricultores y, por supuesto, de las mujeres.
Los siguientes diez años de mi vida fueron una vorágine. A lo largo de ese tiempo, las condiciones de los agricultores de la cooperativa progresaron, ya que traían sus hortalizas tal cual las recolectaban no tenían que envasarlas. Eso ya se hacía en la cooperativa según las especificaciones de los clientes y por tanto su jornada laboral se reducía en el invernadero al tiempo que mejoraba la capacidad adquisitiva de las familias, ya que habíamos quitado intermediarios en la venta.
Biosabor, mantener el rumbo
– ¿Y diez años después?
En 2007, la cooperativa ya tenía más de 300 socios, empleaba a más de 500 trabajadores y su cifra de negocio superaba los 50 M€.
Quería destacar que los estatutos de la cooperativa los hicimos de manera que ningún presidente podría perpetuarse en el cargo más de dos legislaturas seguidas ya que queríamos que entraran ideas nuevas. En 2007 hubo elecciones y se constituyó un nuevo consejo de administración con otros agricultores con ideas más conservadoras, lo que supuso un jarro de agua fría para nuestra mentalidad progresista.
En 2008, y debido al cambio de dirección de la cooperativa hacia una producción más convencional y menos ecológica, nos vimos obligados a abandonar el proyecto que con tanta ilusión, pasión y esfuerzo habíamos creado.
Nosotros, que queríamos apostar por una agricultura regenerativa y sostenible. De hecho, todas nuestras fincas eran ecológicas, fundamos Biosabor en septiembre de 2008.
En la primera campaña 2008-2009 facturamos 4,5 M€. A día de hoy, quince años después, nuestra cifra de negocio supera los 70 M€, contamos con unas 320 hectáreas de producción ecológica y sostenible que conviven en plena armonía junto al parque natural de Cabo de Gata-Níjar, declarado por la Unesco reserva de la Biosfera. En picos de campaña tenemos alrededor de 1.000 trabajadores y exportamos a más de 27 países.
Un vergel verde
– ¿Qué supone la agricultura ecológica para Almería?
El cultivo intensivo bajo invernaderos solares ocupa 37.000 ha en toda Andalucía y 33.000 de ellas están en Almería, un 90 % por algo nos llaman «la huerta de Europa» y de las cuales solo 4.700 ha son ecológicas y más del 50 % de estas se ubican en Níjar, que es «la comarca del ecológico por excelencia». El sistema agrícola almeriense bajo invernaderos solares es el más sostenible del planeta por su bajo impacto ambiental gracias a que tenemos 3.000 horas de luz solar al año.
Nuestras cubiertas plásticas son meros cortavientos y son 100 % reciclables. Debajo de estas cubiertas blancas hay un vergel verde que ayuda a este planeta. Además, las cubiertas blancas de los invernaderos evitan el calentamiento global, por el llamado «efecto Albedo». Nuestra huella hídrica es la más baja en el ámbito internacional y veinte veces inferior a la media de España.
Estamos cultivando en pleno desierto gracias al agua desalada del mar y a la innovación y tecnología de nuestros sistemas de riego por goteo. También es importante la recogida de agua de lluvia en las fincas.
Compromiso con el desarrollo sostenible
– ¿Y la sostenibilidad, cómo se lleva a cabo en Biosabor?
Si bien es verdad que Biosabor nació con el gen de la sostenibilidad en su ADN al ser 100 % ecológica, no fue hasta 2015, cuando la Asamblea General de la ONU definió los 17 ODS del planeta y se firmó la Agenda 2030 para toda la población mundial, que en Biosabor nos hicimos eco de la de la noticia.
La Agenda 2030 es un plan de acción en favor de las personas, el planeta y la prosperidad. Por ello, desde el principio tuvimos claro que Biosabor se tenía que alinear con dicha iniciativa y nos acogimos al Pacto Mundial de la ONU e iniciamos nuestra hoja de ruta. Creamos un Comité de Sostenibilidad formado por los responsables de los distintos departamentos y la dirección.
A día de hoy somos de las pocas empresas certificadas en sostenibilidad y que contribuyen a los 17 ods
Nombramos a un responsable de sostenibilidad y empezamos a formarnos. Elaboramos nuestro plan estratégico y de sostenibilidad 2020-2030 bajo el lema “Cultivando la salud del planeta”. De tal manera que los próximos diez años, en la vida de Biosabor, toda las líneas estratégicas e iniciativas están alineadas con la Agenda 2030, apoyando y contribuyendo a los 17 ODS. A día de hoy somos de las pocas empresas certificadas en sostenibilidad y que contribuyen a los 17 ods.
Somos una empresa de desperdicio y residuo alimentario cero, se recicla todo no llevamos nada a vertederos sino a gestores autorizados y ganaderos para consumo animal.
