¿Es bueno o malo que las empresas tengan beneficios? ¿Cuál es la misión de una empresa? Son algunas de las preguntas que se ha hecho el propio Juan Roig en la rueda de prensa de presentación de resultados de Mercadona y ha compartido con los medios. “Tenemos muy interiorizado que la misión de Mercadona es satisfacer equilibradamente a los cinco componentes (clientes, trabajadores, proveedores, capital y sociedad)”. Respeto a los beneficios hace un símil “para mí comer es indispensable, ahora si tu principal propósito en esta vida es comer más y más, eso no es saludable. Lo mismo ocurre con el beneficio: es indispensable, pero no ganar dinero por encima de todo; hay que hacerlo compatible y compartido con los 5 componentes”.
Y ha lanzado una advertencia «si no hay beneficios las empresas no pueden mantenerse: no pueden reinvertir, no pueden ampliarse, no pueden actualizar sus activos… cuántos más beneficios tengan mejor funciona la sociedad: más impuestos pagan, mejores salarios abonan y más dividendos podrán repartir a sus los accionistas, que han puesto su dinero para obtener una rentabilidad”.
«Los empresarios, directivos y trabajadores somos los que generamos riqueza en el país. El bienestar de una sociedad dependerá del número de empresarios –honrados por supuesto– que exista, cuántos más empresarios tenga un país, mayor nivel de vida existirá. Si los impuestos luego están bien gestionados genera riqueza para todos, sino genera lío».
“El agua moja, me guste o no, moja, y lo hace en este siglo, lo hacía en el XVIII y mojará en el XXIX. Esto lo digo por los precios, si hay más oferta que demanda, los precios bajan y si hay más demanda que oferta los precios suben, queramos o no queramos, porque lo que sucede en el resto del mundo nos afecta”.
«¿Qué tiene que ver el gas con los tomates?» Ha sido otra de las frases de Roig, al reconocer que el precio del tomate ha subido un 50% de 1,39 euros a 2,05 euros. Ha explicado que con el precio del gas por las nubes, no era rentable producir tomate en Europa (utilizaban el gas para calentar invernaderos) y los productores buscaron otras alternativas como venir a la huerta de Europa a comprar tomates, “con este aumento de la demanda y de los precios teníamos dos opciones, no comprar tomate y dejar desabastecido al cliente o venderlos al precio al que están, 2,05”.
“No depende de una decisión personal el precio”, ha recalcado al tiempo que ha puesto como ejemplo del incremento del precio de la carne de cerdo que “somos el segundo país que más cerdo exporta a China, y su demanda ha crecido mucho en los últimos 8 años”.
“Si no subes los precios te quedas sin producto”. Recuerda Roig que los gastos de Mercadona subieron en 2022, 500 millones por el incremento del IPC en los salarios, el transporte (+17%), los alquileres y las materias primas; lo que ocasionó según el presidente de Mercadona “una tensión con los proveedores como nunca en la vida”. “Nos hemos peleado con ellos muchísimo por las subidas de precios”. De hecho, ha recocido una crisis de abastecimiento de leche por tratar de no subir los precios, “un desabastecimiento de un mes y medio que fue la leche, nunca mejor dicho… y al final tuvimos que subir los precios, porque si no subes los precios te quedas sin producto”. Admite el empresario que, en la categoría de verduras, en las tres últimas semanas hay una falta de servicio de entre el 7 y 4% de los productos.
“Lo que nos gusta al sector es fastidiar a la competencia y vender más barato”. «Pero tienen razón una clienta cuando me dice que hemos pasado de SPB a SPA, siempre precios altos». «Hemos subido una burrada los precios. Pero si no los hubiéramos subido, el desastre que hubiéramos generado en la cadena de producción hubiera sido impresionante, tenemos que hacer una cadena sostenible para todos los eslabones».
