Grandes distribuidores de la Alimentación como Consum, Mercadona o Lidl destacan el papel que están jugando sus trabajadores en las tareas de recuperación de los establecimientos para la reactivación del servicio. En la industria ocurre lo mismo, unos trabajadores ayudan a otros trabajadores y así lo han compartido con nosotros desde Inalsa, ubicada en Aldaia y Gervasio Belda, con sede en Riba-roja de Túria. La competencia pasa a un segundo plano y lo importante y por encima de todo está la recuperación y la puesta en marcha de la actividad y el servicio.
Consum está trabajando a contrarreloj para recuperar las tiendas en las poblaciones más afectadas: Paiporta, Catarroja, Massanasa, Alfafar, Algemesí, Picanya, Aldaia, Benetússer y Sedaví. Según sus datos, la cooperativa cuenta en la provincia de Valencia con 340 tiendas y en esta zona en concreto con 80 establecimientos.
En concreto, la evolución de apertura, y según los datos facilitados por la cooperativa, a 31 de octubre había 22 tiendas cerradas, de las que tres están en el municipio de Paiporta, dos en Aldaia y dos más en la localidad de Algemesí y permanecieron abiertas 16 tiendas, -dos de ellas en Alaquàs y una en Aldaia- y 14 Charter, En cuanto al número de Charter cerrados en esa misma fecha, la cifra ascendía a 17 tiendas, dos de ellos en Cheste. A 6 de noviembre ya había 27 tiendas abiertas y 17 cerradas entre las que se encuentran tres de Paiporta afectadas y dos de Aldaia.
Sobre los Charter, a 6 de noviembre había 21 Charter abiertos, que ha subido a fecha de 11 de noviembre, uno más y 8 continúan cerrados.
Fuentes de Consum informan también que están aprovisionando las tiendas del entorno con fin de reforzar el servicio a las zonas afectadas. Indican también que los trabajos de apertura, limpieza y rehabilitación se realizan siguiendo las indicaciones de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Apoyo al bienestar de los trabajadores
Por otra parte, la cooperativa ha puesto en marcha esta semana un Plan de Donaciones a fondo perdido y Préstamos a 0% de interés para ayudar económicamente a los cerca de 1.000 trabajadores de su plantilla que han sido afectados por la DANA. En concreto, la cooperativa abre el Plan de Donaciones entre Trabajadores gracias al cual los empleados podrán apoyar a sus compañeros mediante donaciones voluntarias hasta el próximo 24 de noviembre a través de transferencia bancaria o bizum y la Cooperativa aporta a dicho plan un total de cuatro millones de euros.
La suma total de donaciones, incluidos los 4 millones de euros aportados por Consum, se repartirá a través del Comité Social, el máximo órgano de representación de los socios trabajadores de la Cooperativa, entre los compañeros afectados según el grado de afectación que hayan sufrido.
Además, con el objetivo de ayudar a la plantilla a cubrir la pérdida de viviendas, vehículos y enseres de su propiedad a consecuencia de la DANA, se ha aprobado una línea de crédito para que la plantilla pueda solicitar préstamos al 0% de interés y dos años de carencia, avalados por el capital social o por la cooperativa en el caso de los socios trabajadores con menor capital social o trabajadores no socios.
El importe de estos préstamos variará en función del capital social obligatorio que tenga cada socio y del grado de afectación de sus bienes, con un máximo de 52.000 euros para socios con igual o mayor capital de 26.000 euros y un máximo de 26.000 euros para socios con menor capital social o no socios. El plazo máximo de devolución de los préstamos para socios trabajadores es de 5 cinco años, incluidos dos años de carencia.
Estas dos líneas de apoyo se suman a la vía urgente de solicitud de anticipo de nómina que la Cooperativa anunció el pasado 2 de noviembre y a la que se pueden acoger los trabajadores de Consum afectados por el temporal para cubrir sus necesidades básicas más inmediatas.
