Uno de los términos más utilizados hoy en día a nivel mundial y principalmente en el área económica es “globalización”. Esta palabra describe la conexión entre varios países que tienen el objetivo de compartir recursos políticos, económicos y sociales. Esto con el fin de aumentar significativamente la oferta de productos y servicios, lo que se traduce en un mejor abastecimiento para los usuarios de los países involucrados. La globalización posibilita que los bienes y servicios se distribuyan entre los diferentes mercados de una forma más eficiente.
¿Qué es la globalización?
La globalización es el proceso en el cual naciones y empresas logran intercambiar productos, servicios e ideas entre sí. Esto se ha llevado a cabo desde mediados del siglo XX gracias a las nuevas geopolíticas y necesidad de los estados de penetrar el panorama internacional. A partir de aquí, se ejecuta una integración en el que se vinculan diversas partes con el fin de obtener beneficios financieros, políticos, etc. Esto ha permitido la creación de organismos multilaterales como FMI, ONU, y muchos más.
Uno de los efectos de la globalización es que, dependiendo de las políticas de cada país, se eliminan aranceles y tributos de importación y exportación. Esto, con el fin de facilitar el proceso para aumentar el volumen de productos en los puertos y aeropuertos. De esta manera, la competencia de los empresarios no es solo local sino internacional, generando así una presión importante para los productores. Otro efecto relevante de la globalización, es que los más beneficiados son los consumidores. Ya que ahora tienen una gran cantidad de servicios a elegir.
Globalización de la economía
La globalización de la economía es una de las patas más importantes del proceso de globalización ya que es el principal motivo de la integración de las diferentes economías mundiales y regionales.
La globalización económica está causada principalmente por los avances tecnológicos y de la información y el desarrollo del comercio internacional, que ahora permiten una relación mucho más próxima entre diferentes países. La globalización ha generado una nueva fuente de ingresos para algunos países y de suministros para otros y ha creado empleos transfronterizos, modificando así aspectos de la cultura y la economía de todos los países.
¿Cuáles son sus características?
La globalización forma parte de una serie de procesos que interactúan entre sí para facilitar el intercambio de recursos. Una de sus características principales es que las sociedades tienen mayor acceso a productos y servicios de todo tipo, lo que representa una mejora en la economía. Además, el turismo también se ve beneficiado, ya que la unión entre naciones facilita el viaje hacia otros destinos. Por otro lado, no podemos olvidar que se potencia el uso de nuevas tecnologías para permitir la compra de productos del extranjero.
La globalización es un paradigma en el que se incentiva el aprendizaje y la innovación. Lo que conlleva a la creación de nuevos programas, cursos y materiales educativos para formar profesionales competitivos que afronten la nueva economía. En líneas generales, las economías de los países participantes se ven muy beneficiadas y se demuestra con los indicadores que se dan a conocer trimestralmente. Por consiguiente, hay que prepararse muy bien para poder atender a un mercado que cada vez más exigente y hambriento de productos y servicios de mayor calidad.
Causas y consecuencias de la globalización
La globalización surge como consecuencia de los cambios en las políticas internacionales de las naciones más poderosas del siglo XX. A raíz de esto, se eliminan muchas barreras físicas y legales que impedían el comercio internacional, creando así acuerdos de gran relevancia para todos. Fue en estos momentos cuando se creó la Unión Europea, una organización que busca la colaboración entre los países del viejo continente. A partir de aquí, se empezaron a distribuir productos y servicios entre las naciones que formaban parte de los acuerdos.
Una de las grandes consecuencias de la globalización fue la innovación del transporte. La gran demanda de productos y servicios generó una mayor demanda de aeronaves, trenes y embarcaciones para distribuir las mercancías. Por eso se desarrollaron sistemas de transporte más eficientes que proporcionaron nuevas oportunidades de empleo y de negocio para las sociedades. No obstante, esto ha complicado la subsistencia del pequeño empresario que no ha tenido las posibilidades de competir con las grandes transnacionales del mundo. Esto ha sido una de las consecuencias más graves de esta nueva realidad.
Ventajas de la globalización
La globalización ofrece una gran cantidad de ventajas que es necesario analizar. Primero que todo, los tratados entre países producen mercados más grandes que permiten el acceso de cualquier gran empresario. En este sentido, con el fin de aumentar la rentabilidad las compañías utilizan la economía de escala para producir a niveles más grandes. A esto hay que sumarle el acceso a plataformas tecnológicas, lo que le da mayor eficiencia a la cadena de valor. En consecuencia, hay mayor circulación de productos y servicios que benefician a los consumidores.
Por otro lado, la globalización permite que haya empleos mejor remunerados debido a los beneficios que obtienen las empresas. No cabe duda que esta estrategia genera crecimiento económico para los países, aunque debe manejarse con cuidado para no afectar al pequeño empresario. La presión financiera hace que sea más difícil para un emprendedor posicionar sus productos y servicios en el mercado. Así es que los gobiernos deben velar porque estas medidas no sean tan amplias que perjudiquen su producción nacional.
¿Qué riesgos arrastra?
Así como la globalización trae ventajas, también tiene riesgos que es necesario evaluar. El primero de ellos es que las marcas locales tendrán una competencia ruda, lo que las pone en desventaja frente a las empresas desarrolladas. En consecuencia, tienen que mejorar la calidad de sus servicios, algo que no se produce de un día para otro. Además, los consumidores se vuelven más exigentes debido a la penetración del internet, que les permite estar más informados que antes. Tampoco podemos olvidar que la rentabilidad por producto será menor si hay mucha competencia del rubro en un momento en específico.
Otro de los riesgos más importantes es la desigualdad que se produce entre las naciones. No todas las personas logran acceder a tecnología y educación de calidad que les permita ser competitivos en esta economía. Lo que puede generar una brecha entre ricos y pobres. Esta es una de las críticas más frecuentes que hacen algunos autores a este nuevo paradigma. En tal sentido, es necesario crear políticas intermedias que faciliten la distribución de productos sin que se desproteja al menos favorecido.
Ejemplos de globalización
Con la llegada del internet es muy sencillo dar ejemplos de globalización. Las plataformas de streaming nos han permitido consumir diversos contenidos audiovisuales desde cualquier parte del mundo. Incluso, podemos repetirlo y verlos a la hora que nos apetezca. Además, está la industria de los hidrocarburos, en la que muchos países pueden acceder al mercado sin tener yacimientos petroleros en su territorio. Esto es uno de los grandes beneficios que nos da la globalización, ya que todos tienen el acceso a cualquier producto y servicio.
Por otro lado, tenemos el caso de la alimentación. Hoy en día en los anaqueles locales existen bienes producidos en lugares muy remotos gracias a la globalización. Esto ha sido posible por la tecnología, que ha facilitado la producción y extracción de materia prima, abaratando así los costos. Para finalizar, no se pueden ocultar todos los beneficios que da la globalización. Pero debe ser manejada de forma adecuada para que pueda ser aprovechada por igual. Solamente así se generará la riqueza que todos deseamos.