Si una empresa llega a ser centenaria, ese adjetivo tiene varios significados. El primero hace referencia al difícil logro de haber sabido mantenerse en el tiempo a lo largo de varias generaciones. Pero hay una segunda lectura igualmente destacable. Una empresa que supera hoy en día los cien años de actividad, ha sido capaz no solo de adaptarse sino de sobrevivir a las convulsiones y fracturas propias del siglo XX : sus dos guerras mundiales, la guerra civil española, la posguerra y la dictadura, las distintas crisis económicas o la fuerte irrupción de las nuevas tecnologías que todo lo cambian y lo dejan obsoleto cada vez a más velocidad.
Reconocer públicamente su buen hacer y su absoluta resiliencia fue lo que animó a la Asociación de la Empresa Familiar de la provincia de Alicante (Aefa) y la Cámara de Comercio, en colaboración con la Diputación y la entidad Cajamar, a organizar la Gala de Empresas Centenarias, un emotivo acto cuya primera edición se celebró ayer tarde en el Teatro Principal de Alicante y en el que se premió a nueve de estas empresas.
El evento contó con la presencia del alcalde de Alicante, Luis Barcala; el presidente de la Diputación, César Sánchez; los presidentes de Cámara y Aefa, Juan Riera y Francisco Gómez, respectivamente; y el director territorial de Cajamar, Manuel Nieto.
Tras las palabras de bienvenida a cargo del alcalde, se inició la entrega de reconocimientos a las empresas centenarias homenajeadas en esta edición. La primera distinción recayó en la empresa Verdú Cantó Saffron Spain de Novelda. El promotor del Museo Comercial de Alicante y actual presidente de la Asociación Mármol de Alicante, David Beltrá, fue el responsable de entregar el reconocimiento a Raimundo Verdú y Luis Durá.
El presidente de Aefa, Francisco Gómez, fue quien entregó al consejero delegado de La Alcoyana, Antonio Arias y a María Jesús Arias su premio. Gómez recordó que “las empresas son un elemento fundamental para el desarrollo de nuestra sociedad, y hoy queremos reivindicarlo” y en este sentido incidió en que “ahora más que nunca, debemos poner en valor la figura de la empresa y del empresario”.
El presidente de la empresa de Santa Pola, Bras del Port, Jaime Gamba, y la exconsejera y accionista, María Cuervo-Arango y Cienfuegos Jovellanos recibieron su reconocimiento de manos de Miguel Ángel Paredes de KPMG. Otro de los premios fue recogido por el presidente ejecutivo de Chocolates Valor, Pedro López, de mano del director territorial de Cajamar en Alicante, Manuel Nieto.
Para Nieto “ las empresas que perduran en el tiempo son aquellas que se caracterizan por las buenas prácticas y la gestión responsable, por su capacidad de adaptación y su constante innovación”.
También fue homenajeada la compañía alicantina Fernando Flores. El vicepresidente de la Diputación de Alicante, Carlos Castillo, hizo entrega del distintivo a Mario Flores y Beatriz Girón del Grupo Flores.
El presidente honorífico de Unión Alcoyana Seguros, Enrique Rico, y el director general Enrique Jorge Rico recibieron asimismo su distinción de manos del presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Juan Bautista Riera.
Riera manifestó que junto a esta gala «vamos a poner en marcha un Club de Empresas Centenarias de la provincia que tendrá su sede en la Cámara. Queremos con ello dar a conocer una parte importantísima de la historia empresarial de nuestra provincia, ponerla al servicio de la sociedad y de los investigadores y con esta labor divulgativa, crear vocaciones empresariales entre nuestros jóvenes”.
La celebración de la gala continuó con el premio para Aguas de Alicante, que fue entregado por el alcalde de Alicante, Luis Barcala, a Francisco Bartual. Otro de los reconocimientos recayó en Harinas Andrés Serrano. Toni Cabot, director del Club Información fue el responsable de entregar dicho distintivo. El último galardón fue para Almendra y Miel. La vicepresidenta de Aefa, Maite Antón, hizo entrega del galardón a Isabel Sirvent, Beatriz Sirvent y José Manuel Sirvent, representantes de la entidad homenajeada.