Los trabajadores, un pilar importante para las reaperturas
En estos momentos, Mercadona reabrió la semana pasada la tienda de Albal y la de Picanya gracias a la colaboración de todos los trabajadores y continúan cerradas siete establecimientos más que están ubicados en Catarroja, donde cuenta con dos tiendas, Massanassa, Benetússer, Paiporta, Aldaia y Algemesí.
Po otra parte, la compañía, comprometida con los afectados por la DANA, refuerza las medidas llevadas a cabo desde el inicio de la catástrofe bajo una premisa: “Hacer todo lo que sea necesario y hasta cuando sea necesario, porque ahora es el momento de la cercanía”, tal y como manifiesta Laura Cruz, directora de Acción Social de la compañía y coordinadora del equipo humano especializado en donaciones, obras y logística de Mercadona y encargada de gestionar todas las acciones de colaboración.
Mercadona, desde los inicios de la catástrofe, ha estado implementando medidas centradas principalmente en la donación de productos de primera necesidad a entidades sociales para las personas afectadas (alimentación, equipamiento, materiales, etc.) alcanzando más de 300 toneladas entregadas en coordinación con sus proveedores; en acompañar a sus trabajadores afectados; y en la colaboración con las autoridades mediante la aportación de diferentes recursos.
En el caso de sus trabajadores, la compañía, a quien a todos los afectados directos les trasladó en su momento que priorizasen por lo realmente importante (familia, hogar, etc.) sin que ello fuera a alterar su retribución y sin recuperar el tiempo destinado a ello, ha facilitado la movilidad para que puedan desplazarse a su puesto de trabajo y ha activado a 1.000 trabajadores voluntarios, procedentes de otros departamentos de la compañía, para ayudar en las tareas de adecuación y limpieza de las tiendas, con el objetivo de poder abrir lo más pronto posible y dar servicio a los vecinos.
En cuanto a la colaboración con autoridades, entre las últimas medidas llevadas a cabo destaca que la compañía ha puesto a disposición de la Conselleria de Servicios Sociales asesoramiento y apoyo logístico, además de un almacén de 7.000 m2 en Picassent (Valencia) para canalizar las donaciones, de ceder el espacio de L’Alquería del Basket a las unidades del ejército desplazadas a la zona como base de operaciones, y prestar vehículos de transporte para el reparto de ayudas.
Lidl comienza a recuperar la normalidad en su almacén de Cheste
Desde Lidl España, además de expresar sus más sinceras condolencias y solidaridad con todas las personas afectadas por la DANA explican a Economía 3 que están colaborando estrechamente con las autoridades locales y autonómicas para apoyar a su plantilla y proveedores, con el fin de restablecer el servicio a los vecinos de las zonas más afectadas lo antes posible.
Fuentes de la compañía informan que su almacén de Cheste, uno de los más grandes de la compañía en Europa, la situación empieza a recuperar ciertos niveles de normalidad previos a la DANA. Explican que «en estos últimos días, nos hemos apoyado en los centros logísticos más cercanos de Lidl en el país, que cuenta con 13 almacenes en total, para seguir garantizando el suministro de surtido en la mayoría de las tiendas de la Comunitat Valenciana y también en las Islas Baleares». Gracias al esfuerzo del equipo de Lidl y a la liberación de la mayoría de los accesos por carretera en la zona van recuperando la actividad en Cheste.
Igualmente y gracias a esta recuperación de Cheste han podido gestionar diferentes donaciones de productos de primera necesidad (agua, pañales, productos de higiene, alimentación seca, etc.) a las organizaciones que están gestionando las ayudas en las zonas afectadas.
Además, la compañía está trabajando para garantizar el suministro de productos básicos a todas las tiendas de la Comunitat Valenciana. «En los últimos días, -informan- hemos logrado restablecer la actividad en buena parte de las tiendas de la zona cero que se habían visto más impactadas por los efectos de la DANA y vamos a seguir priorizando este objetivo en el resto de las tiendas todavía afectadas a medida que vayan cesando las restricciones de acceso«.
