En la actualidad, algunas personas utilizan el reciclaje como una ideología destinada a salvar el medio ambiente y dar más igualdad a los diferentes grupos sociales. Si bien es cierto que ayuda a reducir el impacto negativo que la humanidad tiene en el medio ambiente, también forma parte de un sistema económicamente viable. Su práctica efectiva depende en gran medida de las pequeñas acciones que cada persona realiza en su día a día, sin distinción de su pertenencia social.
¿Qué es el reciclaje?
La estrategia de procesar materiales de desecho para convertirlos en nuevos materiales y objetos se llama reciclaje. Es un componente clave de la reducción moderna de residuos, al depender de la capacidad que tiene el material de volver a adquirir las propiedades que tenía en su estado original o muy similar a estas. Para promover la sostenibilidad ambiental mediante la reducción de la demanda de materias primas y la reconducción de propósito de los residuos en el sistema económico.
En una aplicación ideal del concepto, el reciclaje de un material produce un nuevo suministro del mismo tipo sin cambios aparentes. Pero algunos tipos de materiales no pueden ser reciclados indefinidamente en el mismo artículo y tienen que ser transformados en otro objeto reciclado. Evitando su desecho en vertederos o incineradores. No hay que olvidar que es una de las actividades más antiguas de la humanidad. Y también una de las que tiene más potencial de crecimiento en el presente.
¿Cuáles son los beneficios del reciclaje?
El reciclaje forma parte de una ética de eficiencia medioambiental. Conserva recursos y materiales naturales cada vez que se fabrica un producto a partir de residuos reciclados. Anualmente, la cantidad de energía perdida por tirar productos reciclables como latas de aluminio y periódicos equivale a la producción combinada de 15 centrales eléctricas medianas. Pero eso no es todo, también ayuda a reducir la contaminación de los gases siempre verdes al requerir menos procesos para hacer el mismo producto reciclado con casi la misma calidad.
Otro gran beneficio del reciclaje es que crea una industria manufacturera fuerte y diversa, que origina puestos de trabajo y aporta altos salarios en los estados y localidades donde se lleva a cabo. Al participar en el proceso de reciclaje, las comunidades logran una mayor estabilidad económica y garantizan la sostenibilidad de su entorno. En algunos países subdesarrollados el reciclaje ha sido la principal fuente de ingresos para algunos de sus habitantes más vulnerables, incrementando su actividad durante eventos económicos adversos.
Aparte del ahorro de recursos, la disminución de contaminantes y los beneficios económicos, el reciclaje se centra sobre todo en hacer más sostenible el mundo en el que vivimos. Al mismo tiempo que mantiene el flujo de productos y recursos necesarios sin gastar grandes cantidades de reservas naturales. También garantiza a las generaciones futuras la oportunidad de desarrollarse y prosperar en un entorno más saludable. Incluso mejora la relación de las sociedades actuales, dándoles objetivos comunes para experimentar, crecer y lograr sinergia económica.
Diferentes tipos de reciclaje
Hay muchas formas de clasificar el reciclaje, como el grado de procesamiento antes del uso, el tipo de material o la capacidad de reciclaje repetido. La mayoría de ellas son un poco complicadas y no tienen casi ninguna utilidad práctica en el día a día. Sin embargo, el uso del grado de procesamiento necesario para reutilizar un artículo podría ofrecer una forma muy precisa de diferenciar los diversos artículos aptos para el reciclaje. Este se divide en tres niveles principales: primario, secundario y terciario.
El reciclaje primario es el que permite recuperar o reutilizar un material o producto reciclable sin alterar su estado actual. Los reciclables secundarios se reutilizarán sin tener que reprocesarlos. El material puede ser reutilizado de una manera diferente a la que se pretendía inicialmente. Esto ocurre a menudo con las manualidades de bricolaje. El reciclaje terciario implica la alteración química de los productos o materiales para hacerlos reutilizables. Los materiales reciclables se recuperan y se vuelven a procesar en una instalación diseñada para ello.
La regla de las 4R del reciclaje
Llevar un estilo de vida más sostenible puede ser muy gratificante y, a veces, un poco desalentador. Por suerte, hay cuatro pasos fáciles de seguir que podemos aplicar en la vida diaria: reducir, reutilizar, reciclar y recuperar. Estos pasos son mucho más gratificantes si se utilizan en el orden mencionado, ya que proporcionan muchos más recursos y reducen el consumo de otros, sin impedir nuestra calidad de vida. A continuación, explicaremos con un poco de detalle qué son las 4R.
El primero es Reducir, que significa, como su nombre indica, reducir el uso de recursos en las actividades cotidianas. Pues ya sea que reduzcas tus residuos, consumo de agua o hábitos de compra, un pequeño esfuerzo hace mucho por el medio ambiente. Luego está Reutilizar, que es tan sencilla como parece. Cuando reutilizas productos, puedes aprovecharlos varias veces de múltiples maneras. En lugar de tirar sé creativo, en todas partes hay un sinfín de formas de reutilizar artículos que irían a la papelera.
La tercera Reciclar, que significa convertir los residuos en nuevos productos. Sin embargo, la creación de residuos es inevitable y algunos no son reciclables. Es recomendable producir la menor cantidad posible de residuos, pero a la hora de deshacerse de ellos es importante seleccionarlos, limpiarlos y tirarlos al contenedor de reciclaje correspondiente. Por último, pero no menos importante, es recuperar objetos que podrían acabar en los vertederos. Solo hace falta un poco de creatividad para dar nueva vida a esas cosas olvidadas.
¿Cómo el reciclaje ayuda a la economía?
El reciclaje ayuda a la economía, ya que satisface una parte importante de la demanda de recursos materiales. Debido a que alivia la presión sobre los ecosistemas, al proporcionar recursos y asimilar residuos aptos para el desarrollo humano. El reciclaje ya logra satisfacer en ciertas regiones proporciones sustanciales de la demanda de algunos grupos de recursos. Especialmente el papel y el cartón, el hierro, el acero y otros metales de baja demanda. Sin embargo, ni siquiera el máximo reciclaje puede hoy día cubrir toda la demanda de recursos.
Actualmente el crecimiento del reciclaje está impulsado por el aumento de la demanda de materiales reciclables en los países emergentes. Pues el reciclaje puede mejorar la “seguridad de los recursos”, pero el crecimiento económico impulsado por un consumo de materiales cada vez mayor no puede sostenerse. Ya que requiere un volumen infinito de recursos. El reciclaje también reduce el costo de la eliminación de residuos al requerir menos vertederos e incineradoras, y permite el uso de esos terrenos en el desarrollo económico.