Qué hace un cordero sobre una balsa de plástico cargada de garrafas. Quién sierra a la poesía o quién se adentra en unos pozos para despertar su conciencia. Cuando hay preguntas, hay curiosidad; pero sobre todo, hay conexión con el arte. Y ese objetivo es el que, a priori, la exposición “Fragilidades” ha conseguido.

La propuesta escultórica y audiovisual de Aguas de Alicante viene de la mano de dos artistas muy diferentes. Por un lado, este peculiar espacio cultural (los antiguos Pozos de Garrigós), ofrece la irreverencia del vasco José Ángel Uberuaga (Gernika) -alias Ube-, y por otro, el viaje en imágenes del artista local Rafael Maestro (Torrevieja).

Ambos llevan en su propuesta un alegato a favor de la naturaleza a través del choque, de lo explícito y de las fragilidades de animales, plantas y nuestro entorno natural.
Las pequeñas y acústicas salas del Museo de Aguas de Alicante son un escenario donde el visitante queda cautivo. No hay distracciones sobre lo que ve, porque Ube lleva su propia reflexión a unas esculturas hechas con piezas hiperrealistas como son los animales y los residuos. Por su parte, Maestro incentiva la reflexión mediante unas propuestas que tratan de “sensibilizar al espectador desde un punto de vista poético y sutil, con la fragilidad de la vida como hilo conductor“.

Un viaje junto a la cultura
La exposición quiere ser una lectura transversal, directa, breve y de impacto directo para despertar una conciencia colectiva. Está creada ad hoc para este espacio situado en el barrio de Santa Cruz junto al castillo de Santa Bárbara. “Fragilidades” es la primera actividad de un programa pionero sobre el Arte y el Medio Ambiente que quiere tener un largo viaje. En este arranque, Aguas de Alicante ha contado con la Universidad de Alicante para la organización de charlas que giran alrededor de la propuesta.

El director de Relaciones Institucionales de Aguas de Alicante, Martín Sanz, subraya que el objetivo final es que este ciclo sea “un punto de encuentro, un punto de inflexión de artistas locales y de otros territorios” pues la iniciativa está planteada, en principio, con un carácter anual. “Nada es al azar”, aseguró el escultor en la inauguración de la exposición. Y, a tenor de su explicación, su obra para este entorno “mágico” está impregnada de valores, respeto y críticas hacia el maltrato animal. Depende de todos.