Un proyecto que comienza lo suele hacer con una inversión baja cuando se trata de personas que están emprendiendo y a medida que la empresa va creciendo se plantea la posibilidad de buscar financiación. Debido a los problemas para encontrar financiación proveniente de entidades bancarias, en los últimos años se han desarrollado nuevas fórmulas para lograr dinero para las startups sobre todo a través de la inversión privada, por eso se habla de figuras como los business angels o el crowfunding.

En cualquier caso, debemos estar muy bien preparados y saber qué necesitamos antes de buscar financiación, para ello os proponemos las siguientes claves esenciales:

• Estudia qué buscan los inversores. Por lo general, a un inversor le interesa la idea de negocio, las personas que hay detrás de esa idea y cuándo obtendrán el retorno de su inversión. Muchos proyectos no logran inversión porque tienen un gran equipo, pero no una buena idea o porque tienen una gran idea pero no saben cuándo puede obtener el inversor el retorno de su inversión. Por lo tanto, los tres elementos: equipo, idea y retorno, son esenciales y deben ir siempre juntos.
• A la hora de buscar un inversor y antes de dirigirte a él, coteja si es el tipo de inversor que necesitas. No todos los inversores están especializados en los mismos negocios, ni pueden ofrecer lo mismo, por ello es necesario hacer un estudio pormenorizado de lo que necesitamos realmente y de lo que cada inversor nos puede ofrecer.

• Otro aspecto importante que debes considerar antes de dirigirte a un inversor es pensar qué porcentaje de tu empresa estás dispuesto a ceder, porque en la mayor parte de los casos los inversores te van a solicitar una participación. Para poder decidir ese aspecto deberás calcular cuánto dinero necesitas y el valor estimado de tu empresa. Puedes establecer unos límites y dejar un margen para la negociación.
• Sé realista. Seguro que tienes un buen proyecto, pero para venderlo a un inversor debes tener un plan de negocio sólido, un estudio de mercado sin errores y unas perspectivas de crecimiento del negocio adaptadas al sector donde se va a desarrollar la actividad y a la realidad de ese sector.
• Consigue al menos un cliente. No podemos presentar nuestro proyecto ante un inversor sin haber conseguido al menos un cliente que confíe en nuestro producto o servicio y en nuestra empresa. Por ese motivo, antes de dirigirte a un inversor busca un cliente para tener al menos ese apoyo a tu idea.
• Piensa en una salida para el inversor. Para un inversor puede ser interesante que le plantees una posible salida para el caso de que el proyecto no vaya bien, de esa forma se quedará tranquilo al saber que tiene una garantía.

Lograr que alguien confíe en nuestro proyecto y arriesgue su dinero es una tarea muy complicada, pero al menos debemos estar muy bien preparados para todas las eventualidades que se puedan presentar para poder obtener el mejor resultado posible para nuestra empresa.