Pero, en la actualidad, ahorrar costes es un objetivo que persiguen muchas empresas, es más, existen muchas fórmulas para ahorrar que están incluso bien vistas por los clientes, por ejemplo, las que apuestan por el reciclaje o por las energías sostenibles.
Se puede conseguir ahorrar costes de empresa sin que el producto final y el servicio se resientan en calidad y atención al cliente, es más, es incluso posible conseguir que el ahorro también se traduzca en una renovación de algunos servicios de la empresa.
El ahorro empresarial consiste en buscar la forma de gastar menos, pero sin que la actividad empresarial se resienta de forma notable y, lo que es más importante, sin que el cliente note efectos negativos en el ahorro.
Formas de reducir costes de empresa hay muchas, esta es una selección de algunas de las principales para conseguir una importante reducción de los gastos que tiene el negocio.
1. Una buena planificación económica
¿Cuánto se gana y cuánto se gasta? Sí, parece básica la idea de que los ingresos de dinero deberían tener su correlación con los gastos, pero, hablando del mundo empresarial no siempre es tan fácil.
Los inicios suelen suponer un gran desembolso de dinero que después, se irá recuperando cuando el negocio despegue (o, al menos esa es la teoría). Un férreo control de ingresos y gastos es el primer paso para conseguir ahorrar.
2. Compara ofertas de los proveedores
¿Cuánto hace que no revisas los precios que ofrecen los proveedores? Puede que haya llegado el momento de revisar los precios y las cantidades que se firmaron en su momento.
La producción en muchas empresas ha decaído y, quizás sea el momento de hacer una reducción de cantidades que se solicitan a ciertos proveedores, puede que el precio unitario aumente un poco, pero se reducirá el total y, además, el espacio de almacenaje.
O, por el contrario, se hacen pedidos por pequeños importes pero de forma continua a uno o varios proveedores, puede que haya llegado el momento de formalizar estas compras de una compra más grande, y reduciendo el precio total.
Cambiar de proveedor no siempre es fácil, confianza y fiabilidad se adquieren con el tiempo, pero, en época de ahorro el dinero cuenta, y puede que haya llegado el momento de buscar proveedores que ofrezcan un servicio similar por un precio inferior.
3. Externalizar servicios
No siempre es necesario contratar personal, de hecho, la externalización es cada vez más popular entre las empresa, principalmente, por el importante ahorro que pueden suponer en algunos departamentos.
4. Revisar los gastos básicos
Son los gastos necesarios para que la empresa puede realizar su actividad, pero ¿No podría pagarse menos por ellos? Electricidad, agua, teléfono, Internet, alquiler, seguros están entre estos gastos básicos esenciales para el funcionamiento empresarial y, en muchas ocasiones, por costumbre o por falta de tiempo, no se revisan.
Cuando se busca cómo ahorrar costes de empresa estos deben figurar entre los primeros a revisar: gestos tan sencillos como cambiar el tipo de bombillas, tener una tarifa plana de telefonía e Internet a medida de la empresa pueden suponer una importante reducción del gasto.
5. Tecnología práctica
La tecnología es básica para la empresa, pero ¿es necesario cambiar los equipos y dispositivos con frecuencia? ¿Es esencial que los trabajadores tengan dispositivos básicos de última generación?
Apostar por calidad y asegurarse de un buen mantenimiento de los equipos es una importante forma de ahorrar sin que los servicios se resientan.
6. Estar al día en subvenciones
Existen muchas ayudas, subvenciones, bonificaciones o reducciones fiscales a las que las empresas se pueden acoger, y en muchos ámbitos diferentes, desde la contratación de personal hasta la reducción de energía, pasando por reformas o renovaciones de productos o vehículos.
Estar informado sobre las ayudas es tan sencillo como suscribirse a alguna de las ventanillas para empresas que existen a nivel local o regional, el ahorro puede ser importante.
7. ¿Es necesario imprimir y fotocopiar?
Fotocopias e impresiones están entre los gastos más elevados de empresas, por suerte, en la era digital, las impresiones no siempre son necesarias ¡y se puede ahorrar mucho en ellas!
Impresiones digitales, facturas online, scanner de documentos son algunas de las ventajas de la era digital y suponen un buen ahorro. Además de un gesto que ayuda a frenar la tala de árboles.
8. Comunicaciones en la era de la tecnología
Si las fotocopias y las impresiones en papel masivas se cambian por impresiones digitales, ¿por qué no hacer algo similar con los servicios de comunicación con clientes, proveedores y distribuidores?
Apostar por la comunicación digital es cómodo, sencillo y más rápido y, lo mejor de todo, supone un importante ahorro para las empresas.
9. Revisar las condiciones del banco
Las comisiones bancarias son uno de los grandes bancos a los que se enfrentan las empresas, sobre todo, las que son pequeñas. Puede que sea el momento de revisar las condiciones y de buscar un banco que no tenga menos comisiones para los gastos básicos que realiza tu empresa: por ejemplo, en transferencias o movimientos de dinero.
10. Ahorrar no es ser tacaño
Ahorrar es un objetivo que persiguen muchas empresas y si se hace de forma inteligente no es necesario justificarlo ante los clientes porque estos no lo notarán en la calidad de los productos o servicios.
La clave para ahorrar no es conseguir el máximo ahorro a cualquier precio. Una reducción de gastos de éxito es aquella en la que el empresario es capaz de conseguir servicios y materiales que se ajusten a las necesidades y al presupuesto de la empresa, pero manteniendo el mismo nivel de calidad.