La economía resiste más de lo esperado en 2022, según revela el informe elaborado sobre las regiones españolas por BBVA Research. En el primer semestre, por demanda interna y turismo, y en el cuarto trimestre, por exportaciones y empleo. En 2023 y 2024 la demanda externa contribuirá negativamente, pero los fondos NGEU y la menor incertidumbre impulsarán la recuperación, que será más rápida por el norte.
Se revisa al alza el crecimiento del PIB en 2022 hasta el 4,6% debido al dinamismo del consumo, de la inversión y de las exportaciones de bienes. Concretamente, el turismo ha impulsado el crecimiento de Canarias y Baleares hasta el tercer trimestre; la inversión y las exportaciones de bienes han mejorado las previsiones de crecimiento de algunas CC.AA. del norte de España como Navarra, Castilla y León y Galicia; y el consumo ha tenido buen comportamiento en Madrid, Cataluña, Castilla-La Mancha y Murcia.
Crecimiento al alza en 2o23
Igualmente, el informe de BBVA Research ha revisado al alza el crecimiento en 2023, pasando del 1% al 1,2%, un aumento impulsado por la inversión en maquinaria y bienes de equipo, construcción y exportaciones de bienes. De hecho, las regiones donde se registra un mayor peso de la industria se beneficiarán en mayor medida como es el caso de País Vasco, Navarra y Galicia (+0,5pp), seguidas por Cataluña y la Comunitat Valenciana. Todo ello, facilitado por la progresiva recuperación de la demanda europea a medida que avance el año, la resolución de los cuellos de botella en la producción de bienes y la menor incertidumbre. Sin embargo, las revisiones al alza serán menores en las islas, Madrid, Murcia, Castilla-La Mancha y Andalucía debido a una contribución menor de la esperada del consumo privado y del turismo extranjero al PIB nacional en 2023.
BBVA Researh también prevé una aceleración del crecimiento en 2024 debido al impulso de los Fondos NGEU, una mayor certidumbre, una menor inflación y al aumento de renta de los hogares. Todos estos factores potenciarán el crecimiento de la economía. Igualmente, y como se prevé para 2023, el crecimiento será mayor en las comunidades con más peso de la industria, favorecidas por la eliminación de los cuellos de botella en la producción de bienes. Las comunidades turísticas, una vez normalizada la afluencia, observarán como su crecimiento es menor.
Sorprende la evolución del empleo
Tras una desaceleración en el tercer trimestre de 2022, el empleo sorprende al alza en el cuarto trimestre y se mantiene en positivo, destacando los avances de Canarias y Madrid y los aumentos en Cantabria, Galicia y Extremadura, que habían sufrido caídas en el tercer trimestre. Navarra, La Rioja, Castilla La Mancha y Baleares son las únicas comunidades en las que los datos de empleo apuntan a un empeoramiento en el cuarto trimestre de 2022.
Clima industrial
BBVA Research desvela también que el deterioro de las expectativas a partir de junio no viene acompañado de un deterioro de la producción industrial. De hecho y excluyendo a La Rioja, Galicia y Castilla y León, el clima industrial empeora en todas las comunidades industriales, pero no se traduce en una caída de la producción industrial. Mientras, en Aragón, Navarra, País Vasco, Madrid, Cataluña y la Comunitat Valenciana la producción industrial se acelera.
Por otra parte, el crecimiento se desacelerará en 2023, tal y como vaticina el informe del BBVA. La carga financiera de las familias y empresas se verá incrementada como consecuencia del aumento de los tipos de interés y de la desaceleración económica. De todas formas, el informe deja entrever que la situación es muy distinta de la de 2008, con diferencias regionales menores.
La economía mejorará…
A pesar de todo, los expertos de BBVA prevén que la economía mejore a medida que se disipen las incertidumbres actuales. Para ello, la reducción del precio de la energía será clave. Tal y como refleja el estudio, el descenso del precio del gas podría tener un impacto positivo en el crecimiento de la actividad de 0,1 puntos porcentuales promedio anual en 2022 y 2023. La Comunitat Valenciana, País Vasco, Andalucía y Cataluña, comunidades con un mayor peso del gas en la factura energética, podrían salir más beneficiadas.
La caída de la inflación continuará durante los próximos trimestres, aunque, los expertos vaticicinan que reducir la subyacente será más difícil. El descenso del precio del gas se suma a la disminución del coste del combustible y a que los cuellos de botella en las cadenas de producción van desapareciendo.
La desaceleración de la demanda impactará en la formación de precios. Sectores particularmente afectados por el aumento en los tipos de interés, como vivienda y bienes duraderos, pueden mostrar ajustes algo más importantes. Asimismo, es de esperar que se revierta parte del aumento del valor de los servicios turísticos, en la medida en que el sector afronte un entorno menos favorable.
Si nos centramos en sectores concretos, desde 2019 la venta de coches ha sufrido cambios impositivos, incertidumbre regulatoria, dudas sobre la compra de vehículos eléctricos, la pandemia, el teletrabajo y la competencia de modos alternativos de transporte. Pero en 2023, podrían aumentar entre un 10 y un 25% sus ventas, favoreciendo a las comunidades productoras.
El informe de BBVA también recoge que, a diferencia de lo ocurrido en la crisis de 2008, ahora no se observan desequilibrios relevantes y generalizados en el esfuerzo para la compra de vivienda a lo largo del territorio. En definitiva, nuestra economía está mejor preparada que hace catorce años.
Riesgos y preocupaciones
Entre los riesgos que preocupan a los economistas de BBVA Research se encuentran: la pérdida de competitividad del sector turístico; la inflación que puede mantenerse elevada por el impacto que tenga la negociación colectiva durante los próximos meses; la lenta ejecución de los fondos del NGEU impactará en las familias y empresas; y la importancia de asegurar la sostenibilidad fiscal con un sistema impositivo que no afecte al crecimiento y un gasto que cumpla con las expectativas.