Libertas 7 ha cerrado la temporada turística con una facturación de 1,2 millones de euros, un incremento del 13% respecto a la temporada anterior. La actividad turística del Grupo se centra en la explotación de tres edificios de apartamentos en la urbanización Port Saplaya, en Alboraya (Valencia), activos sobre los que se estructura la nueva división de negocio turístico.

La cotizada valenciana ha desarrollado una estrategia en la que apuesta por invertir en la mejora de la calidad de los activos que gestiona con el fin de incrementar su valor en el mercado, mejorar la propuesta que hace a sus clientes y superar la estacionalidad que afecta al conjunto de la actividad turística.

En este sentido, en Port Saplaya se han invertido más de un millón de euros para la renovación de la propuesta turística, incrementar la calidad de los servicios y otras actuaciones para mejora la explotación de los activos e incrementar su rentabilidad.

Este complejo suma en total 76 viviendas con una oferta de más de 400 camas, con altos índices de ocupación durante toda la temporada turística. Los resultados de explotación de estos activos se han obtenido en un entorno empresarial complejo, con una disminución de la llegada de turistas en toda la zona mediterránea que sólo en el mes de julio ha supuesto un descenso del 6,9% respecto al año anterior.

El descenso de visitantes, la estacionalidad del sector y otros desafíos como el resurgimiento de otros destinos, son afrontados desde Libertas 7 a través de un modelo de gestión avanzada, basado en una gestión más boutique que industrial, dirigido hacia la inversión en activos de calidad.