Continúan llegando malas noticias financieras desde la banca suiza. Si la semana pasada era Credit Suisse, la segunda mayor entidad del país helvético, la que anunciaba unas pérdidas de 4.060 millones de euros; en esta ocasión es el Banco Nacional de Suiza quien informa de que ha sufrido una pérdida de 142.400 millones de francos (143.300 millones de euros).
Este sería el resultado que durante los primeros nueve meses del año habría cosechado la entidad, de los que casi la totalidad, 141.000 millones de francos, son el resultado negativo de sus posiciones en divisas extranjeras.
Sin embargo, desde el Banco Nacional de Suiza quitan hierro al asunto y afirman que el resultado del tercer trimestre no puede presuponer el anual. La entidad también ha recordado que este resultado ha dependido en gran medida de la evolución de la cotización del oro, las cuales experimentaron una pérdida de 1.100 millones de francos (unos 1.107 millones de euros al cambio actual).
Credit Suisse da más detalles
Tras dar a conocer la semana pasada lo preocupante de su situación financiera, que la coloca en una de las peores crisis de sus 166 años de historia, Credit Suisse dio más detalles el lunes detalles sobre sus planes para recapitalizarse. El objetivo es ambicioso: lograr recaudar 4.000 millones de euros.
Según indicó el banco en un comunicado, el precio de referencia de las acciones que pondrá a la venta en las dos ampliaciones de capital previstas será de 4,07 francos suizos, equivalentes al precio medio de las participaciones en la Bolsa de Zúrich los pasados días 27 y 28 de octubre.
De acuerdo con el banco, nuevos inversores en la entidad se han comprometido a comprar 462 millones de nuevas acciones con un descuento del 6 % con respecto al precio de referencia mencionado, con los que se espera recaudar 1.760 millones de francos suizos.
Dinero saudí
Esos compromisos incluyen 307 millones de nuevas acciones que serán adquiridas por el Banco Nacional Saudí, que con esta operación poseerá un 9,9 % de las acciones de Credit Suisse, como ya se anunció el pasado 27 de octubre, cuando la entidad helvética adelantó su vasto plan de reestructuración para salir de la crisis.
Tras esta operación, se emitirán 889 millones de nuevas acciones, disponibles solo para actuales inversores del Credit Suisse y a un precio un 32 % por debajo del de referencia, con lo que se espera una recaudación de 2.240 millones de francos suizos, para completar el plan de ampliación por 4.000 millones de francos.
Como ya adelantó la entidad helvética la semana pasada, la primera ampliación de capital en la que participa la banca saudí y otros «inversores calificados» será sometida a votación en una asamblea extraordinaria el 23 de noviembre.
El plan B
Existe la posibilidad de que a los accionistas no les convenza la operación y la rechacen. En ese caso, el total de las acciones a la venta se ampliaría hasta los 1.767 millones de euros, con lo que de igual forma se obtendrían los 4.000 millones de francos que el banco se ha fijado como objetivo.
Credit Suisse también indicó el lunes el nombre de los bancos que participarán en la ampliación de capital, proveyendo servicios de administración y correduría. Entre ellos figuran grandes nombres como Deutsche Bank, Morgan Stanley, RBC Capital Markets, Société Générale, ABN Amro, Banco Santander y Bank of America, entre muchos otros.
El plan de reestructuración de la segunda mayor entidad suiza supondrá una reducción de 9.000 empleos (el 17 % de la plantilla global), 2.000 de ellos en Suiza.