Uno de los objetivos principales de toda empresa es generar utilidad a sus accionistas. Y obtener el mayor beneficio por su inversión es la meta de todos aquellos que invierten su capital en algún negocio, no importa si es grande o pequeño. Por eso disponer de las herramientas necesarias para evaluar el beneficio y el rendimiento neto del capital es imprescindible. Hoy te vamos a presentar uno de los indicadores financieros más importantes para conocer la rentabilidad de una empresa: el ROE.
El indicador financiero más utilizado y confiable para determinar el valor de la rentabilidad del capital de inversión, en la actualidad, es el ROE, (Return on Equity), o “la rentabilidad sobre el patrimonio neto” según su acepción en español. Este indicador permite conocer de forma rápida y precisa la situación real del rendimiento del capital de la empresa. Y si el capital está dando los frutos deseados o, si por el contrario, se deben realizar ajustes a ciertos parámetros para asegurar su rentabilidad.
¿En qué consiste el ROE?
El ROE, (Return on Equity) es una muy confiable herramienta financiera utilizada, desde hace ya cierto tiempo, por la banca y en general por todas las empresas. Su finalidad es dar a conocer si el capital invertido está dando el rendimiento deseado. En otras palabras, los resultados obtenidos por su aplicación nos van a indicar si la empresa está dando ganancias o pérdidas y en qué medida. Esta información es fundamental para determinar el éxito o el fracaso del negocio.
Consiste básicamente en la medición de la rentabilidad obtenida sobre los recursos propios de la empresa, expresados en forma matemática. Es decir, el cálculo de utilidad neta sobre la base de los capitales invertidos por sus accionistas expresado de forma numérica. Así, los accionistas y asociados tendrán una información clara y precisa del comportamiento económico de la compañía y los resultados obtenidos en un periodo o ejercicio económico. Y estos resultados son expresados en forma de porcentajes positivos o negativos.
De los resultados obtenidos por esta ratio de eficiencia, puede depender el capital actual y futuro de la empresa. Si el resultado obtenido es demasiado bajo o inclusive hasta negativo, quiere decir que la gestión económica de la compañía en general, es mala o negativa. Y posiblemente sus posibilidades de crecimiento muy bajas o nulas. Tampoco estará en capacidad de aportar a sus accionistas o asociados la utilidad esperada. Lo que puede ocasionar que decidan retirar su capital de inversión.
¿Cómo se calcula el ROE?
A pesar de su gran importancia como indicador de eficiencia para las empresas, el cálculo del ROE es sumamente sencillo. Solo se necesita la intervención de dos valores variables. El valor del beneficio neto, después de deducir gastos e impuestos y, el monto de inversión de fondos propios. Sabiendo que estos últimos son el resultante de restar a los activos los pasivos exigibles de la empresa. Expresados numéricamente en la siguiente fórmula matemática.
ROE = Beneficio neto / Fondos Propios.
Esta sencilla fórmula matemática es la responsable de mostrar la rentabilidad obtenida por la empresa durante su ejercicio económico o un periodo de tiempo determinado. Y, algo que no se puede olvidar, ni dejar de lado es que, aunque la matemática es una ciencia exacta la alimentación de sus datos depende del factor humano. Es decir, que la fiabilidad de los resultados de este cálculo está directamente ligado a la veracidad de la información suministrada por las personas a cargo.
Por esta razón, es de vital importancia para la empresa y los accionistas asociados la veracidad en los datos suministrados. Una información equivocada o errónea arrojará resultados diferentes y que no corresponden a la verdadera situación de rendimiento y eficiencia de la compañía analizada. Lo que puede conllevar a una equivocada toma de decisiones basándose en los resultados obtenidos. Esto traerá como consecuencia la posible descapitalización de la empresa. Si el rendimiento presentado está por debajo del deseado, lo más seguro es que los accionistas se retiren.
¿Qué importancia tiene para inversores?
Como es bien sabido el objetivo principal de toda inversión es obtener la mayor rentabilidad posible del capital invertido en un negocio. Es decir, mayor de la que se pudiera obtener en cualquier otro. Nadie quiere invertir para perder su dinero. Y, con el fin de prevenir este tipo de situaciones, se han creado los indicadores financieros. Estos tienen como única función analizar y dar a conocer a inversores y accionistas la información del rendimiento obtenido por la empresa con base al capital aportado.
Contar con un indicador de la eficiencia de la empresa es algo muy importante para cualquier persona que invierte o piensa invertir su capital en ella. El ROE es considerado uno de las ratios indicadoras de eficiencia y rentabilidad más importantes y utilizados por las empresas de todos los diferentes sectores económicos. Es un indicador muy útil para seguir la evolución de la empresa. Además, también ayuda a ver la capacidad de generar beneficios sobre el capital depositado por los accionistas, inversores y asociados en ella.
La importancia del ROE como ratio indicador financiero, radica en que muestra la rentabilidad financiera del capital invertido. Lo que a su vez permite a los inversores emitir un juicio sobre la gestión de la gerencia al conocer de qué manera se está utilizando el capital aportado. En consecuencia, el ROE trata de medir la capacidad que tiene la empresa de multiplicar el capital invertido y brindar una mayor rentabilidad a sus accionistas sobre la base de su capital aportado.