Nueva Zelanda y la Unión Europea han firmado un acuerdo de libre comercio, que remueve los aranceles al 91% de los productos neozelandeses. Además, dará protección a productos con denominación de origen protegida, como el vino de Rioja o el queso manchego.
Un acuerdo de libre comercio entre países es un tratado que busca eliminar o reducir las barreras comerciales, como los aranceles y las restricciones cuantitativas, con el fin de fomentar el intercambio de bienes y servicios de forma más fluida y libre. Estos acuerdos promueven el crecimiento económico, la creación de empleo y el desarrollo de las empresas involucradas.
Para la Unión Europea, los acuerdos de libre comercio son fundamentales, ya que permiten ampliar su acceso a mercados internacionales, aumentar las exportaciones y fortalecer su posición como actor global en el comercio. Al eliminar las barreras comerciales con otros países, la UE puede beneficiarse de una mayor diversidad de productos y servicios, precios más competitivos y nuevas oportunidades de inversión.
En el caso de España, como miembro de la UE, se beneficia directamente de estos acuerdos. Un acuerdo de libre comercio permite a las empresas españolas acceder a mercados más amplios y competitivos, lo que puede aumentar su competitividad y generar más empleo. Además, la eliminación de barreras comerciales facilita la exportación de productos españoles, como alimentos, vinos, automóviles y productos manufacturados, lo que impulsa el crecimiento económico del país.
¿En qué consiste el acuerdo entre Nueva Zelanda y la Unión Europea?
El acuerdo ha sido suscrito por el ministro de Comercio y Crecimiento de las Exportaciones de Nueva Zelanda, Damien O’Connor, y el comisario de Comercio de la UE, Valdis Dombrovskis. Se prevé que entre en vigor en el primer semestre de 2024, después de que sea ratificado por los Legislativos de ambas partes, según ha informado el gobierno neozelandés.
En concreto, el tratado prevé que el 60% de las importaciones de la mantequilla de la UE provengan de Nueva Zelanda. En comparación con el 14% actual. También, las importaciones del bloque de los Veintisiete de los quesos del país oceánico pasen del 0,5% al 15%.
«Los productores neozelandeses figuran entre los más sostenibles del mundo, y estas credenciales resuenan bien entre los consumidores de la UE», ha declarado O’Connor, al remarcar que el acuerdo también está vinculado a avances en asuntos como la crisis climática, los derechos laborales y la capacitación de las mujeres, entre otros.
Un comercio bilateral de 9.100 millones de euros
Para Nueva Zelanda, la entrada en vigor del pacto con su tercer socio comercial supondrá un ahorro arancelario de unos 100 millones de dólares neozelandeses al año (61,8 millones de dólares estadounidenses o 56,4 millones de euros).
También permitirá que las exportaciones del país oceánico aumenten anualmente unos 1.800 millones de dólares neozelandeses (1.113 millones de dólares estadounidenses o 1.015 millones de euros).
El comercio bilateral ha aumentado constantemente en los últimos años, hasta alcanzar casi 9.100 millones de euros (9.968 millones de dólares) en 2022. Se espera que con el acuerdo este intercambio crezca hasta un 30%, según datos del bloque europeo.
Productos y sectores más afectados en el tratado con Nueva Zelanda
El tratado también eliminará todos los aranceles sobre exportaciones clave de la UE a Nueva Zelanda. Productos como carne porcina, vino y vino espumoso, chocolate, confitería y galletas. Además, abrirá el mercado de servicios de Nueva Zelanda para los sectores financieros, de las telecomunicaciones, del transporte marítimo y de los servicios de reparto.
El pacto también protegerá cerca de 2.000 vinos y bebidas alcohólicas de la Unión como el Prosecco, el vodka polaco, el Rioja, el champán y el Tokaji. Además de 163 de los productos tradicionales más conocidos de la UE, que cuentan con sus respectivas denominaciones de origen: quesos Asiago, Feta, Comté o el manchego.