Paralelamente a estas actuaciones, en los primeros días de la tragedia, -recalcan fuentes de la compañía- implantaron un plan de ruta especial para priorizar el suministro de agua, productos higiénicos y de limpieza a las tiendas de Valencia y su periferia, en cuyas zonas se ha visto más afectado el acceso a dichos productos.
Lidl cuenta actualmente con una red de más de 75 puntos de venta y emplea a cerca de 1.600 personas en la Comunitat Valenciana. Gracias a su actividad, su impacto económico en esta comunidad ronda los 860 M€ anuales aportados al PIB (un 0,85% del total) y supera los 18.400 empleos directos, indirectos e inducidos generados (un 0,89% del total), según datos de PwC.
¿Y la industria?
Dolores Arocas, gerente de Inalsa, empresa ubicada en Aldaia con cerca de 70 años de historia y dedicada a la distribución de menaje de cocina en madera y en metal nos explica los daños que han sufrido en su nave de 5.000 m2 donde se almacenan la mercancía.
«Nos ha entrado un metro y medio de agua en nuestros almacenes y toda la mercancía que estaba paletizada en planta baja es género que se ha estropeado y que hay que tirar a la basura, ya está documentada y se lo han llevado los servicios de limpieza», explica.
Informa también que han tenido suministro de luz desde el primer día y en cuanto al de agua, solo han sufrido cortes esporádico0s, aunque han contado algunos días con un «hilo de agua«. Sin embargo, a día de hoy no tienen conexión a internet. Para solucionarlo, han abierto un expediente de averías pero como la cantidad de empresas afectadas es tan grande, están a la espera de que les toque el turno.
Arocas apunta también que su facturación como consecuencia de los efectos de la DANA caerá alrededor de los 450.000 euros y las pérdidas reales a precio de coste pueden estar alrededor de 200.000 euros, además de la maquinaria como apiladores o enfardadoras que se han perdido y que sumarán entre 50.000 y 60.000 euros más a los daños.
«Teníamos toda la mercancía preparada para hacer frente a la campaña de Navidad y servirla a lo largo de este mes. Esto pasa el 1 de diciembre, un mes después, y no nos hubiéramos visto prácticamente afectados», apunta Dolores Arocas.
La semana posterior a la DANA se dedicaron a destruir mercancía inservible. A lo largo de esta semana, los trabajadores junto con la ayuda de una empresa de limpieza que han contratado se van a dedicar a quitar el barro. «El lunes 18 comenzaremos a trabajar con el agravante de que todos los ordenadores se han inundado porque estaban en el suelo. Por ello, nuestro informático está trabajando para recuperar la información que albergaban dichos ordenadores y para comprar equipos nuevos. Si logramos salvar la información que recogían los discos duros habremos avanzado mucho«, asegura Dolores Arocas. Con lo cual, «el lunes podremos empezar a servir mercancía a nuestros clientes pero no sé si podremos facturar», subraya.
Solidaridad ante todo
Gervasio Belda una empresa ubicada en Riba-roja de Túria en el polígono El Oliveral y fabricante de instalaciones industriales, principalmente para el sector cerámico, ha decidido poner su grano de arena ayudando a sus vecinos.
Carlos Camp, su director de Operaciones, explica que su compañía no sufrió daños importantes, «mientras que otras sí que los han sufrido». Por ello, sus recursos humanos se dedicaron la semana pasada a ayudar a empresas del polígono y zonas afectadas, entre los que se encuentra clientes y proveedores.
«Toda la plantilla, desde administración hasta los torneros, ayudó los primeros días a la limpieza de empresas vecinas más afectadas que nosotros. Durante la semana pasada enviamos técnicos a empresas del sector afectadas, para ayudarles a poner sus instalaciones en marcha lo antes posible. A otras empresas les hemos cedido parte del almacén para recepcionar pedidos hasta que puedan acceder a sus almacenes o incluso hemos prestado furgonetas a proveedores cuya flota a quedado destruida«, nos informa Camp.