‘Salud’ y ‘Belleza’ son dos conceptos que permanecen ligados en el corazón de las modernas instalaciones de la compañía Sesderma en Puçol (Valencia). Empresario de profesión, pero médico por vocación, el doctor Gabriel Serrano ha logrado en los más de 30 años que su compañía lleva en pie acercar sus productos dermocosméticos a más de 80 mercados diferentes. Siempre, eso sí, llevando la investigación y la innovación como bandera.
«Mi vocación no es empresarial, sino dermatológica». Aunque es uno de los empresarios del sector cosmético más relevantes de España, Gabriel Serrano, fundador de Sesderma, prefiere el cargo de ‘doctor’ antes que el de ‘presidente’. Su planta de fabricación se sitúa en la localidad valenciana de Puçol. Unas instalaciones punteras inauguradas en 2018, dotadas de casi 20.000 m2 y que supusieron una inversión de más de 18 millones de euros.
Más de 30 años después de la apertura de la compañía, el doctor Serrano nos cuenta las claves de un sector en el que la innovación es fundamental.
– Eres médico y empresario, dos profesiones con muchas y muy marcadas diferencias, ¿cómo conjugas estas dos facetas de tu vida?
Mi vocación como médico me llegó muy temprano por tradición familiar, ya que tanto mi padre como mi abuelo estaban formados en este campo. La faceta de empresario la desarrollé más tarde, después de estudiar Medicina con la especialización en Dermatología, y trabajar en el Hospital General Universitario de València como médico residente y ser jefe clínico del Servicio de Dermatología durante más de diez años.
Mi afán por escuchar a las personas y sus problemas relacionados con la piel me llevó a crear fórmulas magistrales y abrir mi primera clínica dermatológica en 1978, donde empecé a prescribir mis propios productos y tratamientos. Posteriormente, en 1989, decidí fundar Sesderma.
– Sesderma lleva en pie más de 30 años.¿Qué hitos destacarías?
El principal es que hemos pasado de ser una empresa familiar a una gran multinacional familiar con presencia en más de 80 mercados y en pleno crecimiento. Pero, hitos, en estos 30 años hay muchísimos, son incontables.
Por ejemplo, ser pioneros en la aplicación de la nanotecnología en la dermocosmética, la internacionalización desde los inicios, la apertura de nuestra delegación en China, estrenar una de las instalaciones más modernas del mundo o crear la Fundación Sesderma Bali…
– ¿Cómo ha evolucionado la dermatología cosmética en estos años?
La dermatología ha tenido una evolución fulgurante. Hace 30 años, nuestros diagnósticos eran clínicos y, luego, se han visto apoyados por una serie de técnicas de todo tipo. Unas analíticas de tipo visual con máquinas que permiten valorar un simple lunar, por ejemplo. Es la técnica dermatoscopia, que nos permite ver detalles sin llegar a ser invasivos. De ahí, han aparecido también ecógrafos para ver la piel y una serie de técnicas inmunológicas para hacer diagnósticos.
Todo eso se complementa con la aparatología. A lo largo de los años se ha ido incrementando en comparación al arsenal terapéutico que teníamos hace 40 años, que era muy limitado.
De hecho, empleábamos muchos colorantes en aquella época, que hoy apenas se utilizan. Después llegaron los corticoides, los antiinflamatorios y medicamentos que han sido muy útiles.
Hace 30 años no había productos para la piel. Ahora utilizamos cosméticos con PH, unos activos y unas fragancias seleccionadas para que no dañen la piel y que sean realmente eficaces. Siempre hay cosas por hacer. La medicina evoluciona todos los días.
– ¿En qué estáis innovando vosotros actualmente?
Hemos creado en la clínica una Unidad de Ginecoestética Regenerativa y Funcional. Una nueva especialidad médica que surge para ayudar a las mujeres, en cualquier etapa de su vida, a tener una buena salud vaginal y sexual; así como a tratar las patologías y alteraciones funcionales o estéticas que afectan a esta zona. Cada vez son más las mujeres que han roto el tabú y acuden a la consulta médica para tratar estas cuestiones.
En esta profesión, los médicos somos absolutamente responsables de todo lo que hacemos y nos preocupan muchísimo las posibles incidencias. Por eso, hay que estudiar todos los días. Y, de esa forma, acabamos ganándonos la confianza del paciente. Cuando hablamos de recetar un tratamiento, lo primero es la confianza del paciente. Sin confianza no vas a ningún médico.
Nanotecnología abre caminos
– ¿Qué tendencias son las que más se observan en estos momentos?
Las tendencias actuales van en la línea de productos que sean fáciles de aplicar. Por ejemplo, los sérums, que además tienen un componente, el ácido hialurónico, que es muy popular. O productos como la niacinamida, el retinol… Por otro lado, se está investigando mucho en el campo de la nanotecnología, la cosmética del futuro, trabajando con factores como el ADN.
La nanotecnología nos ha permitido el estudio de las micropartículas. Sin ir más lejos, piensa en las células madre. La cosmética es trascendental porque repercute directamente en la salud.
– Respecto a la nanotecnología, ¿qué innovaciones estáis desarrollando en estos momentos?
Hemos terminado de ampliar nuestra gama C-VIT con un producto revolucionario: el C-VIT 5 vitaminas. Es el primero y único que concentra todo el poder antioxidante de la vitamina C en una misma fórmula, con lo que se logra potenciar al máximo la luminosidad del rostro, al tiempo que se previenen los primeros signos de la edad.
Salud y belleza
– Los productos de Sesderma se comercializan en más de 80 países. ¿Varía mucho el tipo de producto y las necesidades de los clientes?
En Laboratorios Sesderma contamos con una extensa gama de productos adaptados para todo tipo de pieles.
