La Escuela de Artesanos de València celebra mañana sus primeros 150 años de vida. Para celebrar la efeméride, el martes 16 se presentará ante la comunidad educativa el programa de actos conmemorativos del aniversario.

La institución, que alberga en la actualidad más de un millar de alumnos, nació en 1868 y en su fundación colaboraron “relevantes ciudadanos amantes del progreso social con el objetivo de fomentar gratuitamente la enseñanza práctica de las Artes y Oficios, y la instrucción moral e intelectual entre las clases obreras, a fin de que éstas alcancen el mayor grado posible de perfeccionamiento y educación en beneficio de su bienestar”, tal y como recogen sus estatutos fundacionales.

Este objetivo fundacional basado en favorecer la igualdad de oportunidades, para compensar las posibles carencias de los alumnos debidas a factores económicos y/o sociales, se ha venido cumpliendo a lo largo de los años. La institución se ha adaptado y modernizado conforme a las diferentes reformas, leyes, sistemas y avances tecnológicos, hasta llegar al día de hoy en el que oferta una educación completa que abarca desde la educación infantil pasando por la educación Primaria, Educación Secundaria, la FP Básica, Bachillerato y los Ciclos Formativos de Grado Medio y Superior.

Con el objeto de preservar los objetivos fundacionales y poder seguir sirviendo eficazmente a los valencianos, las Escuelas de Artesanos ponen su siglo y medio de experiencia al servicio de una educación integral que contempla tanto el aprendizaje académico, la formación intelectual y práctica, así como la metodología necesaria para fomentar una educación en valores dentro del marco de la libertad de enseñanza.

La Escuela de Artesanos, de la que es su entidad titular la Fundación del mismo nombre, es un centro docente concertado y laico. El presidente del patronato que rige el presente y el futuro de las mismas, Javier Orozco, pone el énfasis en los verdaderos protagonistas de esta dilatada historia son los alumnos. En su opinión, “es a través de los alumnos como la Escuela cumple su misión social empezando a desarrollar en ellos las capacidades que luego proyectarán en su futuro profesional. Ese es nuestro verdadero objetivo como formadores”.

En este sentido, Orozco cree que “el futuro pasa por ampliar para los estudiantes las fronteras del aprendizaje con metodologías innovadoras, en contextos internacionales, que permitan mantener el liderazgo que ha caracterizado la historia del centro y a esa tarea nos dedicamos cada día”, explicó.

Hay que recordar que las Escuelas de Artesanos están autorizadas desde el año 1977 para impartir Formación Profesional y desde el curso 1998/99 es un centro de enseñanzas integradas. Paralelamente, se continúan impartiendo las tradicionales Enseñanzas Artísticas.