EsLife, plataforma de intermediación de servicios de limpieza online pionera en el sector, invertida por Angels e impulsada por Plug&Play Spain y Lanzadera, ha introducido su plataforma de servicios profesionales en cuatro nuevas ciudades españolas: San Sebastián, Santander, Pamplona y Vitoria; sumándose así a las ciudades donde la compañía ya ha consolidado su actividad con más de 16.000 servicios realizados hasta la fecha.

Gracias a la gran aceptación de sus servicios por parte de los usuarios, EsLife, que comenzó su andadura en 2012, ha decidido ampliar su cobertura geográfica. Actualmente, cuenta con 17.000 profesionales registrados en su plataforma, que cubren todo tipo de tareas del hogar (limpieza por horas, planchado, limpieza de ventanas y cristales…), todos ellos seleccionados tras un exhaustivo proceso de selección y avalados por el equipo de recursos humanos de la compañía, para asegurar siempre la máxima calidad de los servicios.

En menos de dos años, la empresa ha conseguido posicionarse en algunas de las principales ciudades españolas. Además de Madrid, Barcelona y Valencia está presente en catorce capitales o ciudades de primer orden.

EsLife es reconocida como la plataforma online de referencia para delegar tareas de limpieza de un modo cómodo, eficaz y seguro. Cuenta con dos palancas diferenciales: los procesos de selección que realizan, todos ellos de forma personal para garantizar que los profesionales que ofrecen a través de su web cumplen sobradamente los estándares de calidad requeridos; y la aplicación de las nuevas tecnologías, con todas las posibilidades que ofrecen. Además, en los próximos meses lanzarán su app móvil, lo que permitirá a los usuarios acceder desde cualquier dispositivo a la contratación de sus servicios, garantizando una mayor comodidad y grandes avances en la comunicación entre los usuarios y los profesionales.

Los usuarios de EsLife disponen de dos garantías principales: un seguro que la compañía tiene, por valor de medio millón de euros, para cubrir cualquier imprevisto que pueda surgir; y el hecho de que el profesional no recibe el pago por sus servicios hasta que el cliente no confirma a EsLife que está satisfecho. A finales de 2014 la compañía alcanzó una facturación bruta de más de más de 350.000 euros.