La Comunitat duplica su déficit en el primer semestre respecto al mismo periodo de 2018

El déficit de la Administración regional asciende en los seis primeros meses del año a 7.938 millones, lo que supone un 10,3% más  y un 0,63% del PIB, frente al 0,60% del mismo periodo del pasado ejercicio, cuando el conjunto de  las comunidades autónomas acumulaban un déficit de 7.197 millones, según los datos hechos públicos por el Ministerio de Hacienda, en el informe de Contabilidad Nacional elaborado por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE).

En un solo mes, de mayo a junio, el déficit en la administración regional ha crecido un 83,7% al pasar de 4.321 millones –cifra que representaba el 0,34% del PIB– a 7.938 millones  –que viene a suponer como decimos el 0,63 del PIB regional–.

La Comunitat Valenciana es la segunda autonomía que más contribuye a incrementar este déficit, con un total de 1.276 millones en estos seis primeros meses del año, lo que supone el -1,1% del PIB regional. Se sitúa solo por detrás de Cataluña (1.724 millones) y avanza por delante del resto, seguida de Andalucía (945 millones) y Madrid (900 millones), hasta representar el 16% del total del déficit acumulado por las comunidades autónomas en ese período.

Señalar que en el primer semestre de 2018, el Estado concedió anticipos a cuenta del sistema de financiación por importe de 1.146 millones, mientras que en el mismo período de 2019, el importe de los mismos ha sido de 803 millones, 343 millones menos.

Y de nuevo, en el foco de esos anticipos está la Comunitat. El grueso de los anticipos solicitados a cuenta de los recursos del sistema de financiación se ha llevado a cabo por parte de la Comunitat Valenciana. En 2018 solicitó 784 de los 1.146 del conjunto de las regiones, es decir el 68,4% total y en estos primeros 6 meses del año, el 75%, 603 millones de los 803 contemplados según los datos del Ministerio.

Con respecto al mismo periodo de 2018, el déficit de la región valenciana prácticamente se ha duplicado, ha pasado de 666 millones a 1.276, con un aumento porcentual del 91,6%.

En el conjunto de la Administración regional, esta evolución del déficit se debe a un crecimiento de los recursos del 5,0%, destacando el incremento del 8% de los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio y de las transferencias recibidas de otras administraciones públicas, que crecen un 6,1%, principalmente las relacionadas con el sistema de financiación (aumentan un 4,1%).

Los empleos han registrado un aumento del 5,4%, con un importe acumulado de 88.883 millones (4.588 millones más). Destacan, la remuneración de asalariados, que crece un 7% debido, entre otras causas, a que la subida salarial de 2018 no se llevó a cabo hasta julio 2018 con la entrada en vigor de la Ley de PGE, mientras que en 2019 el incremento salarial es del 2,25% sobre el vigente a finales de 2018.

Por otro lado, los consumos intermedios aumentan el 1,5% y el gasto en transferencias realizadas a otras administraciones públicas se eleva un 10,1%, con un volumen de 7.739 millones, debido fundamentalmente al incremento del 17,5% de las transferencias a las Corporaciones Locales y al aumento del 4,9% de las transferencias efectuadas al Estado por el sistema de financiación, que han pasado de 3.948 millones a 4.143 millones.

Por ultimo destacar la evolución del gasto social, incluyendo prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie y transferencias sociales en especie, que aumenta en conjunto un 3,3%, principalmente por el aumento del gasto en conciertos educativos en un 5,1%, del gasto farmacéutico en un 1,8%, y del gasto en conciertos de asistencia sanitaria en un 5,5%.