Morir puede salir caro: ¿Cuánto cuesta según la ciudad en la que vives?

La tasa de mortalidad en nuestro país ha sufrido una clara subida en este último año por la pandemia, situándose en 10,38 defunciones por cada mil habitantes, más de un punto por encima que en el año 2019. Un total de 492.930 personas fallecieron, de las que 249.301 eran hombre y 243.629 eran mujeres. A pesar de que la muerte parece que continúa siendo un tema poco apetecible de hablar, lo cierto es que el negocio que la envuelve mueve grandes cantidades de dinero. Pero, ¿realmente sabemos cuánto nos cuesta morir en nuestro país? En Economía 3, también te contamos qué cantidad de dinero dejamos al morir según el país en el que vivimos.

Según un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el precio medio de un sepelio discreto sin grandes lujos cuesta alrededor de 3.800 euros. A pesar de que la incineración parece que suele ser más económica, lo cierto es que la diferencia es muy poca, hablamos de un coste de media de 3.617 euros. Incluso dentro de la misma ciudad, los precios también pueden variar en gran medida. Por ejemplo, en Alicante varían entre los 4.886 y los 6.164; y en Valencia oscila entre 2.542 y 4.434 euros.

Precios para morir muy variables según la zona

Según este estudio, Vigo es la ciudad donde sale más caro morir. Un sepelio supera los 5.000 euros, igual que en Alicante, Santander, Madrid o Pamplona. En el lado contrario se encuentran ciudades como Zaragoza, Cádiz, Albacete, Logroño o Tenerife, donde morir sale bastante más económico, en ningún caso llega a los 3.000 euros.

Aunque lo más común es realizar el entierro en la ciudad donde se vivía, si comparamos ciudades, es posible ahorrar casi un 30% de media. Y, aunque pensemos que incinerar es mucho más económico, la verdad es que no lo es. La diferencia es apenas de 122 euros de media. Incluso hay ciudades donde es más caro.

¿Qué gastos hay en un entierro?

Dentro de los distintos gastos que tenemos en las facturas de la funeraria lo más caro es el féretro, con un precio medio de 1.200 euros. Le sigue la inhumación y cementerio, donde se marcan claras diferencias. Desde la inhumación a las tasas por el alquiler, la media suponer casi 650 euros. El coste medio de incineración, si optamos por ella es de 547 euros.

Además de todo esto no podemos olvidarnos del precio del tanatorio, que ronda los 546 euros las 24 horas. A ello sumaremos otros gastos más pequeños, como flores, coche fúnebre, reparación del cuerpo, gastos de personal… Todo esto puede sumar una media de 1.400 euros.

No olvidemos revisar bien la factura

Desde OCU denuncian que “existe una falta de transparencia por parte de las funerarias: una de cada tres no entrega un desglose detallado de los distintos conceptos, lo que dificulta las comparaciones”.

En cuanto a la evolución de los precios, OCU ha comprobado que el incremento de los últimos ocho años ha sido moderado y permanecen estables. La inhumación ha subido un 5,5% y la incineración un 6,8%.