«Toparíamos precios si el proveedor nos topara precios a nosotros, pero no sabemos lo que va a pasar. No sabemos qué puede ocurrir mañana. Solo sabemos que vamos a luchar por bajar los precios. No es posible toparlos, porque se tendrían que compensar subiendo otros productos».
“En Mercadona tenemos la necesidad de huevos cubierta”, ha asegurado el presidente, que no obstante ha destacado que la demanda de este artículo de primera necesidad ha crecido más de un 10%. “Si se produce un aumento de la demanda de un 30% tendremos escasez”.
“La creatividad nace de la angustia”. Según Roig cuanto más angustiado estás, más preocupado por la inflación… “más nos hemos calentado la cabeza para tomar más medidas”. “La gran suerte son nuestros 99.000 trabajadores que se han esforzado mental y físicamente muchísimo”.
“Creemos que nuestros clientes entre la posibilidad de elegir o la de acertar, eligen acertar. Cuando escoges un dentista no quieres elegir, quieres acertar, por eso en Mercadona hemos apostado por el totaler radical, el que más sabe del producto que vende, con un surtido eficaz, que ha llevado a mejorar la calidad de 400 productos y eliminar de los lineales –por duplicidades o por falta de rentabilidad–, 800 productos, lo que nos ha ocasionado muchas críticas” , reconoce.
“El que quiera ahorrar que no haga la compra online y vaya al supermercado”. Asegura que es necesario cobrar 7,21 euros por cada pedido, y advierte que si la reglamentación de los municipios se endurece en los repartos, “tendremos que cobrar más”. Explica que la rentabilidad de cada pedido está entre 2,5-3 euros y que el 2% de la facturación de Mercadona proviene de la compra online, que ya ha conseguido ser rentable.
“Hemos creado una herramienta, DPP, que nos ayuda a saber los costes de cada una de las partes del proceso, lo que nos ha ayudado a mejorarlos, han tratado de comprárnosla, pero de momento es un desarrollo interno, para nosotros”. “Además, hemos pedido a nuestros trabajadores que sean más guerreros y que no digan qué cosas estamos haciendo mal en Mercadona o dónde estamos tirando el dinero, esto nos ha ayudado muchísimo”.
“El conocimiento y el dinero dan la felicidad… si los compartes”. Los beneficios de Mercadona para el capital han ascendido a 718 millones, de los cuales el 80% (557 millones) se reinvertirán en la compañía, y el resto, 161 millones, se ha repartido entre los accionistas. Haciendo un ejercicio de “transparencia total”, Juan Roig ha detallado que sus dividendos han ascendido a 88 millones y que su suelo como presidente de Mercadona ha supuesto 11 millones de euros más. Reconociendo que es una «tierra en la que se paga más» (cotiza al 54%).
Pero el empresario entiende que la mejor forma de contribuir a la sociedad es devolver a la sociedad parte de lo recibido; por ello a título personal, él y su mujer, Hortensia Herrero, han destinado en 2022 80 millones a diferentes iniciativas en el ámbito del emprendimiento, el arte o la cultura.
«Si suben los impuestos pues los pagaremos (el tipo efectivo del Impuesto de sociedades que ya paga Mercadona es de un 22,6%), pero lo único que pido es que los gestionen bien», ha subrayado.
Además de lanzar otro mensaje al Gobierno, “favorezcamos al empresario al máximo, pero sin subvenciones”.
Preguntado sobre la decisión de Ferrovial, Roig ha concretado: «Mercadona está en Valencia y va a estar muchos años. Pero hay unas reglas de juego y desde que estamos en la UE hay libertad de circulación para trabajadores, mercancías y las empresas. No tengo conocimientos de lo que es hacer obras como las que hace Ferrovial y por tanto no puedo juzgarlo. Solo sé que ejercen un derecho».
Roig también se ha pronunciado sobre la subida de las cotizaciones para mantener las pensiones, para decir que todo lo que sube, al final se traslada a los precios de venta, como ha ocurrido con el impuesto al plástico y la regulación sobre bienestar animal, que ha repercutido un céntimo en el precio de cada huevo.