-Injusa es una empresa que trabaja con muchas licencias de marcas conocidas.¿Tienen a la vista incorporaciones?
En las licencias separamos en dos tipos, las infantiles (como Disney, Marvel, Frozen…) y las deportivas (Kawasaki, Mercedes), unas más dirigidas a niños y niñas y las otras para el target de los padres, porque suele ser el padre quien es motero o le gusta el Porsche, por ejemplo.
Nuestros productos se compran para niños desde los 6 meses a los 12 años de edad, y entre 4 y 6 años es muy difícil que alguien diga quiero el correpasillos de Injusa, si no es por una licencia conocida. Además, el niño no distingue entre Honda CBR o el último modelo de Aprilia, pongamos por caso.
En definitiva, se trata de dos franjas y es más estable la deportiva, la infantil tiene una vida más corta. Marcas como ahora Frozen pegan fuerte uno o dos años y luego viene el bajón. En cambio, Mercedes o Jaguar siempre están ahí, no se produce tanto pico de consumo.
-Eso les permite también una producción más planificada, no tan estacional como el juguete clásico. ¿Alguna novedad entonces?
Efectivamente, con Mercedes, Honda, Kawasaki, Aprilia, Porsche, Ford, Volkswagen… Y para 2020 hemos firmado un acuerdo con BMW, aun no puedo adelantar el tipo de producto, tardamos cuatro años en el desarrollo y tenemos previsto arrancar a finales de 2020.
-¿Qué atractivos tienen para los niños estos juguetes, con los que emulan a los mayores, en el caso de los coches de alta gama?
Están las réplicas exactas y hay también una parte de fantasía, pero para un niño de 2 años resulta difícil replicar, lo adaptamos y luego ya para los de 3 a 5 años sí fabricamos réplicas idénticas de producto, más para coleccionismo.
Se juega con unas motivaciones “aspiracionales”: tanto el padre aspira a que su hijo lleve la misma moto que él en pequeño, como también el niño aspira a emular a su padre
-¿Qué esfuerzo inversor significan para la compañía estas licencias?
Sobre todo, negociaciones, hay que sopesar varias cosas. Depende de la marca, una como Kawasaki pide contratos leoninos, pero luego cuando ven que para la ZH Ninja, solo la primera producción ya te supone una inversión de 600.000 euros, entienden que es de interés para ambas empresas. Está en función de qué te vas a gastar en mi marca. Y luego hay un mínimo de royalties.
-¿Qué competencia tiene la compañía con otras del sector en este segmento?
A nivel europeo, Famosa con Feber a la cabeza, toda la industria asáiática, nosotros…, a ver quién llega antes. Hay algunos modelos que no tienen atractivo, no quiere decir que no sean bonitos, pero tienen menos venta de cara al público.
La batalla entre asiáticos y europeos es por ver quién coge el mejor producto, adelantarse. El año que viene va a salir una nueva moto, de “refresco” de una que ya es famosa, por ejemplo. Tambien tienes la familia que no quiere potenciar para nada esa afición por las motos y los moteros en su hijo.
-No es su caso, porque se le conoce la afición por ese mundillo, asiduo de la Penya l’Herberet de Ibi…
Mi familia siempre ha tenido esa inclinación por el mundo del motor, el motociclismo. Estamos actualizados con las novedades, en su momento patrocinamos el Campeonato de España de Motociclismo.
-En el caso de marcas relacionadas con los dibujos animados, cine, TV…. ¿Hay alguna novedad para esta campaña de Navidad? ¿Y de otros modelos de su gama, aunque no sea con marca conocida?
Se prevé “Frozen 2” como la más potente, aunque va a pillar un poco tarde de cuando se estrenó la película, estamos al final de la campaña ya, pero para el año que viene se notará.
