Jueves, 25 de Abril de 2024
Pulsa ENTER para buscar

Ekaterimburgo, la “desconocida” tercera ciudad más grande de Rusia

Ekaterimburgo, la “desconocida” tercera ciudad más grande de Rusia

Ekaterinburgo es un lugar con cierta aura mística. Crecida de la nada a partir de un pueblo de mineros, pasó a ser la tercera ciudad en importancia de Rusia. Actualmente es una metrópoli en la que conviven edificios modernos con otros correspondientes a los siglos XVIII y XIX, así como los típicos edificios de la época comunista.

Una ciudad grande poco conocida por occidente

La ciudad es un centro industrial importante y una estación importante del Transiberiano. El primer emperador de Rusia, Pedro, la fundó en 1723 como una fábrica fortaleza que estaba junto al río Iset y que terminó siendo el último lugar donde vivió Nicolás II. En la II Guerra Mundial, más de medio centenar de empresas se evacuaron a la ciudad procedentes de Moscú, además de la colección del Museo Estatal del Hermitage y del Teatro Chejov moscovita.

Los lugares que más vale la pena visitar son una estela a modo de símbolo que representa la frontera entre Europa y Asia en el kilómetro 17 de la carretera de Moscú, y donde se asesinó a la familia real de los Romanov. Además de esto, en la ciudad hay lugares de gran interés que merece la pena visitarlos.

Mientras paseas por el centro histórico, seguro encontrarás en algún momento una línea pintada en color brillante, recorre los 30 lugares culturales del centro de la ciudad, desde el edificio de más antigüedad, hasta legendarias mansiones o museos de lo más curioso.

Existen en Ekaterimburgo más de 50 museos, el objeto más preciado es el Gran Ídolo de Shiquir, la escultura de madera más antigua del mundo, que demostró que en los Urales vivió gente que se dedicaba a realizar esculturas 5.000 años antes de que en Egipto se hiciesen las pirámides. En el Museo de Historia de Ekaterimburgo hay objetos que se han hallado en los alrededores que datan del año 8.000 a.C.

Uno de los lugares más atractivos para el turista es la Plaza histórica, un museo y complejo memorial donde entre los años 1721 y 1723 llegaron a fundarse plantas mecánicas, de cobre, fundición de hierro y siderúrgicas, que cuentan la forma en que originó la ciudad. En la década de los 70 del siglo pasado, se enterró una cápsula del tiempo que se abrirá en el 2023, para celebrar los 300 años de la ciudad.

La industria turística de Rusia va poco a poco adaptándose y el cambio de mentalidad se va produciendo, aunque lógicamente no es flor de un día. Las ciudades más allá de Moscú o San Petersburgo que tienen potencial turístico deben aprovecharlo, los ingresos para sus propias economías y por ende a sus habitantes bien lo merecen.

.

Caixa Ontinyent emancipar-te
Mujeres al Timon viaje transformador
campanya renda Generalitat
Esat primero ranking

Dejar una respuesta