El diseño aporta 3.762 millones de euros a la economía valenciana
¿Cuánto aporta el diseño a la economía de la Comunitat Valenciana? Esta pregunta es la que trata de responder el estudio realizado por la ADCV con el apoyo de la AVI y que ha contado con el soporte técnico de GfK.
Se trata del primer estudio de impacto económico que se realiza sobre esta actividad que, como señaló Kike Correcher en la presentación, «es como el paisaje, algo natural, que está ahí, una riqueza invisible».
Resumiendo: el sector productor de diseño aporta 3.762 millones de euros a la economía de la Comunitat Valenciana. Su peso respecto a la economía productiva de los sectores no primarios es del 2,1%. Es, por tanto, un sector relevante en la estructura productiva.
GfK ha realizado 1.345 entrevistas a empresas de todos los sectores y tamaños
Para llegar a esta conclusión, además de utilizar datos conocidos -INE, CNAE, etc- GfK realizó 1.345 entrevistas a otras tantas empresas de la Comunitat Valenciana de todos los sectores y todos los tamaños, para conocer la aportación del diseño en su actividad. Para ello se han incorporado cuestiones como si consideran al diseño como un coste o una inversión; número de patentes, incorporación de diseñadores o actividades.
Dado que se trata del primer estudio de esta naturaleza que se realiza en la Comunitat Valenciana, por lo que no es posible realizar comparaciones ni hacer un seguimiento. Pero, desde luego, sirve de base para posteriores desarrollos y profundizar en aspectos que no se abordan en este trabajo pionero. Un estudio que contempla tanto datos cuantitativos -lo que no se mide no se puede controlar ni conocer su evolución- y cualitativos: cómo ha influido su incorporación en la productividad de las empresas.
Las empresas que incorporan el diseño con una visión estratégica son más innovadoras y productivas
Entre las conclusiones más relevantes del estudio destaca que la productividad de las empresas que incorporan diseño es del orden del 30% superior a las que no lo utilizan. Se trata de un uso profesional y, generalmente, estratégico. Este tipo de compañías lo han incorporado a la cultura de la empresa y es una herramienta normal del trabajo diario y lo utilizan todas sus disciplinas: industrial, gráfico, packaging, informático, publicitario, audiovisual, de comunicación, de procesos, de marca de servicios …
Y, correlativamente, las empresas más productivas son más innovadoras. El 23,8% de las empresas utiliza el diseño en todas sus variantes y el 70% lo considera una inversión necesaria para obtener un beneficio. El problema se origina en que todavía las empresas no han identificado claramente cómo medir ese retorno de la inversión.
El estudio revela que el sector del diseño es poco exportador. De hecho, su ámbito de actividad en la mayor parte de los casos se circunscribe al área regional. Se trata, además, de un sector con alta cualificación profesional que, sin embargo, están mal remunerados.
Los estudiantes matriculados en estudios de diseño han aumentado un 60% en sólo 8 años
Por último, el estudio pone énfasis en el auge de los estudios relacionados con el diseño, como demuestra que en ocho años el número de alumnos matriculados en centros oficiales ha crecido un 60%, lo que supone que el 5% de los estudiantes de la Comunitat Valenciana. Las matrículas ingresadas en 2018 por estos estudios fue de 7 millones de euros que, comparado con 2010, supone un incremento del 585%.
Además de la conclusiones, el estudio realiza una serie de recomendaciones. La primera de ellas es actualizar los sistemas de clasificación nacional de datos. No existe correlación, por ejemplo entre el CNAE 7410 (actividades de diseño especializado) y el Impuesto de Actividades Económicas. La falta de una codificación estadística sobre la actividad del diseño dificulta el tratamiento de la información, así como realizar comparaciones con la realidad internacional y, por supuesto, realizar una mediciòn del sector.
La divulgación del estudio es otra de las recomendaciones, partiendo de la conclusión de que las empresas que incorporan diseño y, sobre todo, las que lo usan como herramienta estratégica, son más innovadoras y productivas. Para ello será necesaria la colaboración no sólo de las administraciones públicas, sino también de las organizaciones empresariales representativas.
La creación de un Observatorio del Diseño serviría para fomentar la investigación y poner las bases de un plan de acción
Para fomentar esta mayor sensibilidad empresarial, el informe sugiere establecer una deducción fiscal en el impuesto de sociedades a las empresas que incorporen diseño, similar a la que se aplica por actividades de I+D+i.
También recomienda una mejora en la formación en diseño, favoreciendo la vinculación entre el ámbito académico y el profesional.
Por último, el estudio sugiere la creación de un Observatorio del Diseño que se encargue de dar continuidad a este tipo de trabajos que miden el impacto económico del diseño; fomente la investigación y asiente las bases de un plan de acción del diseño valenciano.
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