Fabra apela a la razón y no al sentimiento de "cabreo" para solicitar el voto al ciudadano
Aunque todavía no ha sido oficialmente confirmado como candidato a la presidencia de la Generalitat, Alberto Fabra desplegó hoy, en los desayunos convocados por ForumEuropa lo que previsiblemente será el argumentario de campaña: personas, familia, esfuerzo y recuperación económica. Para el presidente de la Generalitat, «en las urnas, los valencianos tenemos que decir que no podemos dar un paso atrás», si bien reconoce que los ciudadanos han tenido motivos «de cabreo», pese a lo cuál apela a la razón frente a los sentimientos para reivindicar el voto para el Partido Popular.
Fabra acusa a la oposición y a las recientes formaciones políticas de intentar aprovechar ese malestar social en beneficio propio, porque «no se puede jugar con el esfuerzo de las familias». Calificó 2015 como año crucial con la convocatoria, al menos hasta el momento, de cinco procesos electorales en los que «vamos a hablar en las urnas para decir que no podemos dar pasos atrás, que no queremos que nadie nos lleve de nuevo a la incertidumbre económica y política, a la inestabilidad y la desconfianza».
Para Alberto Fabra, son unas elecciones determinantes «donde marcaremos no sólo el futuro de la próxima legislatura, sino de las próximas generaciones», para añadir que el Partido Popular es el único con un discurso uniforme en toda España, mientras que la oposición sólo tiene como objetivo «terminar con el Partido Popular».
En los atestados salones del Hotel Astoria, Fabra defendió su gestión como la de la recuperación económica y la transparencia. Recordó que en 2014 se acabó con 80.000 parados menos y 55.o00 afiliados más a la Seguridad Social, a lo que añadió que en 2015 se crearán 100.000 puestos de trabajo, de forma que en 2016 se hayan creado 250.000 nuevos empleos.
En este sentido, anunció la presentación de un plan ante las Corts para destinar 800 millones de euros en los próximos seis años a la generación de empleo.
La gestión económica también es motivo de orgullo para Fabra. Los acuerdos con el Ministerio de Hacienda -como se ha repetido en los últimos días- suponen un ahorro de 750 millones para las arcas de la Generalitat Valenciana. Tras hablar de los logros en políticas sociales, advirtió del peligro que supone el mantenimiento del sistema educativo y la sanidad pública si ganaran las elecciones otras opciones políticas, a la que calificó de extremistas y aventureras. Agregó que son formaciones de «proyectos de demolición» y de estar desconectados de la realidad valenciana.
En este sentido auguró el peligro de pérdida de atención sanitaria a un millón de valencianos o de plazas en centros concertados a casi medio millón de escolares y la consiguiente pérdida de empleo de 25.000 profesores. Por contra, aseguró que el Partido Popular es el que defiende a las familias, a las personas; el partido de la transparencia y la buena gestión; el compromiso y la responsabilidad.
Durante su discurso no pronunció la palabra corrupción, aunque admitió que «hemos cometido errores, de los que hemos aprendido y hemos salido más fuertes y seguros» y tildó de «ocurrencias» las propuestas de la oposición. Frente a estas «ocurrencias» Fabra enumeró los compromisos cumplidos: reducción de la administración pública; recuperación económica, mejora de la financiación, ahorro de 750 millones en pago de intereses y deuda; o pasar de una caída del PIB de casi el 3% a una mejora del 1,4%, lo que supone una recuperación de 4,3 puntos.
El presidente de la Generalitat advirtió de que la oposición pretende aumentar impuestos, mientras que su partido aboga por reducirlos para que «los valencianos recuperen su poder adquisitivo e impulsar las economías familiares.»