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Redacción E3
En una sesión en la que los inversores apostaron claramente por incrementar sus posiciones de riesgo, los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses cerraron la semana con fuertes alzas. Detrás de este brusco cambio experimentado en los últimos días por el sentimiento de los mercados, que está por ver que se consolide, está la convicción de los inversores de que los bancos centrales han dado por finalizado su proceso de subidas de tipos. En este sentido, ayer el Banco de Inglaterra (BoE) y el Banco Central de Noruega mantuvieron sus tasas de interés sin cambios, en línea con lo hecho por el BCE la semana pasada y por la Reserva Federal (Fed) el pasado miércoles.
No obstante, y siendo esta hipótesis la más razonable, a no ser que la inflación vuelva a repuntar impulsada por los precios de la energía, de extenderse el conflicto de Gaza por la región, seguimos apostando porque las tasas de interés oficiales se mantendrán altas durante, al menos, gran parte del 2024, hasta que la inflación muestre claros indicios de que se dirige hacia el objetivo del 2%.
No creemos que los bancos centrales, con antecedentes como los de los años 70, vayan a flexibilizar su política monetaria antes de estar convencidos de que han doblegado definitivamente al «monstruo» de la inflación.
De momento, todo parece indicar que la «apuesta» de los inversores es diferente, dando por hecho que, a partir de ahora, los tipos sólo pueden bajar. Ello ha provocado un fuerte repunte de los precios de los bonos, activos que llevaban tres meses siendo duramente castigados, y una significativa caída de sus rendimientos, liderada por los de los bonos del Tesoro estadounidense. Este movimiento se ha sustentado fundamentalmente en tres razonamientos por parte de los inversores:
Para los expertos, tanto en el fuerte rebote experimentado por los bonos como por las acciones, hay un importante componente técnico, al estar todos estos activos muy sobrevendidos tras tres meses de fuertes recortes, tema éste del que llevamos advirtiendo hace tiempo.
Todo ello levanta dudas acerca de que estemos ante un cambio de tendencia de las bolsas, algo que, de ser así, esperaríamos a que se confirme en las próximas semanas antes de modificar nuestra estrategia de inversión y apostar por incrementar nuestra exposición a activos de mayor riesgo. A corto plazo este movimiento alcista en los mercados de bonos y de acciones deberá superar una importante prueba, ya que durante la tarde del viernes se publican en EEUU los datos de empleo no agrícola del mes de octubre.
Tampoco esperan los analistas que unos datos muy por debajo de lo esperado vayan a ser bien recibidos, al menos por los mercados de acciones, ya que ello volvería a centrar el debate en una potencial entrada en recesión de la economía estadounidense. Es por ello que lo mejor de cara a la reacción de los mercados es que las cifras que publique el viernes el Departamento de Trabajo de EEUU estén en línea o sean ligeramente inferiores a lo estimado por el consenso de analistas.
De ser así, los analistas de Link prevén que la tendencia de cierre semanal de los mercados será al alza. Por el contrario, unas cifras muy por encima de lo esperado, provocarán recortes tanto en los mercados de bonos como en los de acciones, al aumentar la probabilidad de que la Fed se vea obligada a subir nuevamente las tasas de interés oficiales.
Para empezar la sesión del viernes, se espera que las bolsas europeas abran al alza, manteniendo el buen tono del jueves y obviando la debilidad que muestran esta madrugada los futuros de los principales índices bursátiles de Wall Street.
Estos índices están siendo lastrados por el negativo comportamiento en operaciones realizadas tras el cierre del mercado de las acciones de Apple (AAPL-US), ya que sus cifras trimestrales no han sido bien recibidas por los inversores, al mostrar las ventas en China una mayor debilidad de la esperada.
Posteriormente, y como ya hemos señalado, serán las cifras de empleo estadounidenses de octubre las que determinen cómo cierran la última sesión de la semana los mercados de valores occidentales.
Redacción E3