Presencia de Biosabor
– ¿Biosabor cubre todos los eslabones de la cadena de valor?
Nuestra cadena de valor va desde la semilla al consumidor final. Llegamos al cliente que lo pone en el lineal, sin intermediarios.
– ¿Dónde distribuís vuestros productos tanto en España como en el exterior?
En las principales cadenas de distribución europeas, somos principalmente exportadores y nuestros clientes principales son Lidl, Rewe, Edeka, Kaufland, Aldi, Carrefour, Tesco, Marks & Spencer, Migros…
Los productos ecológicos, ¿más caros?
– ¿Por qué es más caro el producto ecológico?
No utilizamos ningún tipo de químicos en nuestros cultivos para controlar las plagas y enfermedades. En muchos casos no tenemos herramientas para proteger nuestros cultivos lo que acarrea una merma de productividad por metro cuadrado en todos los casos.
A su vez, toda la cadena de valor conlleva rigurosas certificaciones de calidad, seguridad alimentaria, sociales y un protocolo de certificación ecológico. Son procesos que van encareciendo los costes efectivos de producción más que en una agricultura convencional.
De hecho, te confirmo que el margen que tiene un agricultor ecológico a día de hoy es mucho más bajo que el que tiene uno convencional.
Por otra parte, vendemos más producto paquetizado que a granel y debería ser al revés para evitar costes de materiales de envasado, que se han incrementado con motivo de la subida de la energía. Sin embargo, los clientes no lo quieren a granel.
Preservar los ecosistemas
– ¿Se puede alimentar con agricultura ecológica a toda la población?
Puede ser que a los 8.000 millones de personas con agricultura 100 % ecológica no, pero sí con una agricultura sostenible. Lo que no puede ser es que estén pasando alertas sanitarias por las hortalizas de terceros países… Luego aparecen enfermedades raras y no sabemos lo que estamos comiendo.
Además no debemos alterar los ecosistemas y debemos ejercer nuestra actividad de forma sostenible y segura. En Biosabor tenemos para ello zonas de biodiversidad, tanto dentro como fuera de nuestros invernaderos, para cuidar tanto a las personas como al planeta.
Auténtico sabor tradicional
– ¿Qué otras claves impulsaron el nacimiento de Biosabor?
Biosabor nació con la idea de recuperar el auténtico sabor tradicional de las frutas y la hortalizas, aportando valor al hacerlo de forma ecológica y poniendo siempre en el centro a las personas.
Nosotros hemos hecho el triple salto mortal en la agricultura recuperando variedades con sabor, no resistentes a virus y sin utilizar químicos de síntesis.
Nuestra idea es cultivar frutas y hortalizas con una agricultura de precisión regenerativa del suelo, ecológica y sostenible. Por ello, deben costar un poquito más.
– ¿Qué frutas y hortalizas cultiváis en vuestros invernaderos?
Principalmente tomate en todas sus variedades gracias a la salinidad de nuestras aguas en Níjar y las cualidades organolépticas de nuestros suelos, representa el 90 % de nuestra facturación. Sin embargo, por el Protocolo Ecológico los alternamos con calabacín, berenjena y pepino y en primavera sandía y melón.
Pioneros en salud
– ¿Cómo se preocupa Biosabor por la salud?
En Biosabor hemos sido pioneros en unir las palabras agricultura y salud. ¿Cómo? Aprovechando que nuestros productos ya tenían unas características organolépticas y nutricionales diferentes, ya que los químicos no sólo atacan al sabor de las hortalizas sino también a sus vitaminas y minerales.
En 2012 y por economía circular decidimos iniciar una segunda línea de negocio, debido a que se nos estaban quedando segundas categorías ecológicas que no exportábamos y se mezclaban en la industria con el convencional, así que decidimos valorizarlas y producir envasados ecológicos de V gama.
Comenzamos con gazpachos, salsas, salmorejo… en tetrabrik. En este momento fue cuando nos preguntamos qué pasa en el cuerpo humano cuando se consumían nuestros productos. A raíz de esta curiosidad creamos un departamento de I+D+i Nutricion y Salud. A día de hoy, ya llevamos ocho estudios in vitro e in vivo –ensayos clínicos con personas en hospitales– y tres publicaciones en revistas científicas.
El primer estudio lo llevamos a cabo con Ainia, con un digestor dinámico in vitro que simulaba una digestión humana y cuyos resultados nos sorprendieron al arrojar que el gazpacho era un superalimento por su altísima capacidad antioxidante que pasaba a sangre.
Y el último estudio que hemos realizado es un ensayo invivo con pacientes oncológicos en el hospital público de Jaen, a través de la FIBAO y el CTA con un protocolo nutricional con nuestros productos ecológicos en procesos de quimioterapia.