«Para 2020 hemos firmado un acuerdo con BMW, aun no puedo adelantar el tipo de producto, tardamos cuatro años en el desarrollo y tenemos previsto arrancar a finales de 2020»
En el caso de Injusa, la evolución del consumo nos ha sorprendido, es curioso y difícil de explicar: hemos subido con tendencia al alza en productos de mayor precio. Nuestro rango es tremendo, de 19 a 600 euros, y en conjunto hemos pasado en tres años de 32 euros en 48 de precio medio, y hacemos 500.000 vehículos distintos. El año pasado fue bueno, este puede ser mejor.
-Tal vez ese tipo de juguete de licencias deportivas se cotiza mejor que las baratijas de poca durabilidad.
Es posible, pero nos tiene despistados. Son estándares de más calidad, por ejemplo, con Mercedes, pero parece que si nos centramos en España, el consumo está un poco parado, con el tema político no se aclara nadie y los productos que tiran del carro son los de mayor precio.
-¿En qué posición se encuentra Injusa entre las empresas con más ventas en Francia?
La número 12 a fecha de 30 de septiembre del sector juguete. Es un ranking trimestral. También, en el top 10 de las empresas que más crecen en Europa, concretamente en el puesto 5.
-Tradicionalmente, este mercado era el primer destino de exportaciones jugueteras y ahora ha sido superado por Portugal, ¿qué acciones prevé Injusa para reforzar o mejorar su posicionamiento al norte de los Pirineos?
Hay una pequeña “trampa” o apariencia engañosa con algunas estadísticas: Portugal no es de los países más importantes por volumen de compras; Francia sí, por la población, lo que ocurre es que muchas empresas españolas que están en Portugal se facturan entre ellas.
Francia ha sido el mercado natural durante mucho tiempo, si bien para nosotros el Reino Unido era el más importante digamos en la era “pre-Brexit”, con ventas mayores que en Francia y España. Nos ha afectado muchísimo porque la libra está en posiciones que a nosotros nos sitúa como muy poco competitivos y el Brexit y se llevó por delante la mitad del sector del juguete. De 4 millones de exportación pasamos a 200.000 euros, se han registrado caídas brutales, mientra aquí el crecimiento está en un 3% y un 4% en Francia. Todo por el cambio libra-euro, que ha pasado de 1,36 en cuatro años a 1,15 ahora. Parece que se va aclarando.
-Su principal cliente exterior era el Reino Unido, ¿cómo se puede contrarrestar el efecto posible del brexit?
Hay una inseguridad, un porcentaje de la población no está de acuerdo, el dinero tiene mucho miedo y afecta a todo, la irrupción del mercado on-line, algunos clientes no han sabido adaptarse, tal vez.
Nuestro primer objetivo es cuidar a clientes que tenemos y recuperar a los perdidos y atraer a otros, tratamos de recuperar mercado, pero eso solo va a pasar cuando se estabilice. Si el brexit va para adelante, que sea con todas sus consecuencias y en el menor tiempo posible. De todas formas, nosotros seguimos asistiendo a exposiciones y ferias allí, por supuesto.
-¿Tienen alguna alianza con empresas galas o está prevista alguna colaboración?
Para nosotros es y ha sido como una provincia más de España, no es otro país con una política distinta, somos más parecidos. Tenemos nuestra pequeña delegación y llevamos allí 50 años presentes.
-¿Qué peso ideal deberían tener las exportaciones, en general, en su volumen de negocio? ¿Cómo adaptan sus gamas a los gustos de otros países?
Siempre ha representado la exportación entre el 70% y 80% de todo lo que vendemos, desde hace 27 años que estoy en la empresa, eso implica que no ponemos todos los huevos en la misma cesta. Un tema coyuntural como las elecciones en España no afecta al consumo del resto del mundo, pero si a Trump se le cruzan los cables, los cambios empiezan a mover el mercado, el dólar se puede devaluar. Las crisis entre palestinos y judíos, por ejemplo, influyen en otras variables.