The Wine Luthier es la primera herramienta, de ahí su nombre, que transforma datos analíticos objetivos de un vino en una imagen que define su perfil gustativo, su sabor, ofreciendo a las empresas que trabajen con él toda la información necesaria sobre los productos de su portafolio y los gustos de sus consumidores. Es un instrumento de trabajo para enólogos, bodegas y distribuidores.
Se trata de un proyecto desarrollado íntegramente en Valencia de la mano de su fundador, el enólogo e ingeniero agrónomo Diego Fernández Pons, que ha trabajado con algunos de los más prestigiosos científicos y matemáticos de la Comunidad Valenciana en su desarrollo. El epicentro del proyecto es el laboratorio en el que se analiza cada uno de los vinos en base a criterios científicos y algoritmos que rápidamente permiten colocar el vino en una realidad 4D, que después pasan a 2D para hacerlo tangible.
El “catador virtual” es capaz de situar el vino en su lugar de origen sencillamente con el análisis, pero además es capaz de compararlo con el resto de vinos del mundo. Actualmente el desarrollo se ha completado en la fase del gusto, lo que denominaríamos “boca” del vino, pero ya trabajan en la segunda de las variables, el olfato o “nariz”, en la que entrarán todos los aromas y matices que es capaz de percibir nuestro olfato en un vino. Así analizan Crisp (impresión de acidez), Mellow (volumen en boca), Sweet (dulzor) y Grip (cómo de sólido es el vino)
Diego Fernández y su equipo llevan siete años trabajando con el proyecto y ya tienen analizados miles de vinos de todas las zonas productoras mundiales, y pronto serán decenas de miles. El proyecto, único a nivel mundial, marca un antes y un después en la industria del vino, pues todas las catas que hasta ahora se hacen de los vinos responden a criterios subjetivos.
En el último año llevan realizando innumerables pruebas de la mano del mayor distribuidor del mundo del vino en Europa, radicado en Alemania, que ha sido la primera gran empresa en ver el potencial de un proyecto como Wine Luthier. Y sólo ha sido el primer paso, pues han mostrado mucho interés en Wine Luthier líderes de distribución en países como Francia, Suiza, los países escandinavos y España.
Si esos datos son del mundo del vino, los enólogos, bodegas y distribuidores tendrán a su alcance una información vital en la toma de decisiones. El proyecto no ha hecho más que arrancar, y en una de sus próximas fases desarrollará una app que pondrá la herramienta al alcance del consumidor final. Éste podrá escanear la carta de vinos de un restaurante y Wine Luthier le dirá cuál de ellos le va a gustar más.