Ibercaja, el banco arraigado al territorio que se resiste a las fusiones

Ibercaja cumplió 145 años el pasado 28 de mayo. Aquel día se produjo la apertura de la primera oficina de la entonces Caja de Ahorros de Zaragoza, cuyos fundadores, los ilustrados de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, pusieron en marcha para promover la inclusión financiera de las capas sociales más desfavorecidas y fomentar el desarrollo económico y el bienestar social de Aragón. Hoy, aquella caja de ahorros se ha convertido en Ibercaja, el octavo grupo bancario español, con más de 1.000 oficinas por todo el país; más de 5.000 empleados y más de 2,5 millones de clientes.

Con la actividad financiera ejercida a través de Ibercaja Banco y, la social y cultural, mediante la Fundación Bancaria Ibercaja, permanece intacto el propósito de acompañar a los clientes en los momentos más importantes de su vida y el compromiso con el desarrollo económico y social de los territorios donde actúa.

Igualmente, Ibercaja no solo ha logrado superar todas las crisis económicas y financieras que han acontecido en su casi siglo y medio de vida, sino que ha impulsado un proceso de crecimiento continuo. Así, además de mantener un liderazgo en sus zonas de actuación (Aragón; La Rioja; Guadalajara; Burgos y Badajoz), posee una gran implantación en otros territorios de relevancia económica como Madrid y el Arco Mediterráneo.

Valor diferencial

El modelo de negocio de Ibercaja se centra en el cliente y responde a su propósito corporativo: “ayudar a las personas a construir la historia de su vida, porque será nuestra historia, destacando el acompañamiento al cliente en sus momentos vitales más importantes”, explican fuentes de la entidad. El Plan Desafío 2023, hoja de ruta del banco para estos próximos tres años, reforzará el liderazgo en experiencia de cliente para que, en cada interacción, sea presencial o por canales a distancia, perciba este valor diferencial.

En esta misma línea y debido a sus fortalezas y ventajas competitivas, Ibercaja es un activo interesante para cualquiera de sus competidores. Pero su hoja de ruta no contempla ninguna operación corporativa. De hecho, apuesta por un proyecto propio e independiente. Y es fiable y sólida para llevarlo a cabo.

La digitalización de Ibercaja

El número de clientes digitales ya superaba, a finales de mayo, los 864.000, gracias al aumento de usuarios de la app de banca móvil e Ibercaja Pay. Las operaciones que se realizan a través de la banca digital representan el 74,6% del total. Además, el 56,2% de los clientes ha utilizado los activos digitales del banco en los primeros cinco meses del año.

Soluciones online

Fuentes de la entidad afirman que ofrecen, prácticamente, “las mismas soluciones que en atención presencial, aportando la misma cercanía característica de nuestro modelo presencial”. En este año de pandemia, gracias a la transformación tecnológica implementada, han dado respuesta y con calidad a las nuevas necesidades de sus clientes a través de sus canales de banca online para particulares y para empresas; app móvil y atención telefónica.

Fondos europeos

Para asesorar sobre fondos europeos a los clientes de banca de empresas, Mazars y Silo prestarán un servicio a medida para ayudar a las compañías a acceder a los fondos procedentes del plan NextGenerationEU y acompañarlas en el proceso de identificación de oportunidades y solicitud de ayudas.

Fundación Ibercaja

Fundación Ibercaja posee el 88 % del capital de Ibercaja Banco. Su responsabilidad es la de continuar canalizando el dividendo social que la actividad del Banco genera, promoviendo y respaldando iniciativas comprometidas con un futuro más sostenible, alineadas con la Agenda 2030, en torno al desarrollo profesional, especialmente de los más jóvenes y al desarrollo integral de las personas, al cultural y al territorial.