La realidad es que nuestra piel se enfrenta a diferentes retos con cada cambio de zona geográfica. En zonas cálidas, lo que más debe preocuparnos son los daños solares, por lo que el uso de fotoprotección solar es fundamental. Junto con productos que controlen el exceso de sebo y brillos en la piel.
En zonas frías, el clima y el aire seco de la calefacción son nuestros enemigos, por lo que se recomienda el uso de productos hidratantes y antiarrugas.
– ¿Por qué es importante ligar los conceptos de ‘salud’ y ‘belleza’?
En el caso de la piel hay que afrontar su cuidado de manera holística como un todo que aúna salud y belleza, porque no olvidemos que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, nos envuelve y nos protege.
En lo que se refiere a la salud de la piel, el aumento de la temperatura, la radiación solar y la disminución de la humedad favorecerá en un futuro cercano el envejecimiento o el cáncer de piel. Por tanto, hay que volcarse en su cuidado de manera preventiva.
Y, en lo que a belleza se refiere, cada vez somos más longevos y queremos tener más calidad de vida, pero también un buen aspecto.
– En verano la piel se expone mucho al sol. ¿Existe una mayor concienciación que hace algunos años?
Aún queda trabajo y es necesario hacer hincapié en concienciar a la población. No obstante, la sociedad es cada vez más exigente y busca productos cada vez más completos que combinen protección solar con tratamientos dirigidos a abordar diferentes afecciones.
– ¿Existe relación entre la calidad del producto y su coste de venta?
Respecto a si funciona mejor una crema cara o una barata, depende: lo que hay que analizar son los principios activos que contiene la formulación. Y, por supuesto, la tecnología y la investigación que hay detrás.
Obviamente cuanto mayor es la inversión en I+D y el uso de activos el coste del producto se ve incrementado, por lo que hay que poner en valor la eficacia a largo plazo.
Formación
– Sesderma colabora con másteres universitarios y con sociedades de Medicina y Cirugía Estética, Dermatología y Venereología. ¿Por qué esta apuesta por la formación?
Siempre lo he considerado como algo fundamental, es parte de mi legado profesional. Los médicos nos volcamos en formar a las generaciones futuras porque ese conocimiento no puede quedar cautivo, tiene que compartirse para cuidar la salud de la población y progresar. He dedicado buena parte de mi vida y de mi carrera a este menester y estoy orgulloso de llamar ahora colegas a muchos de mis exalumnos.
Sin ir más lejos, ahora he decidido abanderar la formación en ginecoestética funcional y reparadora, aún desconocida para muchos, y traer a nuestro país a expertos internacionales para formar, junto a mí, a otros colegas.
Clínica Dr. Serrano
– ¿La clínica que regentas en València es una inspiración para la puesta en marcha de nuevos productos ante nuevas patologías de la piel?
Por supuesto, me permite continuar con el pulso del paciente, escuchando de manera directa sus necesidades y desarrollar formulaciones específicas y tratamientos para ayudarles.
En estos 45 años que lleva en pie la clínica se ha transformado. De la atención exclusiva en dermatología ha integrado otras especialidades como la medicina estética, la cirugía plástica, la podología y la odontología.
– ¿Cómo definirías el modelo en el que se basa la clínica?
Es un modelo que busca la excelencia en el trato y en la atención médica, con soluciones innovadoras y eficaces y en constante evolución. Ejemplo de ello es la inclusión de tratamientos de ginecoestética o de cuidado capilar.
– ¿Vais a exportar el modelo Dr. Serrano por otras ciudades?
Acabamos de abrir nuestra primera tienda en Madrid, en la calle Velázquez, y ya estamos trabajando en la próxima apertura en uno de los centros comerciales más destacados de Dubái.
– ¿Cuáles son los canales de distribución de Sesderma?
El canal de distribución es la farmacia y la parafarmacia. Sin embargo, los prescriptores de nuestros productos, además de los farmacéuticos, son los dermatólogos, los médicos estéticos o los ginecólogos, entre otros. Además, fuimos una de las marcas pioneras en estar en la parafarmacia de El Corte Inglés hace ya más de 20 años.
– ¿Te han propuesto alguna vez hacer marca blanca?
Sí. De hecho, contamos con una división específica especializada llamada Dermopartners, que fabrica y desarrolla productos dermocosméticos y de uso profesional para terceros.
De España a Panamá
Laboratorio Sesderma establece un centro de operaciones en Panamá para potenciar sus productos de dermatología y dermoestética que permitirá a la firma impulsar su presencia en América del Sur, Norteamérica y Caribe. A esta iniciativa se suma la puesta en marcha de una nueva clínica en Ciudad de Panamá, que se suma a la de Madrid y Valencia.
Sesderma Panamá, el mayor hub de la compañía en el continente americano, «está llamada a convertirse en un centro de referencia y en un eje estratégico para seguir impulsando la expansión del grupo por Latinoamérica. Se trata de un importante paso adelante, tanto por lo que significa para la compañía como por el propio impacto que la iniciativa tiene para el sector en el país, ya que se crearán puestos de trabajo de alto perfil”, explica Dr. Gabriel Serrano.
En la actualidad, Sesderma está presencia en 80 países y 23 filiales internacionales, que ya suponen el 80 % de su facturación. Una proyección global que comenzó en sus primeros años de vida con la inauguración de su sede en EE. UU. (1992), que se trasladó de Atlanta a Miami en 2010.
Un año antes daba el salto a Polonia y establecía sus primeras oficinas fuera de España.
Por su parte, la nueva clínica contará con más de 200 m2 en pleno centro urbano de la capital del país, dedicados a la más avanzada tecnología médica, tratamientos y productos específicos para el cuidado de la piel, incluyendo el uso de la nanotecnología.