Dos nuevos mausoleos alto imperiales aparecían ayer lunes 4 de septiembre de 2017, a mediodía, en la necrópolis oriental de la ciudad hispanorromana de Baelo Claudia, en Tarifa (Cádiz). El equipo científico embarcado en el proyecto de investigación “Muerte y Ritual Funerario en Baelo Claudia”, dirigido por el profesor de la Universidad de Alicante Fernando Prados Martínez, descubría estos hallazgos. Caídas encima de la calle localizaron también dos columnas de mármol pertenecientes a los monumentos funerarios. El arqueólogo adelantó que las columnas debieron caer por causa de un terremoto que hubo a mediados del siglo IV d.C. y este hecho ha motivado que los monumentos hallados cuenten con toda su decoración.

Esta necrópolis es una de las mejor conservadas del panorama hispano y se halla enclavada en un atractivo paraje de la costa gaditana que se ubica entre dos parques naturales, el del Estrecho de Gibraltar y el de Los Alcornocales.

El equipo científico está formado especialistas en arqueología romana, arquitectura, antropología y arqueosismología de las universidades de Alicante, Isabel I y Autónoma de Madrid, así como voluntarios de las universidades de Cadiz y Bruselas.

A los acontecimientos de ayer se añade el descubrimiento esta misma mañana de dos tumbas más, cremaciones y otros hallazgos en el área de los mausoleos ubicados junto a la puerta oriental de la ciudad o “puerta de Carteia”, lugar en el que el equipo se centra en la campaña actual.

Desde el 26 de agosto y hasta el domingo 10 de septiembre está teniendo lugar la 5ª fase del proyecto general de investigación “Muerte y Ritual Funerario en Baelo Claudia” que desarrolla este equipo interuniversitario, coordinado por Fernando Prados, del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH) de la UA.

Junto a la información sobre la arquitectura o el ritual funerario, los arqueólogos están detectando nuevas evidencias de un terremoto acompañado de un tsunami que tuvo lugar a mediados del siglo IV d.C. y que derribó parcialmente los citados monumentos y afectó a otros sectores de esta urbe fronteriza ubicada frente a las costas africanas.

Un pasado bajo la arena
El proyecto comenzó en 2012 y tenía previsión de acabar en 2017, pero se va a mantener vigente por el interés que está suscitando. Hasta la fecha y de forma continua a lo largo de todo el año, 200.000 personas visitan Baelo Claudia. La idea es abrir al público también la zona de la necrópolis. Prados dispone de autorización para excavar hasta julio de 2018. El estado de conservación de los restos es espectacular, ya que la mayor parte se halla sepultada bajo la arena de la playa.