Pero tener la seguridad de que estamos contratando con la empresa correcta es un factor decisivo que nos puede garantizar el éxito o, por el contrario, producirnos un perjuicio.
Como consecuencia de lo anterior, debemos tener en cuenta una serie de cautelas a la hora de contratar con otra empresa para conocer a fondo con quién contratamos y tener la certeza de que será una transacción segura. A continuación, vamos a exponer 5 errores comunes que suelen cometer las empresas a la hora de contratar con otras:
1.- No conocer bien a la empresa.
Uno de los errores más habituales que cometen las empresas a la hora de contratar con otras empresas, como proveedoras, por ejemplo, es no saber con quién están contratando, ni conocer unos datos mínimos de la empresa para saber dónde tiene su domicilio social, cuál es su actividad, cuántos trabajadores tiene, qué ratio de solvencia tiene etc. Todos esos datos se pueden recabar fácilmente a través de informes de empresas.
2.- Decidir demasiado rápido.
Muchas veces tanto a la hora de contratar personal como a la hora de contratar a otra empresa, tendemos a decidir demasiado rápido porque podemos tener una urgencia por obtener un determinado producto o servicio, pero es necesario tomar las decisiones con tranquilidad y con el tiempo que sea necesario para valorar todos los aspectos del producto o del servicio a contratar y de la empresa que los ofrece.
3.- No considerar diferencias horarias, de idioma o culturales.
Las empresas extranjeras pueden suponer una buena opción, pero debemos considerar aspectos tan importantes como las diferencias horarias que pueden dificultar la prestación de un servicio, el idioma que puede suponer que la comunicación no sea tan fluida o los contrastes culturales que deben tenerse muy en cuenta en el trato con países con diferencias culturales muy importantes, respecto a nuestro país.
4.- No comparar la oferta.
El hecho de tener la presión de decidir demasiado rápido porque tenemos una urgencia en nuestra empresa, nos puede llevar a no comparar adecuadamente las ofertas de varios proveedores, de forma que podamos ver los precios y los servicios ofrecidos por cada uno y valorar adecuadamente qué es lo que necesitamos y qué empresa se va a adaptar mejor a esa necesidad.
5.- Considerar sólo el factor del precio.
Las empresas que comienzan y a veces las empresas que tiene más años de experiencia, pueden llegar a considerar sólo el factor precio a la hora de elegir a una empresa dejando de lado quizás a proveedores que por un precio algo más elevado ofrecen un servicio de muy buena calidad. Por lo tanto, debemos evitar considerar sólo el factor precio como algo decisivo para elegir una empresa y contratar con ella, para cotejar otros beneficios que puedan aportar las diversas empresas que comparemos para contratar un producto o servicio.