Desde enero del año pasado, con los efectos de la pandemia vigentes, el sector manufacturero no se resentía en nuestro país. Pues bien, durante el mes de julio la actividad de la industria española se contrajo por primera vez en año y medio.
Así lo refleja el último PMI manufacturero -facilitado por S&P Global– correspondiente al séptimo mes del ejercicio. De este modo, el principal indicador adelantado del sector industrial registró 48,7 puntos. Es decir, un hundimiento de la industria del 7,41%, en relación con los 52,1 puntos del mes de junio.
No obstante, el empeoramiento de las expectativas en el sector industrial no se ha limitado a nuestras fronteras. Cómo veremos hoy en Economía 3, el pesimismo se ha generalizado dentro de las principales economías del mundo. El imparable crecimiento en los precios y una creciente incertidumbre económica han incrementado el temor a una recesión a nivel global.
Antes de nada, ¿qué es el PMI manufacturero?
Los índices PMI («Purchasing Manager´s Index») miden el nivel de actividad del sector privado de una determinada actividad. Son indicadores adelantados. Es decir, que predicen el comportamiento del ciclo económico. Debido a esta característica su disponibilidad se anticipa a la de otros índices oficiales por lo que su utilidad es muy relevante.
Por tanto, el PMI manufacturero es un indicador elaborado para estimar una visión general sobre la actividad industrial en un determinado país. Debido a la transcendencia de su contenido el PMI manufacturero es considerado uno de los principales indicadores económicos de la industria que existen.
Los informes PMI se elaboran mediante encuestas e informes que se realizan mensualmente a las compañías del sector privado. En el caso del manufacturero, el PMI sondea a los gestores de compra, que son los encargados de comprar las materias primas necesarias para que una empresa manufacturera pueda llevar a cabo su producción.
Su interpretación es muy sencilla. Cuando el PMI es menor de 50 puntos se entiende que la actividad industrial decrece y, por tanto, se encuentra en recesión. Por el contrario, un valor del PMI manufacturero que supere los 50 puntos refleja una situación de expansión para el sector de industria.
Muy preocupante la situación de la industria en Europa
La estrepitosa caída (-7,41%, respecto al mes de junio) del PMI manufacturo español es el reflejo perfecto de la situación europea. Así, ninguna de las cuatro principales economías del viejo continente logró el aprobado en esta última entrega del indicador. Francia (49,5), Alemania (49,3), España (48,7) e Italia (48,5) constataron la recesión industrial en Europa.
De este modo, como no podría ser de otra forma debido al peso de las ‘Big Four’, el PMI manufacturero de la Zona Euro se estableció en 49,8 puntos en el mes de julio. Un dato un 4,41% peor que el del mes de julio. La inflación descontrolada -intensificada por el encarecimiento de la energía debido a la guerra entre Rusia y Ucrania- y el empeoramiento de las expectativas económicas para después del verano están empujando a las empresas a adquirir comportamientos defensivos y a la moderación -como mínimo- del empleo.
Tan solo India mejora en un mes de julio con un empeoramiento generalizado.
Si bien para los países europeos (ni el «Big Four» ni el conjunto del total aprueba) el PMI de julio fue dramático, el comportamiento no fue igual en todos los lugares del mundo. No obstante, dentro del pool de 10 economías que hemos seleccionado tan solo una obtuvo una mejora en su PMI industrial de julio.
De hecho, la variación promedio del PMI industrial de las diez regiones seleccionadas fue de una caída del 2,65%. A pesar de que Estados Unidos (52,3), Reino Unido (52,1), Japón (52,1) y China (50,4) registraron una actividad industrial en expansión, su PMI manufacturero del julio empeoró. Tan solo India (56,4) obtiene -además de ser el país con mejor puntuación- una mejora del 4,64% con relación al sexto mes del año.