La economía del bien común se considera un nuevo modelo socioeconómico alternativo que basa sus principios en la valoración de la dignidad, los derechos humanos y la responsabilidad con el medio ambiente. Este nuevo modelo desplaza el desmedido interés económico actual y lo sustituye por el bienestar social como indicador del éxito de las empresas. Sin importar su naturaleza. Dicho de otra forma, es un sistema económico que está orientado hacia la sostenibilidad y la solidaridad en lugar del crecimiento.
La economía del bien común describe un sistema económico con fundamentos en valores que promueven el bienestar de todos. De igual manera, replantea la función del dinero como medio para alcanzar el bienestar social. Esto contradice el modelo económico actual que determina al dinero como el fin que se persigue en lugar del medio que se utiliza. Además, busca la igualdad, la solidaridad, la colaboración y el respeto con el uso adecuado de los recursos y del medio ambiente.
¿Qué es la Economía del Bien Común?
Entre los diferentes conceptos que podemos rescatar y que nos dicen qué es o qué se entiende por economía del bien común (EBC), tenemos que es un movimiento político, social, económico, alternativo y completo cuyas bases o fundamentos fueron desarrollados por el economista austriaco Christian Felber en 2010. Él plantea en su concepto el respeto de la dignidad humana, la solidaridad, la ayuda mutua, la colaboración y la responsabilidad ecológica, como sus premisas principales. Sin embargo, encontramos otros autores que también definen la economía del bien común.
Entre ellos está Elinor Ostrom, premio nobel de economía 2009, que dice que la economía del bien común puede explicarse como la gobernanza de los bienes comunes, para un nuevo enfoque de los recursos naturales. Según Ostrom, los bienes comunes son aquellos bienes necesarios para la vida de todos y para la supervivencia de una sociedad. En este sentido, podemos hablar de bienes naturales (agua, tierra, aire, energía, etc.), bienes sociales (cultura, salud, educación) y, en los últimos años, la información como parte de estos bienes necesarios.
¿Qué problemas identifica la economía del bien común?
La problemática identificada por la economía del bien común (EBC) está asociada directamente a la manera en cómo funciona la economía en el mundo. Es decir, se presenta en contraposición a los valores que defiende la corriente económica actual. Aunque la mayoría de las constituciones y declaraciones de principios de los diferentes países estipulan de forma explícita el bienestar social de sus ciudadanos, la economía actual se expone como una lucha salvaje y egoísta, para nada orientada al bien común.
Entre las problemáticas que identifica la EBC está la marcada economía de acumulación de dinero, donde el objetivo deja de ser el bienestar social. El objetivo es la posesión de bienes de valor como el dinero o las propiedades. No se tiene en cuenta el daño que se genera en la obtención de estos bienes. Esto crea un deterioro progresivo y avanzado del medio ambiente y se incrementa el calentamiento global o la generación constante y excesiva de especulación, produciendo gran inestabilidad financiera.
Otra de las problemáticas actuales es la desigualdad económica entre la población. El éxito de las empresas se establece por su balance económico, mientras que el de los países por su producto interno bruto (PIB). La EBC crea valores determinados por indicadores monetarios cuyo verdadero valor es ser el medio necesario para conseguir el objetivo real de la economía: el bien común. Se busca que el dinero solo sea el medio utilizado para alcanzar el verdadero objetivo de la economía, que no es otro que el bienestar social.
¿Qué soluciones propone la economía del bien común?
Las soluciones propuestas por la economía del bien son totalmente opuestas a los planteamientos básicos establecidos por el capitalismo en las sociedades actuales. Hace fuertes críticas a la competencia constante, desmedida y desleal que acompaña al afán de lucro individual. Así como al establecimiento de la propiedad privada sobre bienes comunes esenciales para la supervivencia y la democracia. También, critica el nefasto impacto ecológico de la economía actual, así como el uso de indicadores económicos para determinar el bienestar de las sociedades.
Entre las diferentes soluciones planteadas por la EBC podemos mencionar:
- La importancia de priorizar los valores humanos y cooperativos.
- La limitación y posterior desaparición de las diferencias económicas. Estas diferencias se producen por las desigualdades de ingresos patrimoniales.
- La implementación de instituciones públicas. Dichas instituciones verdaderamente deben velar por proveer a las sociedades de los llamados bienes democráticos.
- Una verdadera reducción de la huella ecológica marcada por entes privados y estatales. Estos entes solo con fines económicos están generando un gran impacto ecológico negativo en el medio ambiente.
Estas son solo algunas de las propuestas contenidas en los 20 puntos centrales que fundamentan este modelo económico del bien común. La EBC no se limita tan solo a criticar lo erróneo del modelo establecido actualmente, sino que pretende influir positivamente aportando soluciones. Estas soluciones rendirán frutos a medio y largo plazo, pero son la manera de iniciar el proceso de concientización social. Además de generar un cambio sustancial en el sistema económico actual priorizando las relaciones sociales y el beneficio común.
¿Cuáles son las desventajas de la economía del bien común?
La economía del bien común es un modelo socioeconómico que pone de manifiesto lo equivocado de las políticas económicas tradicionales aplicadas en la sociedad actual. Aporta múltiples ventajas a las empresas y los estados que deciden implementar un cambio de rumbo en sus políticas económicas actuales. Sin embargo, la economía del bien común también trae consigo ciertas desventajas. Las mismas deben ser tomadas en cuenta y analizadas profundamente para determinar la verdadera viabilidad del nuevo modelo que se pretende implementar.
Entre estas desventajas podemos mencionar:
- El término “bien común” es considerado subjetivo y está sujeto a libre interpretación, de acuerdo a ciertos intereses de los actores económicos.
- La economía del bien común no contempla el uso de indicadores económicos que se puedan adaptar de forma generalizada a las diferentes empresas y estados en un corto o mediano plazo.
- El hecho de que no contempla derechos de propiedad privada y los bienes comunes se puedan explotar libremente puede generar un mal aprovechamiento y una sobreexplotación de los recursos.
Principales líneas de aplicación de la economía del bien común
El modelo económico del bien común se puede aplicar en cualquier campo de todo tipo de empresa u organización pública o privada, a través del balance del bien común. Es un nuevo modelo de la economía que incita a la transformación total del modelo económico actual. Ofrece una alternativa viable, clara y concreta para que a partir de acciones individuales y/o colectivas las diferentes organizaciones públicas o privadas, sin importar su tamaño, alcancen el éxito empresarial.
Sus principales líneas de aplicación descansan en la declaración general de derechos humanos, valores democráticos básicos y constitucionales. Así como también en valores de relación basados en los hallazgos de la psicología social, la ética del respeto a la naturaleza y la protección de la tierra (Carta de la Tierra) y los hechos científicos conocidos como el concepto de límites planetarios. Sin embargo, la implementación de este modelo político y socioeconómico requiere motivación intrínseca y responsabilidad personal, además de incentivos legales, marco regulatorio y sensibilización de la población.
¿Por qué es importante la economía del bien común?
La economía del bien común, a diferencia del modelo económico tradicional, es un sistema económico alternativo cuya importancia radica en el establecimiento de un nuevo modelo económico ético centrado en principios más allá del balance financiero. Tiene como prioridad la dignidad y los derechos humanos, el bienestar social y la conservación del medio ambiente. Es decir, sustituye las ganancias económicas por el bienestar de las personas y la responsabilidad ecológica como la máxima prioridad de las empresas.