Polígono Norte se prepara para convertirse en un área industrial consolidada
El Polígono Norte (Almussafes) consiguió el pasado martes convertirse en Entidad de Gestión y Modernización (EGM) pero el trabajo no ha terminado aquí. En estos momentos y tal y como confirma Romina Moya, gerente de la EGM de Polígono Norte y de la Asociación de Empresarios de Parques y Polígonos lndustriales (Ribera Baixa) (APPI) avanza que quieren convertirse en un área industrial consolidada y «para ello necesitamos algunas mejoras. En el medio y largo plazo queremos llegar a a ser también un área industrial avanzada», tal y como recoge la nueva Ley de Áreas Industriales.
Desde el Polígono Norte han establecido cinco áreas de trabajo -seguridad y emergencias, infraestructuras, suministros, servicios, accesos y movilidad- que engloban aspectos como «la instalación de una red separada de aguas pluviales y aguas residuales, cámaras de vigilancia, el seguimiento de los planes de emergencia, la fibra óptica (que ya se está implantando), la consecución de suministro de gas natural, suministro eléctrico en alta y baja tensión, recogida selectiva y gestión de residuos, entre otras necesidades».
Pero las aspiraciones del Polígono Norte y del polígono Juan Carlos I van más allá y quieren convertirse en un área industrial inteligente, tal y como afirma Romina Moya. «Las nuevas tecnologías están ahí y es necesario aprovecharlas».
Según explica su gerente, «ya tenemos un modelo de gestión de áreas industriales que se elaboró en colaboración con la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) quien a su vez contrató a una consultora para definir el modelo. Se trata de un documento muy bien desarrollado donde se explica las líneas que se pueden desarrollar, las tecnologías que se pueden implantar y los pasos que hay que dar y nosotros nos encontramos ahora en el punto de encontrar los recursos económicos necesarios para poder desarrollarlo ya que contamos con muy pocos medios», incide.
El Ayuntamiento de Almusssafes ha anunciado que quiere apoyarles con un 25% para llevar a cabo este plan pero necesitan ayuda de las instituciones para desarrollar este tipo de proyectos. «Creemos que van a salir ayudas desde el Ivace y en 2020 intentaremos valorar a qué ayudas podemos acceder», explica. El suelo del Polígono Norte es del Ayuntamiento y es público, «con lo cual, -matiza Romina Moya- tampoco tiene sentido que la entidad o las empresas inviertan en instalar sensores para controlar el nivel de luz que es necesario a diferentes horas del día, el estado de las farolas, si los contenedores están o no llenos… Todos estos avances no le corresponden a la entidad, son propias del Ayuntamiento y este debe apoyarse en las instituciones autonómicas». «De todas formas, -recalca- sería genial saber qué plazas de aparcamiento están libres ya que los trabajadores ahorrarían tiempo aparcando, en atascos y contaminarían menos. Cuando ya existen app asequibles económicamente que detectan las plazas libres y que avisan; o tecnologías para coordinar los protocolos de emergencias. En definitiva, se trata de tecnologías que ya se aplican en ciudades y que sería muy fácil adaptarlas a polígonos pero necesitamos conocer la inversión».
En su opinión, «se podría llevar a cabo con un presupuesto de entre 300.000 euros y cinco millones dependiendo de las tecnologías que se implanten».
Actualmente, continúa la gerente de la Appi, «trabajamos de una manera reactiva y ponemos el remedio cuando el daño está hecho pero, hoy por hoy, hay tecnologías que detectan que se va a producir un problema. Mientras que cuando se trabaja de una forma proactiva, controlando todos los elementos comunes de un área industrial -mobiliario urbano, papeleras, contenedores, farolas, aceras, bocas de incendio…- seríamos mucho más eficientes y seguros y se necesitarían menos recursos», detalla.
Dificultades salvadas a la hora de constituirse en EGM
Romina Moya manifiesta que están muy contentos por haber conseguido convertirse en EGM en un polígono relativamente pequeño y con la dificultad de que «somos una asociación voluntaria. No es fácil conseguir que los empresarios se comprometan a pagar religiosamente los próximos 20 años que dura el convenio», aclara.
El convenio para poner en marcha la EGM se aprobó por el 80% de la asamblea «tanto en el caso del valor catastral como de los titulares dijeron que sí por unanimidad, los que no dijeron nada fue porque no vinieron».
La gerente de la Appi también ha hecho hincapié en la necesidad de poner en marcha un plan de movilidad. «Ya contamos con un plan de emergencia, pero hay que llevar a cabo uno de movilidad. No puede ser que estos polígonos no tengan transporte público y sobre todo Juan Carlos I, oonde hay 160 empresas».
El plan de movilidad ya lo ha llevado a cabo el Ayuntamiento de Almussafes, tal y como confirma Romina Moya «pero nosotros queremos que se desarrollen ciertas infraestructuras como el carril bici desde el apeadero de Romaní y la parada de tren de Benifaió a los polígonos. También reclamamos lanzaderas o autobuses en las horas punta. Incluso estamos analizando a nivel de entidad la posibilidad de contratar autobuses compartidos con las empresas en los momentos de cambio de turno y los flujos de entrada poniendo autobuses desde Xàtiva, Valencia, Gandia y Alzira hasta Almussafes», subraya.
Igualmente, están a la espera de que se ponga en marcha el Plan Moves, una iniciativa que parte del Consell y que consistiría en poner lanzaderas desde Valencia. «Esperamos que se ponga en marcha y se convierta en una primera prueba y nos permita saber si tiene éxito y lo utilizan los trabajadores», explica.
Por otra parte, Romina Moya adelanta también que el proceso para convertirse en EGM también ha comenzado en el polígono Juan Carlos I donde la asociación también es voluntaria y hay que involucrar e informar una por una a las 160 empresas que lo integran.
Artículos relacionados
Angélica Gómez elegida nueva presidenta de Unión Profesional de Valencia
David de Pastors, nuevo director general de Evaluación de la Conformidad en Aenor