Pablo Ossorio

La bodega, situada a las afueras del municipio valenciano de Requena y en un caserón del siglo XIX, ha conseguido, en menos de diez años, producir vinos y cavas blancos y rosados de alta calidad. La producción supera las 90.000 botellas anuales y un tercio de las mismas se exportan a Europa, Estados Unidos y Japón. Además, ofrecen estancias exclusivas para los amantes del enoturismo.

Sus tres socios, –Rafa Navarro, Marc Grinn y Pablo Ossorio–, han logrado convertir a Bodegas Hispano Suizas, en menos de diez años, en una referencia de calidad con los tintos Bassus, el blanco Impromptu, o los cavas blancos y rosados Tantum Ergo.

Sus caldos de alta gama han sabido hacerse un hueco en el mercado nacional, “rompiendo prejuicios sobre los vinos valencianos y de la zona de Utiel Requena en especial”, explican los responsables de la bodega.

Actualmente, Bodegas Hispano Suizas están produciendo algo más de 90.000 botellas entre vinos y cavas, teniendo en cuenta que el tercio de la producción se exporta al resto de Europa, Estados Unidos y Japón.

La bodega ha apostado por colocar sus vinos en el segmento medio/alto y, sobre todo, por un público atrevido que busca algo diferente y de calidad.

Entre los reconocimientos que ha obtenido esta bodega se encuentran: mejor bodega española del año 2012 en los premios Verema.com; mejor espumoso de España para la Asociación de la Prensa del Vino; mejor blanco en la Guía de Vinos 2013 de la Semana Vitivinícola (SeVi); mejor cava rosado de España en 2012 en la Guía Peñín; además de 96 puntos para el cava Tantum Ergo que lo sitúa en el cuadro de honor del Anuario 2014 entre los grandes de España, entre otros.

Este esfuerzo ha propiciado también que los  vinos de las Bodegas Hispano Suizas estén presentes en restaurantes tan emblemáticos como el recientemente premiado como el mejor del mundo, El Celler de Can Roca, El Poblet (3* Michelin) o en las mejores tiendas especializadas como Lavinia, entre otras.

En opinión de sus responsables, el éxito de esta bodega se fundamenta en compartir una idea clara, “la de reinterpretar la producción y elaboración de las variedades que mejor se han adaptado al terruño del entorno de Utiel-Requena para sacarles el máximo partido con vinos modernos, complejos, de alta calidad pero y que no están hechos solo para otros enólogos sino para el público que quiere disfrutar de un vino a lo largo de una comida”.

El buque insignia de Bodegas Hispano Suizas es el Quod Superius, un vino de edición limitada (3.000 botellas) que se ha elaborado con variedades de Utiel-Requena mezclando la uva autóctona Bobal con las foráneas Cabernet Franc y Merlot. Este vino tinto pasa 30 meses en barrica de roble y dos años más en botella.

Otro vino que también incluye en su elaboración la uva Bobal es el Bassus Premium que va acompañada por Cabernet, Merlot, Petit Verdot y Syrah, lo que ha dado lugar a un coupage único tras veinte meses de barrica.

Por su parte, el Bassus Pinot Noir es otra de las peculiaridades de la apuesta de Hispano Suizas por la innovación. Sus enólogos toman la variedad francesa (Pinot Noir), que en los suelos de Requena da vinos elegantes, y pasa diez meses en barricas francesas. Este es el tinto más joven de todos los que producen y ha sido definido como exótico y con un suave toque de madera.

Además, en las Bodegas Hispano Suizas solo se elabora un blanco, el Impromptu, un monovarietal de Sauvignon Blanc que se fermenta en barricas de cuatrocientos litros y que sale al mercado al inicio del verano tras un envejecimiento con sus lías (levaduras encargadas de realizar la fermentación alcohólica). Este se ha posicionado varios años como el mejor de España en su variedad en la Guía Peñín y en la última cosecha fue elegido el mejor vino blanco por Antonio María Casado, en la Guía de la SeVi.

GRANDES CAVAS

Aprovechando la larga tradición de Requena, otra de las apuestas de esta joven bodega han sido los cavas. La diferencia está en que el foco se ha puesto en el Champagne más que en los cavas tradicionales. De esta forma, los Tantum Ergo se elaboran con las uvas Chardonnay y Pinot Noir para el blanco y esta última variedad también se utiliza para el rosé.

Estos cavas son afrancesados en la variedad, el coupage y en la forma de elaboración, con vinos base que han fermentado en barricas de 400 litros para ganar complejidad en el largo paso en rima, nada menos que más de 22 meses.