«En 1953, un cineasta valenciano estrenaba en el madrileño cine Callao su película ‘Bienvenido Mr. Marshall’ en la que retrataba a una España franquista que quedó al margen de lo que fue la recuperación para Europa». Así iniciaba ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, su discurso con el que presentó el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española. Recordaba el presidente que en 2021 se celebra el año de Berlanga y destacó que en esta ocasión no ocurrirá como en el film, en el que se muestra satíricamente como el «coche de la recuperación pasó de largo» de España.
Esta vez, señaló, «el coche de la recuperación no viene del otro lado del Atlántico, sino que es Europa la que lo ha puesto en marcha», y el año que viene «debe ser el año en que este coche ya no pasa de largo sino que se detiene y sube a España a bordo», expresó Sánchez, en un acto que arrancó con la interpretación del himno europeo por parte de músicos integrantes de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana. Un pequeño guiño a la ayuda que ha de venir de Europa.
Y es que el Gobierno español ha puesto sus esperanzas para la recuperación de nuestra economía en el dinero europeo. El plan de Sánchez depende de que estos fondos lleguen en tiempo y forma. Son 140.000 millones de euros hasta 2026 con los que espera «transformar el modelo económico del país» y revertir la situación originada por la pandemia. «Hemos impulsado un plan que hará que el crecimiento sea robusto y demos un salto hacia delante sin dejar a nadie atrás», aseveró el presidente.
Apuntó Sánchez a la urgencia de activar el plan cuánto antes. Para ello, avanzó que se preparan diversas reformas legislativas para que los fondos que lleguen de Europa puedan gestionarse de forma «eficiente y efectiva, sin perder ni un segundo». Así, afirmó que se modificarán las leyes de contratos del sector público, de subvenciones y de régimen jurídico del sector público para modificar aquellos aspectos «que suponen un obstáculo» a la hora de ejecutar los recursos europeos.
El Plan de Recuperación, sustentado en los 140.000 millones de euros que llegarán de Europa hasta 2026, supone una “cifra inédita equivalente al 11 % del PIB en 2019 de España”, señaló Sánchez quien expuso que con este plan se podrá “relanzar la actividad económica y la creación de empleo para hacer frente desde el primer momento a la crisis económicas derivada del coronavirus”. Explicó el presidente que se pretende generar un impacto sobre el PIB español de 2,5 puntos anuales y crear 800.000 nuevos puestos de trabajo en los próximos tres años.
“Queremos una España verde, digital, sin brechas de género y cohesionada e inclusiva”, citó Sánchez como principales ejes del plan de recuperación y ha apuntado que la ruta de la recuperación económica tras la crisis provocada por la pandemia “está trazada” y lo que queda es “ponernos en marcha”. En este sentido, relató Sánchez las 10 políticas tractoras con las que cuenta el plan:
- Agenda urbana y rural. Expuso el presidente la necesidad, entre otro asuntos, de combatir el despoblamiento. Se destinarán a este apartado el 16 % de los recursos.
- Infraestructuras y ecosistemas resilientes. Contará con el 12 % de los recursos y se buscará «luchar contra la desertificación» así como conservar la biodiversidad del país e invertir en infraestructuras claves.
- Transición energética. Recogerá el 9 % de los fondos.
- Modernización de la administración. Señaló Sánchez que las instituciones «han de ser el motor de la transformación que necesita España». Contará con el 5 % de los recursos.
- Modernización del sistema productivo. Un apartado «urgente» para el presidente con tal de que España logre ganar competitividad. Se destinará el 17 % de los fondos.
- Pacto por la ciencia, la innovación y el refuerzo del sistema del salud. Contará con otro 17 % de los recursos.
- Educación y formación. La «piedra angular», destacó Sánchez del cambio que precisa el país. Recibirá la mayor parte de la dotación, un 18 %.
- Cuidado a personas dependientes y políticas de empleo. 6% de los recursos.
- Cultura y deporte. 1,1 % del total.
- Modernización del sistema fiscal. Por último, el presidente apunto a la necesidad de renovar el sistema fiscal para «un crecimiento inclusivo», por lo que anunció que en breve se crearía una comisión de expertos.
El presidente del Gobierno supedito la puesta en marcha del Plan de Recuperación a la aprobación de los Presupuestos para 2021. Indico que los los Presupuestos Generales del Estado para 2021 contienen un «adelanto inédito de 27.000 millones» del plan de recuperación nacional, y ha destacado la importancia de que éstos estén aprobados «antes de final de año» para que estas inversiones puedan arrancar.
En este punto, recordó Sánchez que la última vez que visitó la Comunitat Valenciana fue en enero donde se interesó por los afectados por la borrasca Gloria. «Han pasado 9 meses solo de esa visita y vuelvo en circunstancias difíciles, aunque muy distintas», apuntó y añadió que «las prioridades que teníamos en aquel entonces, son aún más necesarias hoy. Tenemos que hablar de la protección social, de la transformación energética y de la inversión en infraestructuras». Para el presidente «ha llegado el momento de afrontar todos esos desafíos. La pandemia ha supuesto un acelerador a aquellos procesos que España necesitaba abordar».
En clave valenciana, ha asegurado que estas cuentas contemplan inversiones trascendentales para la Comunitat por valor de 1.200 millones de euros, un 57 % más que los presupuestos de 2018, y el 9,6 % del total regionalizado. Sánchez ha considerado que no hay alternativa a estos presupuestos, y ha pedido «trascender la miopía» y las «líneas rojas», y alcanzar un acuerdo que permita sobreponernos de este momento de «zozobra y desasosiego» para convertirlo en una «oportunidad de avanzar».
En este sentido, ha mostrado «algo de envidia» por la «vía valenciana» ante la pandemia y sus consecuencias, que contrasta con la vía de la «provocación constante», que hay que abandonar «de una vez por todas, definitivamente, en el conjunto del país». Según Sánchez, la vía valenciana demuestra que el acuerdo entre fuerzas políticas «es posible» y es «la única alternativa que nos podemos permitir en la situación actual, la única que este país se merece».
El president de la Generalitat, Ximo Puig, quien también participó en el acto celebrado en el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe, indicó que el hecho de que la ronda de presentaciones de este plan se inicie en València es «un reconocimiento» al esfuerzo colectivo de la sociedad valenciana, que en este tiempo «tan complejo, donde ya existen suficientes problemas como para crear otros superfluos», ha creado esa «vía valenciana», basada en tres pilares. El primero de eso pilares es «el acuerdo», pues según Puig la sociedad valenciana ha demostrado que «es la hora de los puentes, no de los muros«, y se han cerrado tres pactos -uno social, uno institucional y uno político, apoyado por el 90 % de Les Corts- que incluyen 1.068 medidas para la recuperación
El segundo pilar, citó Puig, es la «serenidad», un clima que ha imperado en el Parlamento valenciano, los sindicatos, la patronal y la sociedad civil, mientras otros territorios hacen de «la confrontación, el caos y la fractura» su respuesta «irresponsable» frente al virus que han dejado una España «colmada de ruido y furia». El president indicó en tercer lugar las «alianzas» entre Administraciones y empresas, la cooperación entre lo público y lo privado para que todo el tejido productivo aproveche las oportunidades que brinda Europa y supere las deficiencias estructurales, y las empresas generen empleo y prosperidad.