N. Calviño: «El BEI debe liderar el refuerzo del mercado de capitales europeo»
«Una de las prioridades del BEI pasa por liderar el refuerzo del mercado de capitales europeo», ha manifestado Nadia Calviño, presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), durante la celebración del I Foro Económico y Social del Mediterráneo, un evento que ha calificado como «oportuno y justo en el momento en que estamos iniciando un nuevo mandato de la Unión Europea».
En esta misma línea, ha reconocido que el mercado de capitales está muy fragmentado y que la nueva Unión Europea que ha salido de las urnas «debe centrarse en ampliar la capacidad de financiación de las empresas europeas».
Calviño ha comenzado su discurso explicando que uno de cada cuatro ciudadanos europeos vive en las ciudades. Por ello, estas son fundamentales de cara al futuro y «desde el BEI consideramos que es preciso invertir en ellas, para tener ciudades más respirables y conectadas y, además son clave para definir ese futuro verde y digital».
Nadia Calviño ha expuesto en su discurso el plan estratégico de la entidad que define ocho prioridades de cara al futuro y que ha presentado al Ecofin, una institución que está integrada por los ministros de Economía y Hacienda de todos los Estados miembros y fue la que decidió, a finales de diciembre, nombrarla presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), cargo que ostenta desde el pasado 1 de enero.
España, el país de las renovables
La primera de las prioridades pasa por consolidar el papel del BEI como el banco del clima. «En estos últimos años hemos invertido más de la mitad de los recursos, cada año, en la acción climática y eso explica el papel que estamos jugando en toda Europa y en el mundo como banco de financiación de las infraestructuras claves para hacer frente al cambio climático».
En concreto, ha matizado, «el BEI está ayudando a España a posicionarse como el país de las renovables». De hecho, ha concretado, que estos días están anunciando inversiones en redes eléctricas, eficiencia energética, nuevos bioccombustibles…
En esta misma línea, no se ha olvidado de mencionar «el papel fundamental que juega el agua». «El desarrollo de nuestra sociedad está vinculado a que hagamos un uso eficiente de los recursos hídricos».
La segunda prioridad del BEI está relacionada con la aceleración del despliegue de las nuevas tecnologías y la digitalización. Ha puesto como ejemplo, proyectos tan emblemáticos como el Medusa que suministrará fibra óptica submarina conectando a cinco países europeos -España, Portugal, Francia y Chipre- con Argelia, Marruecos y Túnez.
Reforzar la industria europea de seguridad y defensa es el tercer objetivo que se ha marcado el BEI. Ha destacado que han actualizado su política de inversiones «para acelerar los proyectos que contribuyen a la paz y la seguridad de nuestras fronteras».
Unir talento y oportunidad
La política de cohesión moderna es el cuarto pilar del BEI «y está en el corazón de la UE». Calviño lo ha calificado de «inversión inteligente porque el talento está en diversas regiones pero las oportunidades no. Con lo cual, tenemos que llevar las oportunidades allí dónde hay proyectos empresariales».
En quinta posición está el apoyo a la agricultura y la tecnología. «En España, a través de nuestras líneas de crédito, hemos movilizado 4.ooo millones de euros para apoyar a unas 40.000 medianas y pequeñas empresas», ha señalado.
La sexta prioridad son las infraestructuras sociales. Ha recordado que desde el BEI están invirtiendo en residencias de mayores, en educación y en viviendas asequibles. «En los últimos cinco años, la entidad europea ha destinado 450 millones de euros a viviendas de protección oficial en España». Ha matizado que este no es solo un reto de España «sino que es compartido por el resto de los países europeos».
Calviño ha aprovechado la ocasión para anunciar que el próximo 18 de julio se va a producir una reunión en la UE para poner una solución a este reto con nuevas tecnologías de construcción, la rehabilitación de viviendas… para que los jóvenes puedan tener acceder a la vivienda».
En cuanto a la séptima prioridad, Calviño ha informado que un 10% de las inversiones del BEI se producen fuera de la UE, lo que supone 8.000 millones de euros al año, de los 88.000 millones de euros que invirtieron en 2023. «Vamos a enfocarnos en el apoyo a Ucrania, el proceso de la ampliación de la Unión Europea, el apoyo a todos nuestros vecinos del Este y la cuenca mediterránea y las estrategias prioritarias para Europa y el resto del mundo», ha subrayado.
