La Generalitat Valenciana aplaude la llegada a un acuerdo comercial sobre el Brexit, alcanzado el pasado 24 de diciembre, pero admite que queda mucho trabajo por hacer. Uno de los asuntos que más preocupan al gobierno valenciano es la emisión de los visados británicos y los «obstáculos burocráticos» que estos puedan suponer para la población británica a la hora de entrar en nuestra región.

«Queremos que haya una apertura de consulados de España en el ámbito de Gran Bretaña para que el gobierno británico pueda aumentar su presencia en nuestro territorio», ha expresado el president de la Generalitat, Ximo Puig. En este sentido, Puig ha pedido al Gobierno de España «agilidad» en la expedición de estos documentos.

Tras la llegada de un acuerdo para el Brexit, esta mañana el President de la Generalitat, Ximo Puig, se ha reunido con los eurodiputados valencianos José Manuel García-Margallo e Inmaculada Rodríguez-Piñero para analizar cómo afecta el nuevo escenario, que entrará en vigor el 1 de enero, a la Comunitat Valenciana.

Tal y como ha anunciado en la rueda de prensa posterior Ximo Puig, la Generalitat pondrá a disposición de todos los británicos que vivan en la región un teléfono de ayuda y apoyo para que tengan acceso a toda la información sobre la nueva situación.

En esta línea, Puig ha asegurado que se mantendrán todos los servicios públicos para la los británicos que residan en la Comunitat y que representan «un tercio de todos los que viven en España», en un ejercicio de «corresponsabilidad y responsabilidad».

«El día 1 de enero, si una persona británica se pone mala puede ir perfectamente al centro de salud y será atendido como siempre», ha destacado el President, quien ha reiterado que «el servicio público valenciano de salud estará a su lado» y «no cambiará nada en los aspectos esenciales de su vida».

Sobre el tamaño del impacto que tendrá el Brexit en la economía valenciana, Puig ha admitido la dificultad de medir cuáles serán las repercusiones de la salida de Reino Unido para la Comunitat ya que «no se sabe exactamente el impacto que tendrá en Gran Bretaña» y «cualquier cosa que pase allí tendrá efectos aquí». «Habrá menos impacto del que hubiera habido si no hubiera habido acuerdo», ha subrayado.

Por su parte, García-Margallo ha admitido también que «hay dudas sobre cómo se materializará el tráfico comercial», sobre todo en lo que respecta a las pequeñas y medianas empresas, a las cuales «habrá que prestar una ayuda importante», ha añadido.

García-Margallo: «Hay dudas sobre cómo se materializará el tráfico comercial»

«Nosotros queríamos el menor Brexit posible, y en eso estamos trabajando ahora» ha afirmado Puig, quien ha explicado que en los próximos meses diseñarán un plan de actuación para todos los sectores económicos de la Comunitat.

Estatus jurídico de los residentes británicos

Sobre la situación jurídica de los residentes británicos en la Comunitat, Puig ha explicado que es competencia del Gobierno de España y habrá que esperar a la aprobación del Real Decreto Ley que tendrá lugar mañana en el consejo de ministros y que abordará esta cuestión.

El eurodiputado García-Margallo ha remarcado la importancia de garantizar la seguridad de los británicos que vienen aquí con necesidad de visado una vez transcurridos los 90 días.

«Corresponderá al President trasladar al Presidente del Gobierno la posibilidad de cerrar consulados en la UE y abrirlos en el Reino Unido, que al dejar de participar en ese concepto de ciudadanía europea necesitarán esos servicios», ha expresado.

Según ha explicado el eurodiputado, las tasas consulares son superiores a lo que supone la emisión de visados. «Por tanto, es una operación incluso rentable desde el punto de vista financiero», ha añadido.

Además, García-Margallo ha subrayado la necesidad de «vender mejor» la Marca España en Reino Unido, sobre todo en materia de sistema sanitario, debido a que la atención sanitaria y la seguridad será uno de los aspectos contemplados por quien quiera pasar unas vacaciones en la región.

Por su parte, la eurodiputada Inmaculada Rodrígez-Piñero ha admitido que «queda mucho trabajo por hacer» y que «muchos aspectos dependerán de las relaciones bilaterales entre el Reino Unido y España». En esta línea, la eurodiputada confía en que el gobierno británico también ofrezca un teléfono («y los mecanismos necesarios») para atender a los valencianos que vivan allí.

A pesar de esto, Rodríguez-Piñero ha puesto en valor el acuerdo comercial alcanzado «en tan solo un año» ( cero aranceles, cero cuotas) que ofrecerá un marco de seguridad jurídica para las empresas importadoras y exportadoras y para defender los intereses de la economía valenciana en el nuevo marco de relaciones.

La eurodiputada ha defendido la importancia de mantener unos estándares sociales, laborales y medioambientales para evitar la competencia desleal y la deslocalización, así como de garantizar los derechos de los ciudadanos, también de los valencianos que están en Reino Unido.

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