En 2015 creamos en nuestra web un «Canal Salud» que, a día de hoy, cuenta ya con más de 180 post y videos hablando de estos hábitos y haciendo recomendaciones sobre alimentación y salud.
Los proyectos de Biosabor
– ¿Qué otros proyectos habéis iniciado gracias a estos estudios?
Todas las evidencias científicas de los estudios realizados nos han servido para hacer una fábrica de V gama en cristal que hemos puesto en marcha hace tres meses, y donde vamos a fabricar productos ecológicos de alto valor nutricional. Hicimos la presentación en Madrid, en el salón de Gourmet edición 2023, junto con nuestra embajadora de marca, Gemma Mengual.
En concreto, hemos presentado la gama «Fusiona». Se trata de una fusión creativa de vegetales ecológicos donde se ha sumado toda esa materia prima ecológica de alta calidad que tenemos, que recoge la experiencia de más de 25 años como agricultores ecológicos, además de todas las evidencias científicas de los estudios in vitro e in vivo que hemos realizado. Todo fusionado ha dado lugar a unos productos deliciosos, nutritivos, sostenibles y con un etiquetado inclusivo ya que van en braille. Esta acción nos hace muy felices ya que es de las primeras iniciativas de etiquetado para personas con discapacidad visual en alimentación.
La planta, en la que hemos invertido 2,5 M€, está equipada con maquinaria de última generación para preservar y que no se degraden propiedades nutricionales, lo que nos permite elaborar productos de alto valor nutricional ecológicos y que aportan salud a nuestros consumidores.
Además, nuestra fábrica dispone de una máquina que envasa bolsas desde 2 hasta 200 litros de capacidad. Esto nos permite aprovechar todos los excedentes diarios de las hortalizas y envasar tomate triturado, gazpacho, salsas de tomate… En definitiva, productos ecológicos que llegan a colectivos como niños, enfermos y personas mayores a través de los caterings de los colegios, guarderías, hospitales, residencias…
Las empresas son las personas
– ¿Qué papel juegan las personas?
En Biosabor siempre hemos puesto en el centro de nuestra gestión a las personas porque creemos firmemente que «las empresas son las personas», quizás sea por nuestros orígenes, por nuestra cultura familiar y arraigo y por ese legado del que hablábamos al principio.
Una de nuestras principales líneas estratégicas es el bienestar de nuestros trabajadores, con planes de igualdad que favorecen la conciliación personal, laboral y familiar. Tenemos implantado un plan de hábitos de alimentación saludable, como no podía ser de otra manera en una empresa alimentaria ecológica, contamos con una cantina donde nuestros trabajadores pueden tomar un menú saludable y ecológico a un precio especial para ellos. Periódicamente se llevan una bolsa a casa de productos ecológicos para compartirlos con sus familias.
Contamos con empleados de más de diez nacionalidades con los que realizamos acciones de integración, como la celebración del día nacional de sus países elaborando el plato típico en nuestra cantina como homenaje.
Igualmente, tenemos una sección que se llama Top Bio donde visibilizamos los logros de nuestros trabajadores sobre arte, ciencia, deporte, educación…
En cuanto a iniciativas con la comunidad tenemos un plan de acción social al que le dedicamos el 10 % del beneficio neto de la empresa ayudando a la integración de colectivos vulnerables y personas con diversidad funcional.
Igual que mi abuela, sembró en mí la semilla de la solidaridad, yo quiero sembrarla en mis hijas y en los hijos de los agricultores y los trabajadores.
Excelencia del esfuerzo
– ¿Qué otros proyectos tenéis en marcha?
En febrero 2023 pusimos en marcha una planta fotovoltaica al hilo de la sostenibilidad. No podíamos permitir que la energía de nuestras instalaciones no proviniera de fuentes renovables para hacer producto ecológico, así como cargadores para coches eléctricos en aparcamientos.
– Sostenibilidad, eficiciencia, liderazgo… ¿Y la excelencia?
Contamos con un Sistema de Gestión de Excelencia a lo largo de toda nuestra cadena de valor, que va desde la semilla al consumidor final, digitalizada y con un exhaustivo sistema de trazabilidad.
Estoy segura de que la excelencia avalada por las prestigiosas certificaciones en calidad, seguridad alimentaria, sociales y de sostenibilidad que tenemos es lo que nos diferencia al sector agro almeriense de terceros países y que los consumidores lo valoran a la hora de elegir el origen de las frutas y hortalizas que compren.
En definitiva, me enorgullece decir que el éxito de Biosabor se debe a la excelencia del esfuerzo diario de todas las personas que la forman y a nuestra cultura de empresa basada en la ética y los valores.