Reforzar el mercado de capitales
El último objetivo, pasa porque «el BEI sea el líder para reforzar el mercado europeo de capitales». A su juicio hay que garantizar que las empresas europeas no necesitan para crecer financiarse fuera de Europa. «Por eso, -ha aclarado- vamos a trabajar con las autoridades nacionales y las instituciones europeas en el ámbito del escalado de las start-ups».
Ha recalcado también que van a tratar de aunar fuerzas en el ámbito de los bonos verdes, los bonos digitales y «reflexionar sobre nuevos instrumentos de financiación en el ámbito de la vivienda».
Esto plan estratégico, ha reconocido, «nos permite ver el potencial que tiene el BEI con fortaleza financiera, con capacidad para apalancar presupuestos públicos nacionales y europeos, movilizar la inversión privada y, sobre todo, la excelencia técnica de los equipos del BEI que son un referente para diseñar proyectos en los ámbitos energético, agua, salud…».
En definitiva, «tenemos que ser un referente para seguir apoyando nuestro presente pero sobre todo nuestro futuro».
Ha concluido subrayando que «los acontecimientos a los que nos hemos enfrentado estos últimos años dejan claro que la unión hace la fuerza, juntos somos más fuertes como se hizo durante la pandemia y ante la guerra de Ucrania». Ha recordado también que «Europa sigue teniendo una voz fuerte en este nuevo orden mundial que estamos viviendo».
Nuevo orden internacional
En el diálogo que ha mantenido Nadia Calviño con Martí Saballs, director de información económica de Prensa Ibérica ha reconocido que están surgiendo nuevas voces que quieren tener una mayor influencia en este orden internacional y ha reconocido la tensión existente entre China y Estados Unidos que «está influyendo en un comercio libre».
Sobre el mercado de capitales, Calviño ha reconocido que está fragmentado. Por eso, «desde el BEI debemos ayudar a crear y consolidar los mercados de capitales europeos». En este sentido, ha declarado que «esta nueva Unión Europea debe centrarse en ampliar la capacidad de financiación de las empresas europeas». En concreto, ha manifestado que «debemos tener capacidad de apalancarnos para infraestructuras, start-ups…, porque el BEI apalanca para tener una mayor capacidad de juego en Europa».
Ha subrayado también que «tenemos una capacidad de inversión de 88.000 millones de euros y el Mediterráneo es una de nuestras zonas de actuación preferente».
Calviño ha expresado también que se ha marcado también como prioridad «reducir el tiempo desde que nos llega un proyecto hasta que se concede la financiación. Por ahora, ya hemos reducido de 700 a 70 el número de páginas de los proyectos».
Elecciones en Francia, Reino Unido, Estados Unidos…
Preguntada sobre cómo pueden influir las elecciones en Francia en el Reino Unido, Estados Unidos… ha explicado que «el tablero internacional está abierto y cambiará de aquí a final de año».
Sobre los movimientos populistas que recorren Europa, ha señalado que «responden a un sentimiento de los ciudadanos que debemos escuchar con atención«.
«Desde Europa debemos mandarles a los ciudadanos un mensaje de prosperidad y un mensaje de liderazgo». Por ello, Nadia Calviño ha puesto en valor los proyectos en las ciudad ya que «son fundamentales para responder a sus necesidades».
Ha matizado que «el entorno geopolítico es complicado y como europeos debemos estar unidos y llegar a grandes consensos nos hará más fuertes en los próximos años».
Mayores riesgos de aquí a final de año
Calviño ha definido la situación actual como «inestable desde el punto de vista político por eso es importante la estabilidad financiera» y ha mostrado también una mayor preocupación por Putin que por Trump.
En concreto, ha reconocido que sus mayores preocupaciones son la seguridad, la estabilidad financiera y evitar la gran crisis financiera como la que ocurrió en 2008. Ha defendido también que «el apoyo a Ucrania es importante para conservar la estabilidad política, económica y financiera».