La fase final de las obras del acceso sur al puerto de Gandia se encuentran muy avanzadas y está previsto que finalicen y puedan ponerse en servicio la primera semana del próximo mes de abril, según han informado este lunes los responsables del proyecto del Ministerio de Fomento.

El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha visitado esta mañana las obras, junto al delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, y la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, en las que se han invertido 25 millones de euros.

Ábalos ha destacado que esta obra «consolida» la importancia del puerto de Gandia y la de la Autoridad Portuaria de Valencia en general, y es además un elemento de «cohesión«. Esta infraestructura, ha añadido, «trasciende» el mandato de un gobierno y exige políticas «razonadas y sensatas«, por lo que ha agradecido la labor de los anteriores gobiernos que tuvieron la visión «estratégica» y la impulsaron.

Por su parte, la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, ha señalado que este nuevo acceso posibilitará que la ciudad sea más «competitiva«, ya que además de resolver problemas de movilidad y de seguridad hará que el sector turístico «se vea libre de la circulación de carga pesada» que atravesaba el municipio.

«Esta obra es fruto de la declaración de interés general de esta infraestructura por parte del Gobierno de España de hace más de una década«, ha recordado Morant, así como de la ambición de la ciudad de Gandia y del apoyo del Gobierno y «a pesar de las dificultades» económicas.

Características del proyecto

Del total de 25 millones de inversión en el proyecto, 21 millones de euros se han destinado a la ejecución de las propias obras y el resto a asistencias técnicas asociadas y a las expropiaciones necesarias, según ha informado el Ministerio de Fomento en un comunicado. El objetivo de esta actuación es evitar que el tráfico portuario acceda a través del entramado urbano del municipio de Gandia y, con ello, mejorar sustancialmente la funcionalidad de la circulación local.

El nuevo acceso portuario, con una longitud de 4,2 kilómetros, cuenta con cuatro intersecciones a nivel, tipo glorieta, que dotan total permeabilidad al territorio. El tramo comprendido entre la N-332 y CV-670 (kilómetros 0,000 a 2,500) dispone de dos calzadas separadas con dos carriles cada una, y entre la CV-670 y el puerto la vía adopta una sección de carretera convencional (un carril por cada sentido de circulación).

El nuevo vial dispone además de control total de accesos, y se han proyectado caminos de servicio junto a la traza de la carretera, han indicado las mismas fuentes. Ante el carácter periurbano de la actuación, se ha contemplado la iluminación parcial del viario, así como la ejecución de una acera peatonal y un carril bici a lo largo de toda la margen izquierda de este.

El proyecto ha recogido la reposición de la vía verde Gandía-Oliva, a través de un paso inferior de 147 metros, y el nuevo vial prestará servicio directo al hospital comarcal Francesc de Borja de Gandia, resolviendo los problemas de seguridad vial y capacidad del entorno, especialmente severos en época estival.

Entre las actuaciones complementarias se ha construido un viaducto sobre el río Serpis, en su desembocadura, una estructura mixta de 190 metros de longitud y 17,60 metros de ancho, a la que se ha proporcionado un tratamiento urbano e integrado totalmente en el paisaje. EFE